PARTE III 1910 Newt Scamander Capitulo 1

PARTE III 1910 Newt Scamander

Capitulo 1

Maxine emergió de la seguridad del bosque, sintiendo la suave caricia de la brisa en su rostro. Una serenidad la envolvió mientras inhalaba profundamente el aire fresco que llenaba sus pulmones. El entorno boscoso le regalaba una sensación de conexión con la naturaleza, un remanso de tranquilidad.

Sin embargo, esa calma fue abruptamente interrumpida por la inconfundible cadencia de una voz cercana. Intrigada, giró para encontrarse con un hombre cuyas manos se extendían hacia adelante en un gesto de consuelo. Su atención se desvió hacia la escena frente a él: una criatura majestuosa que asemejaba a un caballo negro alado, de dimensiones impresionantes.

El misterioso hombre, ante la presencia de la criatura, parecía un guardián, un vínculo entre mundos. La criatura, a pesar de sus alas inmensas y garras afiladas, irradiaba una extraña familiaridad y comodidad en presencia de Maxine. Como si compartieran un entendimiento profundo, la criatura le tocó el hombro con su hocico, estableciendo una conexión única entre ambos.

Maxine Borage, con un dejo de temor al encontrarse tan cerca de un hipogrifo por primera vez, decidía enfrentar la situación con un toque de humor. "Hey... ¿no eres peligroso, verdad?" bromeaba con la criatura mientras jugueteaba con ella, tratando de disipar el nerviosismo que se arremolinaba en su interior.

El joven a su lado dejó escapar una sonrisa encantadora, sus ojos azules destellaban con un humor tranquilizador. "No te preocupes. Este es Arthur, y no hará daño", aseguró con una seguridad que revelaba una profunda conexión entre él y la majestuosa criatura. Como si comprendiera la conversación, Arthur emitió un sonido suave, casi como una risa, mientras movía su cola de un lado a otro, expresando una especie de aprobación.

"¿Lo ves? Le agradas", comentó el joven con la confianza de un tutor experimentado. Maxine, sintiéndose aliviada, se aventuró a acariciar al hipogrifo con ternura. "Oh... sí, lo veo. ¡Qué bonito! Es un honor, Arthur", murmuró mientras sus dedos exploraban con delicadeza las plumas de la majestuosa criatura alada. La escena se llenaba de una conexión especial, como si entre Maxine y el hipogrifo se tejiera un lazo invisible y poderoso.

Arthur cerró sus ojos suavemente mientras las caricias de Maxine acariciaban con ternura su mentón y cabeza. En ese momento, emanaba una tranquilidad que lo convertía en un gigante apacible. La conexión entre ambos parecía tejida con hilos de confianza y afecto. Newt, testigo de la escena, soltó una risa cálida. "Se siente tan a gusto contigo... Me alegra que le hayas conquistado".

"Oh, um... ¿puedo preguntar tu nombre? Soy Newt", dijo el joven, extendiendo una pequeña cortesía en forma de presentación.

Maxine respondió con una sonrisa encantadora. "Soy Maxine Borage, un placer... de Hufflepuff, ¿verdad, Newt?" Su tono ligero revelaba una familiaridad con el mundo mágico del que formaban parte.

Newt rió ante la astuta suposición de Maxine y asintió con gusto. "¡Sí, soy de Hufflepuff! Y es un placer conocerte." Realizó una leve reverencia, enfatizando la cortesía en su encuentro. Los oídos de Arthur se aguzaron, y sus ojos expresaron un interés agudo mientras observaba el rostro de Maxine, como si captara la esencia única que emanaba de ella.

"¿Te gustaría que ella te acaricie?" inquirió Newt a la criatura con una naturalidad que sugería una conexión más allá de las palabras. Como si comprendiera, Arthur empujó a Maxine suavemente, sus ojos brillantes la estudiaban con intensidad, como si evaluara su esencia.

"¡Jajaja, ¿en serio?" respondió Maxine, dirigiendo su atención a Arthur y luego a Newt. "Sí, lo haría toda la tarde. Es como un gatito gigante". Sus dedos se movían con amor mientras acariciaba a Arthur, como si estuviera ante un gato enorme y cariñoso.

Arthur, correspondiendo a las caricias, emitió un pequeño ronroneo, semejante al de un gato satisfecho. Su cuerpo se balanceaba con gracia, casi como un felino que se acomoda cómodamente en el regazo de alguien. La escena evocaba una ternura inesperada. Newt no pudo contener su risa. "Nunca lo había visto así antes. Pareces ser una persona especial, Maxine", comentó, reconociendo la conexión única que florecía entre la joven y la extraordinaria criatura alada.

Absorta en la presencia del maravilloso animal, Maxine permanecía concentrada, ajena a las palabras de Newt que, entre risas, le hablaba como si dirigiera mimos a su propio gato, aunque siempre con la precaución debida. Mientras tanto, Arthur, con su pico, empujó a Maxine con delicadeza, como si buscara captar su atención en medio de la conexión que se forjaba entre ellos.

La risa de Newt resonó en el aire. Nunca antes había presenciado a Arthur mostrarse tan amigable con una persona. Era un momento singular, lleno de magia. "Parece que le gustas mucho. Él es muy tímido, así que esto es algo raro", comentó Newt, revelando la rareza de la situación mientras disfrutaba de la complicidad entre Maxine y la majestuosa criatura alada.

Maxine, sorprendida, observó a Newt con asombro. "¿En serio? Es la primera vez que acaricio un Hipogrifo, de verdad." Luego, giró la cabeza para dirigir su atención a Arthur, continuando sus caricias de manera más pausada y cautelosa. Arthur respondió con un suave sonido, cerró los ojos y dejó que su cabeza se inclinara, una imagen que evocaba la tranquilidad de un perro dormido. En ese momento, la escena estaba impregnada de un bienestar compartido, revelando la especial conexión entre Maxine y la criatura mágica.

"A él realmente le gustas. No estoy seguro de qué es, tal vez tu naturaleza amigable o tu amabilidad", comentó Newt, sus ojos cálidos observando la conexión entre Maxine y la majestuosa criatura.

"Puede ser, Newt..." Maxine respondió con tranquilidad, sin interrumpir sus caricias a Arthur. Sin embargo, decidió cambiar de tema, llevando la conversación a terrenos más misteriosos. "Y por cierto, ¿qué haces en el Bosque Prohibido?"