Ese cabello Azabache bailaba lentamente con el ligero viento que hacía. Su espada gigante señaló al sujeto temblando frente a él.
¿Como te atreves a traicionar a tu país que muere? - preguntó molesto. Esos ojos marrones alegres, parecían opacarse.
Los humanos nos apresaron, tu más que nadie debes entender... Eres un Zodic - redondio mientamras su tobillo brillaba de blanco.
Nunca hay razones... Nunca hay una razón acertada para Matar a un inocente... Ni para traicionar... A tu pueblo, a su gente - dijo muy molesto - nuestro deber como soldado es proteger a nuestro país, y dejás que alguien Mate su única esperanza. Imperdonable - y en un abrir y cerrar de ojos. Lo cortó un costado.
Aah - escuchó un grito ahogado. Callendo al suelo aquella figura alta.
No puedo creer... Eres uno de los doce - dijo temblando aquella princesas - el demonio de dos caras.
No digas mi apodo por favor - dijo con una sonrisa mientras su espada se desvanecía.
Te ... Encontre - dijo con una lágrima.
Lo hiciste bien - dijo con una sonrisa - pero - su semblante se volvió Serio - no Tengo idea de dónde están los otros doce - dijo mientras salía - ven, o vendrán más soldados .
Si - dijo aún en shock.
....
¿Quieres decir que no sabes dónde están los doce? - preguntó muy desanimada.
Cuando nos emboscaros por "matar al rey "- dijo serio señalando las comillas con sus dedos - nos separamos, prometimos encontrarnos... Pero... No hemos podido. Nuestras rencompezas más altas. No podemos comunicarnos por ningún medio, ni si quiera el medio telepático de capricornio. Nos encontrarían.
Y ... No sabes si quiera si viven - dijo cabizbaja.
Si... Viven - la mirada de la princesa se alzó de inmediato.
¿Como lo sabes? - entonces se detuvo, llevaba mucho tiempo caminando en aquel bosque, un bosque que ni los más valientes se atreverían a cruzar, el bosque, Hebi.
Descansaremos aquí - dijo escalando un árbol - este bosque es conocido porque hay todo tipo de serpientes, por eso el nombre - dijo mientras sacaba unas cuerdas de su mochila, y hacia una especie de red, hasta lograr hacer una especie de amaca - sube - le dijo y está con un poco de complicación logró subir.
Desde aquí se ve el cielo - aclaro .
Sé que están vivos por esto - dijo sentándose en una rama gruesa, Mientras veía a la princesa quien estaba en la cama improvisada que el hizo. Se comenzó a desvendar su muñeca derecha, mostrando la razón porque lo tenía vendado.
En su brazo habían 12 puntos brillantes de distinto color : Azul, rojo, dorado, rosado, morado, blanco, negro, ocre, verde, celeste y marrón.
Cada uno de estos puntos representan a los doce - dijo cubriéndose la marca - es la marca de aquellos trece soldados que protegen a la familia real. O a menos así era - entonces se recostó en esa rama - mientras estén brillando... Están vivos.
Entonces todos viven - dijo con una sonrisa - pero será difícil encontralos - dijo mirando al suelo - por ciertos ¿Viajas tanto para que no te encuentren o hay otra razón? .
Ambas - dijo cerrando los ojos, luego sonrió - mientras viajaba, me di cuenta de algo - le enseñó el brazo derecho - la luz morada titila, alguien está muriendo. Así que me desespere a buscarlo, pero no sé cómo - suspiro - mi compañero muere.
Entonces se quedó pensando que ese joven estaba viajando, arriesgando su propio bienestar porque la luz de su amigo que se apagaba, y él no lo permitiría. Entonces sonrió.
Tal vez sea de la raza humana - dijo acostándose - Pero los Zodic son mejores que los humanos.
....
¡ Despierta bella durmiente! - gritó un Zelkenw muy emocionado, y la princesa despertó muy soñolienta - ¡vamos!, ¡Vamos!, ¡Vamos!. A salvar a tu país - su energía era envidiable, y su gran sonrisa también.
Una vez estuvo lista bajó.
Tardaste un año - dijo frunciendo el seño - ¡Vamos! - gritó entusiasmado.
Era sorprendente lo rápido que cambia de humor, lo alegré que era Pero a la vez serío. Ella sonrió para sí - veo que es verdad que son bipolares - dijo en voz baja.
¿Dijiste algo? - preguntó.
No - dijo sonriente.
En la ciudad Océan blan - aclaro mientras caminaban - en un pequeño y olvidado pueblo, hay un hombre que destruye a los monstruo de los arrededores de un solo golpe.
Eso lo hacen muchos - aclaro.
No, los monstruo de ese lugar son tipo S los más peligrosos - dijo sonriendo - ni yo puedo vencerlo de un golpe... Sólo conozco una persona que puede hacerlo.
¿Uno de los doce? - preguntó emocionada.
Correcto - entonces ambos brincaron a la vez de la emoción.
No puedo creerlo - dijo emocionada.
Sin duda alguna es el - dijo muy entusiasmado - el Puño rojo de los doce del Zodiaco, Bryan Harvenhait.
Y ese nombre fue música para los oídos de la princesa - Bryan - dijo sonriendo. Era el único de los doce que conoció, aunque solo fue una vez.
Y ese recuerdo invadió su mente. Recordaba como el la cargó en sus brazos, y la sacó de aquella monstruo lobos qué querían comerla . Su silueta morena.
Lo recordaba ...
"Tranquila estarás a salvó" - recordó su voz....
Recordó su sonrisa, como diciéndole "todo está bien, porque yo estoy aquí". Y recordó cuando se despidió de ella diciéndole su nombre.
Oye ...¿Estás bien? - preguntó el azabache - sonríes para ti sola.
Oh, perdón recordaba el pasado.
Se notó - dijo sonriente.
....
Habían pasado al rededor de medio día, al fin andaban en aquel pueblo.
Oye, ¿Cómo se llama esté Pueblo? - preguntó aquella joven de cabello verdoso.
Lo olvidé - se rasco la nuca mirando al rededor.
Distraído - puso los brazos en jarra - ¿Como se te ocurre olvidarlo?
Pero yo no lo olvidé - cruzó los brazos.
¿Como se llama pues? - dijo sería.
Lo olvidé.
¿¡No me tomes el pelo?! - gritó molesta.
No te tomó el pelo, el pueblo se llama "lo olvidé" - dijo aclarando la situación.