Capitulo 20

Cuando Tomoe estaba arrodillado esperando de una vez su fin a manos de su oponente pero con la esperanza de que a Nanami y Nyoko las dejaría libres llego Akura dándole aún más esperanzas y que con ellos unidos volviendo a lo que eran antes pero con la meta de salvar a sus zieles serían más que invensibles.

— ¡Tome! — fue lo primero que salió de la voz de su amigo haciéndolo reaccionar un poco

Akura tras ver su "hermano" en esa posición sabía que ese ser que se encontraba dañando a su ziel era por lo menos un poco más poderoso que Tome o que sus habilidades eran más competentes. No lo pensó más y atacó, unos de sus poderes a parte de la regeneración rápida era una habilidad que logró desarrollar cuando estaba encarcelado aquella consistía en poder materializar algunas navajas en el aire y poder atacar, aquello por lo menos les podía otorgar algo de tiempo mientras ellos pudieran organizar algún otro ataque o plan.

Al tener a Malson algo indefenso y apartado de las humanas Tomoe y Akura se reunieron en uno de los muros mientras que este se encontrara herido pues lo visto por Tomoe este tenía la misma habilidad que Akura, una regeneración rápida a cualquier ataque por lo que era casi imposible destruirlo.

— Necesitamos sacar a las chicas de ahí — le decía Tomoe con las fuerzas que aún mantenía — Pero ese demonio es muy poderoso..

— No creo que mas que yo, por algo soy el rey demonio

— Lo eras, eso quedó en el pasado... necesitamos idear un plan antes que esto empeore

— Los demás se quedaron luchando contra los guardias no podemos contar con ellos — comentaba Akura — Solo somos nosotros con él

— Siento.. que no lo lograremos... — Tomoe se sentía devastado al no poder alcanzar a liberar a su ziel, su otra mitad

— No digas eso... mira... yo me encargare de Nanami y Nyoko, tu siguele distrayendo — le dedica Akura a Tomoe

— Tienen sogas sagradas serán inútil romperlas

— No de alguien que sobrevivió de Yomi-no-Kumi, soy un demonio de los más fuertes podre rescatarlas

Tras el paso de aquellos minutos Maslon logró recuperarse de nuevo al cien para seguir con aquella batalla entre ahora esos dos demonios. Utilizó sus garras arrastrándolas por el piso y sacando chispas para poder asustarlos.

— Ustedes serán los únicos responsables del nuevo futuro que tendrán estas humanas, muriendo en mis manos — se volvió escuchar de nuevo como el fierro rechinaba el piso

— Debemos de actuar ahora — sugirió Akura

Al estar de acuerdo ambas partes de este nuevo equipo empezaron a luchar de nuevo contra Malson. Akura lanzando sus flechas en direcciones inesperadas al igual que algunos golpes para llegar poco a poco a Nanami mientras que Tomoe ayudaba a su compañero con algunas de sus llamas de zorro y también ejerciendo alguno que otro golpe.

Cuando ambos vieron que la distancia en sí ya era mínima Tomoe decidió atraer toda la atención del demonio para dejarle paso libre a su amigo y rescatar a las chicas.

— ¡No eres rival para mi Malson! — le gritaba Tomoe lanzando su ataques

Eso enfureció al demonio y haciendo el cometido de Akura y Tomoe este se abalanzó a su contrincante para acabar con él después de todas las trabas que se le adjuntaron para no matarlo.

Akura ya se encontraba en posición acabando de una vez por todas con aquellas cuerdas que rodeaban al ser que más amaba, él no era una persona romántica, alguien que le gustara las cursilerias pero con ella era la excepción pues ella significaba todo para él.

Tras haber liberado primero a Nanami este la sostuvo entre sus brazos para dirigirse a lado de Nyoko, sus garras estaban lastimadas por la fuerza que utilizó para liberarlas pero no le importaba con tal de poder sacarlas de ahí ese sería un precio insignificante.

A pesar de que el plan estaba saliendo de lo poco que supusieron que podía pasar o calcularon había un pero, un obstáculo uno que no lo habían previsto y era que Akura al utilizar una gran cantidad de poder para cortar las cuerdas no tendría la suficiente fuerza de salir con las dos chicas sobre él.

— Esto no puede ser... — susurró Akura con la vista en las humanas desmayadas

Este detalle no estaba en su plan, Akura no sabía cómo reaccionar qué hacer en esta situación pero Tomoe alcanzó a observar lo que ocurría con Akura.

— ¡Saca a Nanami de aquí! ¡Yo me encargare de Nyoko! — gritaba Tomoe a su amigo para que pusiera manos en acción

Tomoe seguía con la distracción para que Akura saliera sin ningún problema con Nanami en sus brazos pero sabiendo que Nyoko se encontraba detrás de los muros protegiéndose de los ataques de esta batalla.

Destellos de luz que quemaban al toque producidos por las garras de Malson, quemaduras en el piso y paredes gracias a las bolas de fuego de zorro por parte de Tomoe y uno que otro muro roto, pedazos de vidrio y tierra por toda la habitación por consecuencia de golpes elevados de fuerza es lo que adornaba todo aquel lugar.

Después de algunos minutos de ardura batalla ambas partes estaban debilitándose una más que la otra, Tomoe sobretodo pues él no contaba con la increíble regeneración rápida de sus heridas casandolo aún más por la falta de sangre.

— Por fin no hay nadie que me detenga para poder tener tu cuerpo sin vida entre mis manos

"¿Este será mi fin?" "No, necesito sacar a Nyoko de aquí. Solo así podre estar en paz". Tomoe trataba tomar todas las fuerzas que tenia guardadas y sacar donde no las había pero por falta de la perdía enorme de sangre no podía alcanzar la energía necesaria.

Malson los tenia bajo su merced entre el suelo y su cuerpo. Este tenia una de sus manos colocada sobre su cabeza la cual tenia alguna heridas leves y otras graves las cuales sangraban y manchaban el suelo de color carmín; su otra mano se encontraba posicionada a lado de su estomago lista para dar el golpe final con sus garras desgarrando sus tejidos y muriera desangrado, una muerte lenta y dolorosa.