Maid Love

Capítulo 9

Narrador: Y hay esta Dora, dándole una gran paliza a su contrincante, Katsu no tiene oportunidad, solo miren esos movimientos rápidos y fluidos, brazo izquierdo estampándose contra la cara de Katsu, pierna derecha golpeando sus costillas, Dora no deja ni respirar a Katsu… ¿Qué está pasando? Katsu logro tirar a Dora, pero está ya se levantó del suelo y ahora vuelve a golpear a Katsu, que alguien detenga esto, Dora terminará con la vida de Katsu, Katsu logra bloquear los golpes y logra quitarse de encima a Dora, esta última se levanta rápido y sigue golpeando a Katsu, parece que será el final, Dora prepara su puño para su último golpe, lanza el puño a las costillas de Katsu, el otro puño al rostro y una patada final, se lanza la toalla, Dora es la ganadora una vez más…

Linda: ¿Por qué estamos aquí?

Seiji: Por lo que paso cuando las deje solas, necesitan protección además de la mía

Kido: Es verdad, realmente pensé que moriríamos

Seiji: No bajó mi guardia

Linda: Esto es cruel

Kido: No lo se

Seiji: Vallamos a hablar con Katsu

Kido: Pero si fue ella la que perdió, debería de hablar con Dora

Seiji: Los promotores de Katsu querrán deshacerse de ella, la podre comprar a un buen precio

Linda: Eso es ilegal

Seiji: ¿Se te olvido que tu procedencia también?

Linda: Eso no le quita lo ilegal

Seiji: Piénsalo así, ella consigue casa, la puedo entrenar y las protegerá

Kido: Suena bien, ahora, ¿Cómo llegaremos a ella?

Seiji: Ya verán

Seiji tomó las manos de las gemelas y caminó entre los espectadores hasta bajar a la arena, rodearon esta y entraron a los casilleros de las luchadoras, entraron y vieron a Dora preparándose junto a sus entrenadores y otros dos entrenadores sin peleadora.

Seiji: Buenas noches caballeros, ¿Dónde está la luchadora de nombre Katsu?

Entrenador 1: Quisiéramos saberlo, termino la pelea y salió corriendo

Entrenador 2: ¿Por qué el interés?

Seiji: ¿Cuánto dinero les debe esa chica?

Los dos hombres sacaron armas y apuntaron a las gemelas.

Seiji: Oh dios… (dijo y tomó su pecho) llamen una ambulancia… (dijo y se agacho) más no para mí hijos de puta (dijo y se levantó con un rifle en cada mano)

Los hombres rápidamente soltaron sus armas y levantaron las manos.

Seiji: ¿Cuento quieren?

Entrenador 1: No es una cuestión de dinero, es de honor, el padre de esa chica…

Seiji golpeó al hombre y lo tiró al suelo.

Seiji: Pregunte qué cuanto querían, no pregunte la historia del padre de la chica, les daré el cuádruple de lo que ese hombre les hizo perder y paz, si alguno de ustedes o de su pandilla muestra su rostro cerca mío, los matare, ¿Entendido?

Los hombres asentaron con la cabeza, Seiji le dio un rifle a cada gemela y sacó de su bolso una chequera, firmo el cheque y se lo dio al hombre aun en pie, levantó ambas pistolas y las desarmó totalmente, las balas las guardo en sus bolsillos y junto a las gemelas salió de los casilleros.

Linda: ¿Qué hago con esto?

Seiji: Comételo

Kido: ¿Es una broma?, ¿Cierto?

Seiji tomó uno de los rifles y quito la carcasa de metal dejando libre un apetitoso chocolate al que le quito un trozo y se lo llevo a la boca.

Seiji: Chocolate con leche, exquisito

Linda: ¿Investigó a la peleadora? (preguntó mientras comía del chocolate)

Seiji: Soy muy buen adivinador, compre esos chocolates ya que no quiero exterminar una mafia completa, ahora, vallamos con Katsu

Seiji tomó las manos de las gemelas y fueron fuera, llovía fuertemente así que Seiji abrió un paraguas y se lo dio a las gemelas, caminó entre la lluvia con las gemelas cubriéndose de esta debajo del paraguas hasta que llegaron a un árbol, debajo de este estaba una chica de rostro hinchado, cuerpo amoreteado y empampándose con el agua que caía del árbol.

Seiji: Katsu (dijo agachándose) pequeña, necesitas levantarte, tus heridas tienen que ser tratadas

Katsu: Déjeme aquí... no quiero ver a alguien (dijo llorando lluvia)

Seiji: Sé que estas llorando, y también sé que no deberías, llorar es para débiles y hasta donde se eres una gran luchadora que está pagando lo que no debe, ahora, quiero que te levantes

Katsu: ¡Calla mierda!, no quiero escuchar tus mierdas positivistas

Seiji: Sabes, si el ser humano nunca hubiera perdido, seguiríamos siendo primitivos, el perder impulsa a mejorar para ganar

Katsu: Eso lo dice quien nunca ha estado en esa postura

Seiji: Tal vez no me conozcas y la verdad he pedido que mi fama no se difunda, pero he perdido más de lo que te puedes imaginar, a mi padre, a mi madre, mi racionalidad, mi conciencia, recuerdos, años de mi vida, a amigos, compañeros y compañeras, y todo eso me llevo a ser quien soy, a pagar la deuda de tu padre y evitar que ellos te prostituyeran, ahora dime, perdiste una pelea, tal vez hoy no es tu día, mañana podrá serlo, solo necesitas levantarte y seguir luchando (dijo y extendió la mano a Katsu)

Katsu: Creo que… tiene razón… gracias… (dijo y tomó la mano de Seiji)

Seiji tomó a Katsu en sus brazos y caminó junto a las gemelas al auto, Kido entró primero y Seiji recostó a Katsu en su regazo, Linda subió en el asiento del copiloto, Seiji condujo al hospital, llego pitando y una enfermera se asomó, Seiji sacó a Katsu en sus brazos y rápidamente salieron enfermeras con una camilla para ingresarla.

[Llamada]

Seiji: Luisa, estoy en el hospital

Luisa: ¿Qué ocurrió?, ¿Estas bien?, ¿Las gemelas están bien?

Seiji: Si, ellas están bien, bueno, las gemelas están bien

Luisa: ¿Qué ocurrió?

Seiji: Nada interesante, estaremos allí mañana por la mañana

[Fin de llamada]

Seiji caminó y se sentó en medio de las gemelas en el pequeño sillón que había.

Seiji: Por cierto, soy Seiji, tengo casi medio siglo de edad, ella es Kido y ella Linda, ambas tienen dieciséis



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En el texto hay: romance, harem, maid

Editado: 08.11.2022

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