Capítulo 1

Llegó el día.
 

  En estos momentos no tiene una idea exacta de cómo sentirse, solo puede echar su cuerpo hacia atrás para que el suave mueble de su asiento se encargue de ser su soporte y así meterse más profundo en su mente. La sensación de frio le está haciendo temblar, diablos, incluso con su suéter es muy difícil no ser afectado por el aire acondicionado del autobús. Ahora que lo piensa, ¿esta cosa se puede considerar un suéter? No tiene capucha, bolsillos, algún detallito, nada, parece realmente una simple camiseta gris con las mangas largas. Esto le pasa por haber elegido rápido y sin pensar uno en último minuto antes de salir, preparó todo la noche anterior menos su suéter y ahora por ese descuido tiene que sufrir ataques de temblor. Se lleva las manos a su boca para exhalar en un intento de calentarlas con su aliento, cosa que no funciona muy bien.

  Si no quiere pasarse todo el viaje quejándose mentalmente por el frio es mejor concentrar su atención en algo como la ventana que tiene a su derecha, al acercar su rostro con el vidrio sus ojos pueden volver a gozar del hermoso paisaje que está pasando velozmente. Un hermoso y gran lago que es acompañado con el extenso bosque lleno de pinos, todo esto mirándolo desde una perspectiva superior en altura debido al puente de metal por donde el autobús marcha. No importa cuántas veces lo vaya a mirar, de seguro seguirá deleitándose por tal ambiente frente a él.

  Necesita beber algo de agua así que baja la mano hasta el medio entre sus piernas donde tiene su mochila de viaje que lo acompaña, abriéndola y sacando la botella para llevársela a la boca. Beber con ese frio le causa algunos problemas, pero tiene que concentrarse o sino puede botar su agua para terminar en una situación incómoda. Es tomado por sorpresa de inmediato cuando su vista entera se entierra en una oscuridad absoluta, así que guarda su agua en su bolso para mirar atentamente lo que ocurre.

  Bueno, qué demonios va a ver si todo es negro, ni siquiera su cuerpo puede observarlo, y sin embargo el sonido del vehículo moviéndose aún está vigente e incluso más fuerte que antes. Siguen avanzando, entonces esto tiene que ser a causa de un túnel, como el ser incapaz de presenciar ese paisaje o algún auto más en la autopista a través de la ventana, en segundos eso tiene que terminar así que solo se relajara. Si están en ese túnel significa que ya van a llegar a su destino, un destino muy controversial para él debido a la razón que tiene para estar ahí, aún sigue sin saber qué pensar sobre todo esto pero como se puso en este autobús por decisión propia entonces ya no hay posibilidad de dar marcha atrás aunque le gustaría, a veces debería pensarse mejor las cosas.

  Como sea, hizo lo que hizo y tiene que lidiar con eso, acobardarse ahora no tiene sentido alguno si sus padres le enseñaron a ir al frente contra cualquier cosa. Lo desconocido es intrigante y emocionante, lo que sea que vaya a pasar allí es muy seguro que será más interesante que quedarse en su casa haciendo la típica rutina de no hacer nada productivo hasta esperar que se muera, algo exagerado tal vez pero no muy lejos de la verdad. Se está formando una expectativa demasiado alta a pesar de la poquísima información que tiene a su disposición, ¿y qué tal si esto no resulta ser tan emocionante como se lo imagina? No, es imposible que no lo sea, cualquier cosa que se relacione a ese lugar está tan lleno de incógnitas como de rumores para lanzarse una tarde entera especulando.

  En definitiva no va a ser decepcionante.

  Al estirar sus brazos comienza a prepararse para cuando deba levantarse y salir de ese asiento, ya le comenzaba a incomodar estar ahí sentado sin poder hacer algún movimiento con el miedo de levantar a la persona que se mantiene en un profundo sueño en el asiento a su izquierda. Él es un adolescente y necesita moverse o se frustrara con potencia. El frio sigue fastidiándole pero con algo más en qué pensar ese aire gélido ya no le afecta tanto, un buen comienzo. Al poder ver por la ventana otra vez se puede atestiguar como ese cuidado césped es acompañado por una innumerable cadena de árboles de una clase muy distinta a los que había antes por donde pasaban antes.

  Es ahora que recuerda que esa gran ciudad capital fue construida en uno de los valles más extensos del mundo, siendo un gigantesco circulo de montañas que en su interior se resguardaba el bosque lleno de millones y millones de árboles cuya clase no recuerda, hasta que llegaron las personas para hacer esa gran ciudad que aun con su tamaño el bosque sigue rodeando su alrededores, hermoso en todo el sentido de la palabra en su opinión. Debería concentrarse más en lo que debería hacer apenas ponga un pie en ese lugar, tenía un objetivo pero no una guía ni alguna pobre orientación de cómo tiene que proceder a partir de ese momento, está solo y tendrá problemas si no actúa correctamente. Rayos, si no es por la agradable canción que suena para ambientar el bus las cosas serían incluso peor para él.

  Deberá  buscar alguna forma de averiguar el paradero de su objetivo, tiene que haberla. Ha estado en esa ciudad tan pocas veces que puede contarlas con los dedos de una mano, pero de ninguna manera eso le será un impedimento alcanzar su meta, aparte de que no tiene opción pues no le quedaba suficientes recursos para volver a casa. Tantos pensamientos le han apartado de la realidad, lo que causa que se pueda dar cuenta en ese instante que ya se han adentrado en la ciudad, y no solo eso: ya están pasando por una de las primeras paradas del centro, hace unos momentos puede jurar que apenas se estaban acercando a la ciudad ¿Cómo pudo pasar tanto tiempo? Apenas siente que se desconcentró unos minuto, pero no es tiempo para eso.

  ¡Esta es la parada! ¡Ya debe bajarse!

  —Con permiso. —Agarrando su mochila para ponérsela en la espalda, da el aviso a la persona sentada a su lado para que le dé su espacio y salir por fin de su posición. Pasando a través del pasillo del bus sus ojos no pueden evitar desviarse para mirar a las personas que lo acompañaron en ese viaje de una hora y media, algunos aun dormidos, otros apenas despertándose y otros preparando las cosas para bajarse cuando lleguen a la estación, destino al cual él no busca llegar. Caminando alcanza el puesto de conductor y el co-piloto, acercándose a este—. Disculpe, voy a bajarme en la próxima plaza por favor.