Había pasado ya una semana y hoy era sábado así que voy a aprovechar y solucionar mis dos grandes problemas, el divorcio y la bendición que viene en camino.
Llamé a Aarón y dijo que estaría en el centro comercial comprando algunas cosas así que llegué a ese lugar.
— ¡Aarón! — llamé acercándome a él.
— Esposa mía, ¿qué haces aquí? — dijo sorprendido.
— Aarón, necesito que me ayudes a buscar un abogado — dije sin más.
— Oh, con que ella es mi cuñada — se acercó un chico de cabellera castaña — Vaya que si es tu tipo — miró a Aarón y chocó los puños con él.
Yo fruncí el ceño confundida totalmente.
— Hola, soy Castiel Daughtler — sonrió — Hermano menor de Aarón — se presentó.
— Un placer conocerte Castiel, soy Heidy Langley — sonreí amable.
— En realidad eres Heidy Daughtler — me corrigió.
Rodé los ojos con fastidio, de verdad que sí son hermanos.
— Hermano, ¿qué hace tu esposa aquí? — el menor miró al nombrado.
— Creo que me extrañaba — se encogió de hombros.
Bufé — Ya quisieras, de verdad necesito hablar contigo.
— Okay vamos — empezó a caminar a quien sabe donde.
Esto es tan irritante.
— ¡Oye Aarón! — grité.
...
Después de varios minutos persiguiendo a los hermanos Daughtler por todo el centro comercial.
— ¡Aarón! — llamé con fastidio.
— ¿Dime, querida esposa?.
— Hermano, iré a la tienda de videojuegos, nos vemos después — dijo el menor para tomar su camino.
— ¿Y bien?, Ya estamos solos.
— Primero — señalé la caseta de helados — Quiero uno, se me antojó — me encogí de hombros.
Este sonrió ampliamente — Esta bien, vamos por unos helados.
...
Estábamos sentados disfrutando de los helados.
— Busquemos un abogado — dije con la boca llena de helado.
Este asintió — Conozco uno, él nos puede ayudar.
— Perfecto, ¿Cuándo podemos ir a verlo?.
— Mañana — dijo rápidamente — Lo llamaré y le explicaré nuestro caso — se metió una cucharada de helado a la boca.
— Muy bien, entonces nos veremos mañana Aarón Daughtler — me levanté de la mesa
Este asintió sin más.
Me dispuse a ir al baño rápidamente tenía que vomitar primero antes de irme.
Todo mal conmigo olvidé que estoy embarazada.
...
Al día siguiente ya nos encontramos en el punto acordado para ir con el abogado que manejará nuestro caso.
— Ven, es aquí — dijo
Entramos al buffet de abogados muy bonito la verdad.
— ¡Oh Aarón!, bienvenido — se acercó un señor algo mayor y lo abrazo.
— ¿Cómo estás Yeonjun?, que gusto verte de nuevo amigo — se separaron.
— Igualmente, por favor tomen asiendo.
Hicimos caso y nos sentamos en unos sillones muy cómodos.
— Te presento a mi esposa, Heidy Daughtler
Fruncí el ceño por como me presento — Un placer conocerte — dije para mirar al abogado.
— El gusto es todo mío — sonrió ampliamente — Por lo que me contaste ayer por teléfono, su caso es bastante complejo, puede durar al rededor de un año solucionarlo.
— ¿Qué? — me exalte un poco — No, no, no — negué — Yo no puedo esperar un año señor abogado.
— Lo siento señora Daughtler, pero no podemos hacer nada contra eso.
— Y díganos, ¿qué debemos hacer para que sea más rápido el proceso? — preguntó el chico peli rojo.
— Me dijiste que los dos estaban completamente ebrios cuando se casaron, ¿es correcto?.
Ambos asentimos.
— Entonces tenemos que convencer al tribunal mediante sus testimonios y mediante testigos que afirmen que efectivamente estaban ebrios cuando contrajeron matrimonio ese día — explicó.
— Okay, eso suena fácil — Aarón me miró.
— ¿Dónde están las personas que firmaron su certificado matrimonial?.
Miré a Aarón, se supone que son sus amigos y que debe saber dónde están.
— Bueno... — rascó su nuca
— ¿Qué? — lo interrumpí.
— Lo único que sé, es que Rafael se fue a Islandia y dijo que no volvería hasta nuevo aviso.
— Esto no puede ser — negué con la cabeza.
— ¿Y el otro? — preguntó el abogado.
— No lo sé — se encogió de hombros.
— ¡Esto es increíble!— pasé mis manos por mi cabello con desesperación.
— Ya veo, esto lo vuelve aún más complicado — suspiró algo cansado con la situación — Si yo fuera ustedes me conformaría con la anulación, solo debemos mostrarle al tribunal que no pueden estar juntos — dió una pequeña pausa — Hay que hallar un motivo para la separación.
Aarón y yo nos miramos mutuamente, ¿Eso realmente podría funcionar?.
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Editado: 02.10.2023