Los versos que le regalé.

Efímero

 

Una vez alguien me dijo que las casualidades no existen, que cada momento infinito a futuro se vuelve finito, que hay un propósito externo fuera de todo esto. Cada instante, cada acción, incluso cada persona que llega a nuestras vidas no llega por sí sola; tanto las que se atreven a quedarse como aquellas que están de paso, aquellas efímeras que llegan en un momento definitivo para darte una lección, secarte las lágrimas y luego, por más que no quieras…, se van. Por más que desees mantenerlas contigo, ellas, vuelven a su natalidad; pues, ese era su propósito, zarandearte y hacer que abrieras los ojos, enseñarte a volar y luego dejarte ir.
Yo, los llamo: visitantes. A aquellos que llegan y te impactan con su sencillez, con sus ojos tornasol llenos de sueños, ojos que te alientan el alma, te alegran la sonrisa y te suspiran el corazón. Te hacen amar su ser en el mínimo tiempo porque su esencia es como el perfume de las rosas o el olor de la lluvia en verano; o el aroma del café al amanecer. Esperar por ellos se te hace eterno, pues llegan cuando menos los esperas, llegan cuando no se les espera.



#30561 en Otros

En el texto hay: poema poesia y amor, versos del alma

Editado: 20.01.2019

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