Manuel

Capítulo 9

Instalaron una base de operaciones en el departamento que se encontraba vacío encima de la clínica. Moreno arrestó a Pintos por las declaraciones que el detenido había hecho. Entró a la sala de interrogación y apagó las cámaras para que ningún policía pudiera escuchar o ver el interrogatorio. Mientras lo grababa para que lo viera Manuel y Campos. Moreno le ofreció una gaseosa a José.
_ Le puse un poco de hielo- le dijo Moreno. Pero Pintos no confiaba en la policía de la estación y no quería beber la gaseosa.
_ No te preocupes no tiene veneno- Moreno le dio un sorbo para que José confiara en él. Pintos estaba muy nervioso ante la presencia del supuesto Policía.
_ Relajate que no te voy a golpear- le dijo Moreno ante la mirada aterrorizada de José.
_ ¿Sabes porque te traje aquí?- Pintos negó con la cabeza.
_ No se que le han dicho, pero yo no hice nada- dijo José discrepante.
_ Escucha sabemos que le comprastes armas a este hombre- Moreno le puso la foto del detenido sobre la mesa.
_ Se llama Alan Rivero y es de nacionalidad Colombiana. - le informó Moreno.
_ No se, no lo conozco- negó Pintos jugando con sus dedos sobre la mesa.
_ Ya veo- ironizó Moreno.
_ Todos los policías son perritos falderos del intendente.
_ Conmigo te equivocas, yo no soy como ellos, “ QUE MIS ENEMIGOS SEAN FUERTES Y BRAVOS, PARA QUE YO SIENTA PLACER AL DERROTARLOS”.Conoces esa frase- le dijo Moreno.
_ ¿De donde saco esa frase?- le preguntó Pintos.
_ Me la enseño Daniel, ¿ Lo conoces verdad? me dijo que esta impreso con letras doradas en el libro negro.- no solo Pintos se sorprendió con esa revelación, también Manuel que miraba el interrogatorio desde su ordenador.
_ ¿Sabias eso?- lo interrogó a Campos.
_ ¿Cuándo pensabas decirme que habían traducido el libro?- le cuestionó Manuel.
_ El libro todavia no esta listo solo pudimos traducir la tapa- Manuel sentía que su jefe no le estaba diciendo la verdad. Pero decidió hacerle caso y continuaron observando el interrogatorio.
_ Sabes que nadie más sabe del libro - le dijo Moreno.
_ Eso no es verdad, el médico sabe del libro él lo encontró- le cuestionó Pintos.
_ Pero eso no importa ya veremos como hacemos con Daniel para recuperar el libro- mintió Moreno.
_ Entonces tu eres el hombre que Arandu metió como infiltrado en la policía.- Moreno asintió con la cabeza. Campos y Manuel estaban asombrado sobre el descubrimiento.
_ Creo que no somos los únicos infiltrados en este pueblo - acotó Campos y continuó mirando el video.
_ ¿Me vas a ayudar a salir? - le preguntó José.
_ Es lo que quiero pero se me complica porque compraste un arma militar y están prohibidas.- le manifestó Moreno.
_ Yo no la compre fue Arandu.- afirmó Pintos.
_ Esta bien, ahora va a venir un abogado que te va a sacar de este lío pero tu no tienes que decir ni una palabra a nadie de nuestra conversación- le dijo Moreno.
_ Que va a pasar con él medico, porque ya casi tenemos todo listo solo falta deshacernos de él y quitarle el libro.- Moreno encendió las cámaras y se marchó de la sala de interrogación. Campos cerró el ordenador y miro a Manuel.
_ Te voy a retirar del caso- le dijo el jefe.
_ No me puedes retirar, eso puede levantar sospechas- protestó Manuel.
_ Pero tampoco puedo dejar que te maten- le aclaró su jefe.
_ Escucha puedo manejarlo, usare un chaleco antibala si es necesario, pero no me voy a correr del caso- le reclamó Manuel. Campos no estaba muy seguro pero tampoco podían darse el lujo de perder todo lo que habían conseguido hasta ahora.
_ Tenemos que dejar a Pintos libre para que corra al encuentro de Arandu.- dijo decidido Manuel.
_ Tienes razón voy hablar con Moreno- expresó Campos. Manuel volvió a la clínica a seguir haciendo su personaje de doctor.Campos llamó a Moreno para exigirle que hiciera hasta lo imposible pero Pintos tenía que quedar libre.
Manuel había concertado una cita en su casa con Luna para hablar con ella.
_ Hola Luna ¿Estas bien?- le dijo Manuel aunque ya sabía lo que le pasaba a la chica.
_ Mi padre está preso- le reveló Luna.
_ ¿Como? ¿ Porque?- disimuló su sorpresa.
_ No se porque no me dejaron verlo.
_ Bueno, a lo mejor es un error- Manuel trataba de consolar a Luna.
_ Te voy ayudar, no te preocupes- le dijo Navarro.
_ No podrás hacer nada, la policía esta comprada por el intendente- le dijo Luna angustiada.
_ Necesito un poco de tiempo, tengo un amigo abogado en buenos aires- se aventuró él. Luna estaba desanimada tomó su cartera y cuando se estaba por marchar él la agarro del brazo.
_ Luna yo quiero ayudarte- la miró a los ojos. Manuel le acarició el rostro.Hubo una pequeña pausa, él se acercó y la beso en un beso apasionado. Ella lo abrazó apretando contra su cuerpo. Él despacio comenzó a quitarle la ropa, le soltó el cabello que lo llevaba atado con un broche formando un rodete. Mientras continuaban besándose con dulzura. Manuel acaricio su cabello y jugaba con él entre sus dedos muy sensualmente. Y continuó besando sus labios. Empezó a desprenderle la blusa de a un botón por vez ella lo detuvo y siguió lo que Manuel había empezado, lo miro a los ojos y dejó caer la prenda al suelo quedándose en ropa interior. Él hizo lo mismo y se quitó la camisa.Luna colocó las manos en su pecho y comenzó acariciarlo. Ella sonrío y él la volvió a besar.Manuel paso la manos por la espalda de Luna y desabrocho su ropa interior dejando sus pechos al descubierto. Ella pasó los brazos por el cuello de Manuel y continuaron besándose.
_ Te amo- murmura Luna
_ Te amo - le responde Manuel. Los dos estaban completamente desnudos y se amaron hasta el amanecer. Ella se fue temprano al amanecer, le dejó en la almohada a Manuel una nota que decía que había sido la mejor noche de su vida. Cuando él la encontró se sintió muy mal por estar mintiendo.



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En el texto hay: amor, suspeso

Editado: 27.08.2018

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