Prólogo

Brincó en su lugar en cuanto el libro de su maestro estrelló contra el borde de su mesa. Los ojos brillantes verdes del joven siguieron el trayecto del libro para encontrarse con la mirada reprobatoria de Albert.

—Su majestad —advirtió con voz pausada.

—Estoy agotado —confesó soltando un leve suspiro.

Sus hombros decayeron y sus labios se encorvaron hacia abajo. Sus días martes eran los más agotadores y aunque siempre cumplía con su deber, durante esa jornada especialmente no tenía deseos de ser optimista. Repentinamente su cabeza lo guiaba a un extraño terreno apartándolo de mantener su mirada fija en el mapa dibujado en el pizarrón.

—Su majestad —el hombre retiró sus lentes y las arrugas de su frente se acentuaron—. Sé que está agotado, pero le recuerdo que usted es el gran Aiden Caleb de Verot.

—Próximo rey. El que guiará al reino a la gloria, la victoria de Verot recorre mis venas —recitó con voz patosa.

Albert asintió creyendo que había logrado quitarle aquellos pensamientos banales de su cabeza, si bien el príncipe Aiden descansaba su barbilla sobre la palma de su mano pretendiendo mostrar atención su mente divagaba, desde que era niño estaba acostumbrado a recibir estrictas clases sobre Verot y los demás reinos pertenecientes al continente Eslut, conocía muy bien la existencia del continente Lipman, sin embargo, las clases sobre la tierra bendecida por los Dioses no eran tan exploradas como le hubiera gustado que sea, aquella limitada información despertó en Aiden una intensa curiosidad que compartió hace años con su amado hermano August.

Echó un vistazo al cielo despejado a través de sus ventanales, la gruesa voz de Albert difícilmente penetraba en su cabeza. Sabiendo que se acercaba la hora de los ejercicios de la clase intentó comprender las últimas palabras de su maestro no sin antes volver a anhelar correr sin ver una puerta en su camino.

«Ojala algún día pueda ver más allá de los muros de este castillo, sé que hay más que este mundo», pensó fantaseando al retornar su mirada sobre su hoja vacía.