El primer paso es llegar a mi destino, estoy esperando verte Mitski.
Estoy tan feliz de no morir mientras viajábamos en el avión, al llegar donde estarían las maletas gracias al inglés de Matías descubrimos que tardarían más tiempo en llegar.
Llegamos a los Ángeles pero aún no podíamos respirar el aire limpio, el aeropuerto no me hacía sentir tranquila por todo el movimiento de la gente. Mucho después de sentirme tan incómoda en ese lugar, obtuvimos nuestras maletas, las revisé y no hubieron problemas, ya podía pedir un Uber para llegar hotel y descansar del viaje.
- ¿Ya instalaste Uber?
- Si, ya la tenía instalada desde antes y nuestro Uber ya viene en camino.
Nuestro destino es "Freehand", no puedo pronunciarlo bien, el Uber nos llevó al hotel, fue grande mi sorpresa el saber que el camino sería una completa carretera muy larga y estresante. La única buena noticia es que tenemos un lugar de comida bastante cerca. Terminé escabulléndome a la tienda para comprar la cena traté de ser silenciosa al salir del hotel, pero al regresar era obvio que salí.
- ¿A dónde fuiste?
Aún acostado, descubrió que salí a comprar.
- La cena.
- Lo había olvidado, gracias por ir a comprarla, avísame la próxima vez que salgas, por favor.
Lo que dijo Matías suena razonable, estaba tan cansado que no pensó en comer, el pobre estaba en la cama, parecía que iba a morir y se miraba muy tierno. Mientras comía, recordé el camino a la tienda, salí con mucho miedo, más que de costumbre, revisando la dirección del lugar, al llegar me encontré a una tienda casi tres veces más grande que el lugar donde trabajo, las personas nunca me saludaron, no lo esperaba, pero tampoco fui capaz de hacerlo, sentí que podría fallar en decir una sola palabra en inglés. Todo era diferente, los edificios eran diferentes y las personas eran diferentes.