Capítulo 20

Después de la tragedia nos dispusimos a juntar los cuerpos de todos en dos montones diferentes, uno era para los policías; militares; civiles y etherquinesis, el otro montón era para los kinesis, los muertos en el primer grupo eran cerca de 43 personas y tres de ellos eran los etherquinesis que habían venido, en el segundo montón habían muerto 45 kinesis entre ellos mi hermana, Carlos el líder de las islas Ratas, Tahiel, Vice e Iván. Los cuerpos de casi todos fueron incinerados juntos excepto el de mi hermana y compañeros, ellos fueron quemado aparte para que no se juntara con las cenizas de los cuerpos del primer grupo, que consistía de los militares y demás, los tiramos al mar en conjunto, a pesar de que esa gente nos odiara se merecían una despedida digna como todas las personas, después tiramos las cenizas de los kinesis muertos al mar, mientras que yo subí a la misma colina en la que murió mi hermana para tirar sus cenizas, las quise tirar ahí para que sus cenizas volarán con el viento para que por primera vez después de mucho tiempo fuera libre.

Cuando volví al refugio, después de lanzar las cenizas de mi hermana, Catherine me habló de un tema que yo encontraba que aún no era oportuno de tocar.

—Tú tienes que ser nuestra líder – me dijo apenas estuvimos solas, estábamos afuera de la cabaña hablando solas para que nadie nos escuchara y todo a petición de la misma Catherine.

—Enloqueciste ¿verdad? – dije molesta ante su propuesta, no había pasado ni un día desde la muerte de mi hermana y ella ya estaba hablando del próximo líder que tendría su grupo – además yo ya tengo un grupo del cual me debo hacer cargo, y Kara solo lleva un día muerta, por lo menos respeta el luto.

—No enloquecí – me dijo seria, aunque no se veía enojada, solo estaba tranquila hablándome – solo quiero proteger a los kinesis y sé que Kara murió hace poco, pero necesitamos un nuevo líder.

—¿Por qué no eres tú la líder? – estaba enojada, estaba dolida, no podía creer lo que me estaba pidiendo; ella se sorprendió por mi pregunta.

—Porque yo no sirvo como líder – dijo volviendo a un estado neutral – solo sirvo para pelear y para nada más, hay gente que tiene madera para ser líder y esa eres tú Yael.

—Si no puedes ser tú, entonces busca a otra persona, porque yo no seré su líder – me aleje de Catherine y me fui al pequeño puerto de la isla que a este punto estaba hecho trizas, estaba furiosa por la simple razón de que me pidiera ser la líder de su grupo en menos de un día de la muerte de mi hermana, tenía ganas de irme y gritarle a la gente lo que el mundo en secreto nos hacía, No sé si fue la rabia o el dolor, pero no pensé mucho lo que hice a continuación, una de las cualidades de la photoquinesis, aparte de cegar a la gente, es que usas la luz como medio de transporte, por lo que mi tiempo de viaje es menor al del resto de los kinesis. 

Con la luz de mi lado viaje a la capital de Chile, ya era medio día y mucha gente había por los alrededores, era fácil llamar la atención, en especial por mi ropa. Observé el lugar y encontré una mesa en la cual me subí para luego ponerme a gritar.

—¡Escúchenme todos! – grité con toda la fuerza que tenía – ¡El gobierno de este país y los de todo el mundo les están ocultando muchas cosas que todos se merecen saber! – vi cómo se acercaba más gente y me escuchaba, también habían otros que me estaban grabando – ¡Yo soy una persona diferente a ustedes, soy una kinesis, tengo habilidades que aprendí desde que tengo 10 años, no soy una mala persona y tampoco soy una delincuente, solo soy una chica que quiso hacer algo más con su vida, y por eso el gobierno me tiene miedo y por eso me quieren detener y controlar, ellos les han escondido nuestra existencia por muchos años diciendo que muchos de los accidentes que pasan son hechos por delincuentes, pero la verdad es que somos nosotros los que provocamos eso porque gente que sí sabe de nuestra existencia nos provocan y hacen que creemos desgracias y ayer una de esas personas mató a mi hermana quien era inocente, los gobiernos nos juzgan solo porque somos diferente y les molesta que no nos pueden controlar; hoy he venido aquí para decirles lo que los gobiernos tratan de esconder a toda costa ya que nos tienen miedo y no deberían, somos buenas personas pero por los errores que nos obligan a cometer hacen que automáticamente seamos malos! – todos me miraban sorprendidos, me elevé y salí de ahí tal cual como había llegado, llegue a las islas Mhon en unos segundos, sin que nadie se diera cuenta de mi ausencia.

Después de algunos días decidimos por volver a las islas Laurie, el camino de vuelta fue tranquilo, cuando llegamos a Chile fuimos directamente a tomar el barco hacia la isla, No pasamos a ningún lugar, pero de todas formas era imposible darse cuenta que algo estaba pasando, en las pantallas que habían por las calles o gente que no usaba audífonos para escuchar sus cosas, se podía notar como mi visita hace días aún los perturbaba, como el mensaje estaba por todas partes.

Al llegar al barco, pedí prestados aparatos electrónicos como celulares y teléfonos para saber bien qué estaba ocurriendo, vi que los kinesis o mejor dicho yo, era la nueva imagen de toda internet, muchas personas en los comentarios de los videos pedían saber dónde estábamos para unirse y otros decían que lo que nos pasaba lo merecíamos, mientras el gobierno todos los días tenían que salir a dar explicaciones de lo que estaba pasando pero esta vez no pudieron desmentir lo que dije, solo les quedo decir la verdad; el video estaba traducido en todos los idiomas posibles y en todos los países, los presidentes o gobernantes, salieron a decir que ellos sí sabían de la existencia de los kinesis, claro ahora todos los gobiernos nos odiaban.