El Bosque Nacional Superior ubicado en Minnesota era un perfecto lugar para acampar durante 3 días. Habían iniciado las vacaciones y ellos no podían estar más felices.
Daphne y Martha ya podían despedirse del vestido rojo escocés, el panty grueso azul marino, y el saco negro.
Y Víctor, Hayden, Robbie, Brendon y Nasser podían despedirse de la camisa blanca y de los pantalones y sacos negros.
Esas prendas eran tan fastidiosas para el grupo, ¿Acaso estudiaban con el uniforme en Sherman School?
Los integrantes de los Black Birds tenían casi las mismas características.
Siempre vestían de negro cuando no estaban en la escuela, sacaban las mejores notas del colegio (Aunque Daphne y Víctor eran los mejores) y provenían de familias multimillonarias estadounidenses, a excepción de Víctor. Si él estaba en uno de los colegios más caros de Nueva York era porque Dalton School le daba una beca completa al ser un estupendo alumno.
Y cada uno tenía sus problemas, sueños y aspiraciones.
También querían ser libres, muy pronto irían a la universidad y luego de eso, podrían independizarse.
Ellos se conocían desde niños. Los primeros en formar el grupo fueron Daphne y Martha, luego vinieron los chicos.
Todos tenían un fuerte lazo de amistad, podrían decir que incluso estaban destinados a ser amigos para toda la vida.
El viaje desde Nueva York hasta Minnesota había durado casi 3 horas. Cada hora valía la pena por su primer campamento juntos, después de todo cada uno había logrado convencer a sus padres para que al cumplir los 17 años pudieran ir a acampar. Y ya todos tenían 17 años.
El padre de Robbie, el señor Sprayberry, dueño de una de las más importantes aerolíneas del país, les había otorgado un avión privado solo para ellos.
Y era magnífico. No es como si no hubieran viajado en avión antes, muchas veces lo habían hecho, la mayoría. Sólo que era otra experiencia viajar con tus mejores amigos.
El paisaje del Bosque Nacional Superior era hermoso. Ni que decir de las maravillosas y excitantes actividades como el canotaje, senderismo o la pesca.
Todo era risas y alegría. Nada de problemas.
Todo era perfecto.
Hasta la tercera noche.
Aquella donde las estrellas estaban tan brillantes, donde la suave brisa agitaba las hojas de los árboles y donde el fuego de la fogata los acompañaba nuevamente mientras contaban historias de terror y anécdotas para luego pasar a preguntas curiosas.
-¿Cómo logaron convencer a sus padres para que les permitieran venir hasta aquí?- preguntó Martha cubierta con una ligera manta aquella noche.
-Mi padre desde que le pregunté me permitió venir, les caen bien a él. Pero si hablamos de América -Hayden mencionó el nombre de su madre de una forma seca- , desde su divorcio yo le importo muy poco. Sólo deposita dinero y para ella eso es ser buena madre- Al notar las miradas de “compasión” como él las denominaba, Hayden sonrió cínicamente-. Pero no importa, lo superé.
Daphne, que estaba a su costado, tomó su mano y le sonrió.
-No te preocupes, Hayden, todos nosotros tenemos problemas- dice ella-, pero me alegro que lo superes- luego suelta su mano y suspira-. En mi caso mi padre me había prometido dejarme venir. Al final no iba a hacerlo, pero mamá logró convencerlo.
- ¿Cómo lo logró?- preguntó con curiosidad Nasser antes de echarse por completo en la hierba que los rodeaba.
- Cosas de adultos, mejor dicho deberes conyugales o eso supongo yo -dice Daphne sin vergüenza alguna, notó el ligero sonrojo que se formó en los rostros de sus mejores amigos-. Papá es muy sobreprotector conmigo. Ahora está de en un viaje de negocios pero aún así no me iba a dejar venir, nunca he viajado sin ellos y pues creo que él se preocupa de que yo, la gallina de huevos de oro, no vuelva para formar una alianza. Mamá le dijo que si me dejaba venir sabría recompensarle a su regreso.
- Entendemos- dijeron los otros 6 chicos. No querían saber más sobre las maneras que los padres de Daphne se ponían de acuerdo.
- Mis padres me dejaron venir porque me porte bien este año, y como saben que yo los aprecio mucho pues me dijo que nos daría un avión privado para nosotros y aquí estamos- comentó Robbie. Su mirada estaba fija en la fogata.
- Agradécele a tu padre de nuestra parte, Robbie. Nos trajo gratis a Minnesota- dijo Brendon.
- Ya se lo dijeron muchas veces. Eso cansara a papá y ya no querrá traernos otra vez- le informó Robbie a Brendon al quitar su mirada de la brillante fogata. Luego sonrió y le dio una palmada en el hombro-. Estoy bromeando, mi padre es bueno.
- Mi madre dice que soy un buen hijo y alumno, que merecía una recompensa. Quería pagarme los gastos pero yo le insistí en que pagaría todo con mis ahorros, aunque no debería gastarlos mucho por los tratamientos de Stella. Pero siguió insistiendo y dijo que si no aceptaba su dinero no me dejaría venir y al final acepté. Ella dijo que me extrañaría aunque fueran 3 días. Después de todo sólo somos ella y yo en casa- dijo Víctor. La imagen de su hermosa y trabajadora madre se hizo presente en su mente.
- Tenemos padres buenos y malos, entonces- dijo Martha-. Olvidémoslos hasta el fin de esta noche. Dijimos que olvidaríamos los problemas, no debí preguntar nada. Además dentro de 10 años viviremos todos juntos y seremos muy felices como las lombrices.
Ay, ellos y sus planes de infancia de vivir juntos para nunca separarse.
La risa se hizo presente en medio del bosque.
Pero en el fondo, sabían que algún día tendrían que separarse…
-Si es que mi padre no hace que alguien me despose- comentó con tristeza Daphne al dejar de reír-. Yo tal vez ni los conocería, antes de entrar a Sherman School, solía tener a los mejores profesores particulares y no iba al colegio como las demás personas. Eso fue en hasta mis seis años, cuando mi querida tía Lucille les recomendó a mis padres enlistarme a un prestigioso colegio particular como Sherman, después de todo, ellos estudiaron ahí. Nunca entenderé porque no me pusieron en un colegio al principio- luego en rostro se formó una sonrisa digna de una guerrera al ganar una batalla-, pero después de terminar la universidad voy a irme. Y así podremos vivir todos juntos -Daphne alzó las manos, como una niña entusiasmada-. Iniciaré desde cero, puedo sobrevivir y ser una gran persona exitosa sin los millones de dólares de mi familia, seré independiente.