Seiji: Dios, que sueño
Ariela: Tengo demasiado frio (dijo con voz temblorosa)
Seiji: Es de noche y en estas épocas este estado parece un desierto, calor en la tarde y frio en la noche, sin embargo, en invierno estará peor el clima
Linda: Tengo hambre
Kido: Y yo sueño, ¿Por qué viajamos de madrugada?
Seiji: Porque es mi costumbre, ya hemos llegado, al fin (dijo y estacionó la camioneta)
Seiji bajó del auto y abrió las puertas para que las chicas bajasen, abrió la puerta de la mansión y al encenderse las luces vio una carta en el suelo y a Bibí sentada en la sala.
Seiji: Una carta, valla cosa tan interesante
Las chicas entraron a casa, Katsu y Ariela quedaron sorprendidas al ver la gran mansión
Ariela: Dios… es hermosa esta casa
Katsu: Es enorme
Seiji: Gracias, dormirán arriba (dijo y se sentó en el sillón) tengo hambre, ¿Quieren pizzas?
Kido: ¿A esta hora?
Linda: El sol ni siquiera asoma aun
Seiji: Conozco un buen lugar, ahora, dense un baño en lo que el desayuno llega
Ariela: ¿Hay horarios o algo similar?
Seiji: No realmente, ya lo veras y estoy seguro que te encantara
Las chicas se fueron al gran baño, Ariela junto a Katsu sintieron vergüenza al inicio, pero al poco rato se acostumbraron, Seiji pidió las pizzas, se dio un baño rápido y se sentó para leer la carta.
Para Seiji Moncada
Me es grato saludarte Seiji, escribo para informarte de un paquete que llegará en algunos meses, espéralo con ansias, es parte del proyecto 9s9 serie Eva, yo seré en persona quien te entregue el paquete y con gusto te explicare por que tú.
Ivan
Seiji no entendía muy bien esa carta, recordaba a Ivan, uno de los pocos soldados vivos de su pelotón, guardó la carta nuevamente en el sobre y atendió la puerta, llevó las pizzas a la mesa y en ese momento sus chicas bajaban las escaleras.
Litzy: Ese baño fue muy relajante
Kayano: Ya lo necesitaba, el cansancio se me fue
Seiji: Ya está aquí el desayuno, pizza y jugo de naranja (dijo sacando los litros de jugo del refrigerador)
Katsu: Dios, ese es un buen desayuno
Las chicas fueron al comedor y se sentaron en la gran mesa.
Ariela: ¿Qué hace una muñeca en el comedor? (preguntó mientras tomaba dos trozos de pizza)
Katsu: ¿No estaba en el sillón? (preguntó mientras servía los vasos de jugo)
Seiji: Se llama Bibí, esta es también casa de ella, le gusta mucho hacer travesuras (dijo mientras pasaba las rebanadas de pizza)
Linda: ¿Ella es la que escondía la ropa?
Seiji: Probablemente
Kido: No pensé que una muñeca hiciera tantas cosas
Katsu: ¿Esta poseída?
Seiji se quedó en silencio un rato, Katsu sintió una molestia en su pie y al asomarse para verlo, vio a la muñeca abrazada a su pie, se asustó y cayó de la silla, Ariela también se asustó y se abrazó a Litzy.
Seiji. Ella odia esa palabra, sin embargo, le gusta que cepillen su cabello y que la vistan con ropa linda, discúlpate con ella haciendo alguna de esas cosas o puede fastidiarte la existencia
Katsu tomó a la muñeca y la cargo en sus brazos.
Katsu: Entonces te hare un peinado lindo
La muñeca parecía reír burlonamente.
Seiji: ¿Quieren ver una película?
Las chicas asentaron con la cabeza, dividieron la pizza y fueron a sentarse a la sala, Seiji puso la película y se sentó en el centro del sofá, con tres chicas de cada lado, esa simetría le dibujaba una sonrisa en el rostro, Ariela dejó su pizza en la mesa de centro y abrazó tiernamente a Litzy, Linda a Kido, Kayano a Seiji y Katsu a la muñeca, la película les atrapó totalmente, aunque algunas escenas eran repugnantes, la historia les hacía verlas, la película termino y las chicas parecían dormir, Seiji se levantó y las tapó con una cobija, Bibí estaba feliz estando en los brazos de Katsu.
Editado: 08.11.2022