El verano está a punto de acabarse y las clases comenzarán dentro de poco. Me siento en la arena mirando el horizonte y observo como las olas se mecen y terminan muriendo en la orilla.
El día es caluroso pero la playa está completamente vacía, lo que es realmente extraño. Pero para mí es perfecto. Estar sola me ayuda a pensar y en asumir todo lo que se avecina. La decisión que he tomado lo va a cambiar todo y voy a estar en peligro más que nunca.
Sé que los primeros años me estuvieron buscando pero creo que ya se han dado por vencidos. Las últimas noticias que me han llegado es que piensan que estoy muerta, que he desaparecido del mapa. Lo que me da la oportunidad de pasar desapercibida y seguir con mi tapadera.
Ha llegado el momento de volver a casa y aunque el Profesor Dumbledore ha estado bastante reticente con mi idea y después de tanto insistir y de mostrarle todas las posibilidades positivas de mi llegada, he conseguido que acepte el cambio de colegio y que vuelva.
Eso es lo que creo ya que aun no estoy segura de que vaya a dejarme, no las tengo todas conmigo porque la carta de ingreso no me ha llegado todavía. Es posible que finalmente cambie de idea y tenga que volver a la Academia Beauxbatons. El lugar no me disgusta, he conseguido pasar tres años en un mismo lugar y, sobre todo, he podido aprender magia pero… No puedo ser yo misma y no me gusta tener que mentir, por lo que al final siempre termino sola, sin amigos. ¿Para qué hacerlos si después tengo que abandonarlos?
Lo que me espera ahora es una vida nueva y solo espero que este sea el último lugar, que no tenga que moverme más. Hago lo que tengo que hacer pero ojalá haber tenido una vida normal como la de cualquier bruja de mi edad. No siempre se tiene lo que uno quiere.
Doy un último vistazo a uno mis sitios favoritos de esta hermosa ciudad y me levanto de la arena. Me sacudo el pantalón corto para borrar todo rastro de arena y cojo mis sandalias. Camino por la playa y salgo de ella.
Tras andar como media hora, llego a mi casa, al menos la que ha sido durante los últimos tres veranos. Giro la llave de la puerta y entro dentro. Dejo mis cosas sobre el mueble de la entrada y el calzado en el zapatero. Me pongo unas zapatillas de estar por casa y voy en busca de mis padres. Al llegar al salón los encuentro sentados en el sofá viendo la televisión.
Ante la negativa de mi madre, mi padre se levanta y abre uno de los cajones del armario. De él saca un sobre y me lo tiende. Con manos temblorosas lo cojo. Creo que ya sé lo que es y no puedo creerme que el momento esté llegando por fin. Resbalo por el reposabrazos y me siento en el sofá.
Doy la vuelta al sobre y me encuentro con mi nombre y la dirección de mi casa escritos con una tinta verde esmeralda. Justo arriba a la derecha el emblema del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.
Mis nervios aumentan mientras rasgo el sobre pero la emoción gana a todo lo demás. Llevo esperando este momento desde que tengo uso de razón.
Saco la hoja que contiene el sobre y la desdoblo. Miro a mis padres que están expectantes a mi reacción y después devuelvo la vista a la hoja para comenzar a leer.
COLEGIO WOGWARTS DE MAGIA
Director: Albus Dumbledore
(Orden de Merlín, Primera clase,
Gran hechicero, Jefe de Magos,
Jefe Supremo, Confederación
Internacional de Magos).
Querida señorita Parker:
Tenemos el placer de informarla de que su solicitud de cambio entre la Academia Beauxbatons y el Colegio Hogwarts de Magia ha sido aceptada y dispones de una plaza en este nuevo curso que comienza. Por favor, observe la lista del equipo y los libros necesarios.
Las clases comienzan el 1 de septiembre. Esperamos su lechuza antes del 31 de julio.
Muy cordialmente,
Minerva McGonagall
Directora adjunta
No puedo creerlo, mis manos tiemblan sujetando el papel pero por fin ha llegado la carta que llevo esperando todo el verano. Miro primero a mi madre que intenta evitar mis ojos y después a mi padre que me observan algo expectante por la carta.