Aun recuerdo ese sueño que tuve hace ya varios años atrás
En el sueño me encontraba en un bosque caminando entre los arboles con mi osito favorito en manos cunado escuche un risa y la seguí
Ahí, sentada junto a un arroyo estaba otra niña vestida de blanco, su piel era blanca y sus hermosos risos castaños caían sobre sus hombros, me observo con sus profundos ojos color miel y me regalo una sonrisa
Esa niña era muy hermosa y también muy familiar… me dijo que me sentara con ella y así hice, poso su cabeza sobre mi hombro y me dijo “No estés triste no estás sola, hay mucha gente que te quiere, yo también te quiero”
En ese momento me desperté de inmediato llorando y mi madre entro en mi cuarto, ese mismo día fuimos a un museo y escuche una risa, la comencé a seguir hasta detenerme frente un cuadro
Sonrió y comienzo a llorar “Mami yo conozco a esa niña” señale el cuadro donde había una niña de piel blanca vestida con un lindo vestido blanco, sus risos castaños caían sobre sus hombros y sus ojos color miel observaban el arroyo con anhelo… esperando a alguien, desde entonces comencé a ir mas al museo solo por ese hermoso cuadro que se me hacía muy familiar.