Capitulo 20

Luz estaba hundida en sus pensamientos, mientras escuchaba la música que para los demás era "ruido", cuando Enmanuel la saco del transe sacudiendola. 

"Luz este es mi amigo, el que te dije que conocía desde niños.."

Ella alzó la vista entrecerrando los ojos por los rayos del sol, sin siquiera quitarse los audífonos. 

"Jacob esta es Luz, ella escucha el mismo ruido que tu.." 

El la observo esperando a que hablara, con cara seria y al parecer sin interés, algo que era mutuo. 

Cuándo Luz pudo verlo bien lo único que paso por su cabeza fue "Qué tipo tan alto", Jacob media dos metros, algo que para los pequeños 159 cm de Luz era enorme, de verdad debía verlo hacia arriba. 

Tenia el cabello hasta las orejas y despeinado, su rostro era varonil y de facciones duras, cejas pobladas y ojos grandes, pestañas cortas, nariz afilada y de labios carnosos, era delgado pero con un cuerpo bien tonificado qué denotaba hacer ejercicio de forma regular llevaba una camisa blanca y unos jeans negros que se notaban sus piernas largas y  firmes, de hombros amplios y brazos largos sostenia con una mano la correa de su mochila al hombro, pero de todo lo mencionado fue su altura lo que le llamo la atención y se podría decir que hasta se sintió intimidada. 

"Hola, mucho gusto.." 

"Igual, Enmanuel me contó sobre ti.." 

"Y a mi de ti, eres todo un personaje.." ella disimulo una pequeña sonrisa. 

"Si, digamos que si.." dijo el con tono sarcástico y juguetón, sentándose a la par de ella. 

"Y ¿que haces?" pregunto el mientras miraba el libro en su mano. 

"Ah, es un libro de culturas antiguas y lenguas perdidas" 

"El no se equivoco, eres buena en los estudios" 

"¿Eso dijo?, bien digamos que hago mis deberes" 

"JAJA bueno es más de lo que hice en mi anterior escuela" 

"¿Tuviste problemas?, yo no la pase bien en mi ciudad anterior, pero aquí las cosas fueron a mejor.." 

"Si bueno, digamos que los problemas los empecé  yo.." 

Jacob era despreocupado, no le importaba admitir sus errores y pensaba que todo lo que hacía era un broma, llevaba las peores calificaciones en su anterior escuela y sus pradres lo mandaron de regreso a Lucía con la esperanza que estar con viejas amistades evitará qué se siguiera descarriando. 

Para Luz era un chico algo descarado, se notaba que era alguien al qué no le importaba mucho sus estudios, y aunque fingiera prestar atención a su conversación, notaba que el miraba a otro lado cuando ella hablaba o que se fijaba en otras personas, odiaba eso, en verdad detestaba eso, pero sobre todo odiaba qué mintieran y fingir escuchar o prestar atención por apariencia era igual que mentir, así que ella solo guardo silencio.