(Marina)
A la mañana siguiente, comenzaron a llegar desde la ciudad todos los concursantes del torneo, también llego mi familia, a quienes les conté lo sucedido, Aytana estaba orgullosa, de mis logros por decirlo de alguna manera, y que decir de Abá, mi madre solo sonreía, ella sabía ya que yo era diferente a todos los Drakonianos, y estaba convencida de que solo faltaba que yo aceptara ser la Dama del Tiempo para que el don se revelara.
Al medio día comenzaría el torneo, y como éramos más de 160 los participantes las eliminatorias de lucha eliminarían a la mitad, de los que quedáramos, se realizaría una segunda eliminatoria, los siguientes serían sometidos a una eliminatoria mas pero esta vez se lucharía con el arma de preferencia, los últimos veinte, competiríamos en las pruebas ninja, una carrera de obstáculos lleno de trampas en los que habría que usar la inteligencia y la astucia para llegar a la meta, en esta carrera también habría enfrentamientos pero esta vez con los miembros del dojo, esta parte de la carrera podía ser mortal si no se tenía cuidado. Se esperaba que al menos dos terminaran la carrera, los cuales se enfrentarían entre sí, pero si solo uno ganaba la carrera este se enfrentaría contra tres de los maestros del dojo, uno de ellos sería el Maestro Tenji. Si lo derrotaba seria el ganador.
Como yo era la única mujer en la competencia todos los demás participantes se reían, pues no solo tenía la desventaja de mi sexo, sino que también era pequeña de estatura, lo que me hacia la competidora más débil, según ellos. Se llevarían una grandísima sorpresa.
La primera fue mi vestimenta, si esperaban que vistiera un uniforme de dojo común se equivocaron, Yo ya había avisado a los Maestros Kurosawa y Asano de que mis ropas serian una armadura de guerrera, pues eso fue lo que me informo Aytana, pero no la había visto. Cuando Aytana, Alma y Victoria me ayudaron a vestir, me sorprendió el diseño, sabía que lo había visto antes pero no lo reconocí hasta que Victoria dijo:
-Marina en verdad te vez magnifica, toda una amazona.
-gracia Victoria. – me volví para verme en el espejo y fue cuando lo vi completo, era una armadura de seda y cuero, parecida a la que usara Gail Gabot en la Mujer Maravilla, solo que los grabados eran de dragones, no los del diseño original, y era negro las botas simulaban escamas al igual que la falda corta. Las muñequeras están hechas de metal y Aytana me las pone.
-estas las hicieron para usted los armeros de la isla, es una aleación de titanio y oro, muy resistente y duro, los labrados representan a los dragones, de quienes desciende Drako e Hipólita en uno, por eso las dos joyas son un zafiro y un rubí, y en el otro están Aladar y su guardia de dragones ante Alía coronada con la gema Corazón de dragón, como no se ha vuelto a ver una joya como esa, la corona está formada por un topacio arcoíris, una gema muy rara.
-gracias, son hermosos. Y ya tengo una gema igual, le la regalo Alejandro, - y le muestro el ojo de Horus que llevo al cuello.
Como es invierno, llevare una capa de piel y seda fácil de quitar y con aberturas para mayor movimiento. Aytana me trenza el cabello pegado al cráneo en forma sesgada para que mi cabello quede sobre mi hombro, so sigue trenzando y lo sube por un lado de la trenza y la sostiene con unos broches en forma de pequeños dragones. Luego procede a ponerme una diadema para mantener mi cara despejada. Para terminar toma mis manos y me coloca cuatro anillos que cubren todo el dedo y terminan en garras, cuando las veo en mis manos, ella me dice.
-como guerrera dragón llevara estos, también son de la misma aleación que las muñequeras, la diferencia es que estos están cubiertos con turmalinas por eso los destellos. Los de gala son de platino y diamantes y las otras de oro cualquier otra joya según como sea la ocasión.
-espera, me estás diciendo que si visto de azul, las garras serán…
-de zafiros, tengo confianza en que usted ganara el reto, por lo que como reina podrá tener, por el momento estas son mi regalo, y su padrino le ha regalado las de zafiros, rubíes y esmeraldas, hechas en oro y sus padres las de diamantes hechas en platino.
-bien no sé qué es lo que les pasa a todos, están convencidos de que soy algo que aún no sé si será cierto, por favor tranquilícense, eso es estresante y esta semana podría terminar muerta si no estoy concentrada. Y no puedes intervenir Aytana, estarás en las gradas con mi familia.
-si alteza.