Fui en el auto de mi abuelo al pueblo a traer provisiones.
Ha mitad de camino tuve que parar porque de repente me senti tan solo y deprimido que senti que el aire desaparecia de mis pulmones.
Cerre los ojos e intente respirar con tranquilidad, queria gritar me ardia el pecho porque queria llorar, pero me negaba hacerlo.
Despues de unos minutos me tranquilice y continue mi camino.
Llegue al unico bar del pueblo, ahi encontrè a Gabriel, quien me miro con lastima, pero en parpadeo tenia una mirada somnolienta y divertida, estaba un poco borracho
—¡Elian! ven y tomate unas cervezas conmigo ¡irè a la universidad!
—¡De verdad! —dije con entusiasmo mientras me acercaba
Le dì un golpe en la espalda como diciendo ¡hurra!
Pero me entristecì por mi mismo, porque no me iba dar esa oportunidad, porque me negaba hacerlo, me hacia estupido, pero no queria dejar la casa, dejarla significaba dejar todos los recuerdos del abuelo, dejar los recuerdo del abuelo significaba quedarme con los recuerdos del niño triste de nueve años, serìa miserable si me iba.
Asì que comence hablar con Gabriel quien ademas hablaba con uno de los amigos con los que habia estado bebiendo, creo que se llamaba Angel, no lo recuerdo.
Ya eran casi las diez de la noche, ya me sentia borracho:
—Elian no te vayas —gritò Gabriel —¡tomate otra!
Deja vu
Mi mente alcoholizada se nego a entender porque todo esto era tan familiar.
Cuando llegue a casa comenzo a llover, golpee objetos, di tropiezos y abrì lan nevera buscando algo, no se muy bien que.
Sentì frio.
Hubo un fuerte ventarron, la luz se apago. Siempre pasaba cuando llovia.
La ventana se abrio de golpe, me acerque y la cerre rapidamente o se mojaria toda la cocina. Iba de camino a mi habitacion pero aunque suene tonto tuve el impulso de abrir la ventana nuevamente, sacudì la cabeza.
El impulso `parecia urgente. Como... me negue a creerlo, estaba despierto...
o ¿estaba soñando de nuevo?
Estaba borracho, eso era...
Una voz comenzò susurrarme: encuentrala, encuentrala...
Estaba confundido, esto no pasaba en el sueño.
Esperen...esto no era un sueño, porque dentro de el yo no tenia voz ni voto, solo era un personaje que actuaba sin ser yo mismo.
El sueño por lo general era repetitivo y no podia decidir lo que iba hacer, ni si quiera podia pensar si queria o no abrir la ventana. Simplemente la abria, salia encontraba a la chica, luego: Sangre, llanto, dolor, PESADILLA...
En el sueño no habian susurros, me estaba volviendo loco.
Encuentrala, encuentrala...
Golpes en la puerta
Un relampaco
Los golpes en la puerta eran cada vez màs fuertes
Mi corazon acelerado
Susurros
—Esto no deberia pasar —me tranquilizo —asi no es el sueño, estoy ebrio ¡eso es!
Un grito inesperado retumbo en el aire, mi primer impulso fue abrir aquella ventana que tanto me tentaba
El grito volvio a retumbar en mis oidos, los golpes en la puerta se intensificaon entonces sin pensarlo:
Corrì...
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Editado: 21.01.2022