Parte III Capitulo 22

Capitulo 22

"Oh, sí, por supuesto. ¿Tú sabes?" Maxine le pasaba la espada.

"Sé lo suficiente," dijo Newt, mientras tomaba la espada y hacía unos cuantos movimientos al momento de practicar. El joven quería impresionar a Maxine mientras le demostraba sus habilidades en el arte de la esgrima. "No te preocupes. Ya te iré enseñando," dijo Newt con amabilidad. "Aquí. Intenta golpearme," le instó el joven a Maxine.

Maxine, con cara aburrida, dijo, "Newt... no voy a pegarte con la espada... es una espada real, no quiero lastimarte y no es una de esgrima, así que no, jaja." Aunque se reían, el brillo en sus ojos mostraba que disfrutaban de su compañía mutua y de los momentos juntos.

Newt sonreía mientras observaba a Maxine. "No te preocupes, yo ya sé lo que hago. No hay de qué preocuparse, Maxine," dijo con total sinceridad. El joven sabía que sí estaba bien y que ella estaba segura. "¿Quieres intentarlo o te quedas así?" preguntó Newt con una voz amable, esperando a que la chica se le acercara para darle un toque de la espada... y después decirle lo que sentía.

Maxine, a pesar de su vergüenza por no tener habilidades previas, quería aprender. Hizo una estocada, un movimiento rápido y directo en el que la espada se empuja hacia adelante con la intención de perforar al oponente. Era una técnica precisa que buscaba encontrar una abertura en la defensa del adversario.

Newt sonreía y observaba la estocada que había hecho Maxine. Las habilidades de la chica en el arte de la esgrima eran buenas, aunque le faltaba un poco más de confianza en sí misma. "Buen trabajo," le dijo el joven y también le mostraba que ya sabía lo que él hacía. Seguía siendo amable... ¿pero la tenía? "Te puedo dar una estocada," propuso Newt a su amiga.

"Sí," Maxine sonreía. Newt le daba la espada para hacer la estocada, y el joven se cubría con su ‘armadura’ sin problema. Después de un rato practicando, "Buen trabajo," dijo Newt, con sinceridad.

¿No era el momento de decirle lo que sentía? La chica lo miraba, estaba esperando a que él diera el siguiente paso. Era por lo que Newt lo estaba pensando bien. "¿Te puedo dar un abrazo, Maxine?", preguntó el joven con su sincera voz.

"Gracias, Newt, tendría que hacerlo una rutina." Maxine miraba a los dos lados por si veía a la profesora McGonagall cerca; los iba a retar. "Umm, sí, un abrazo." Maxine abrazaba a Newt sin problemas. 

Newt sonreía mientras él también la abrazaba. No era el momento perfecto para expresarse, pero sentía que el abrazo lo valía. De alguna manera, en su corazón, estaba de acuerdo con los sentimientos que compartían. La pregunta era... ¿estarían los sentimientos correspondidos por Maxine? ¿Le diría Newt lo que sentía?

"Sé que esto es muy cursi... ¿pero puedo decirte algo?", preguntó Newt, con una voz suave e inocente. Maxine se reía aún jugando con la espada pesada de 2 kilos. "Sí, Newt!"

"He... he sentido muchas cosas por ti, Maxine. Siento que puedo confiar en ti y..." se le cortó la voz. ¿Era un momento para decirle que... él sentía más que una simple amistad?

"Me has hecho sentir cosas que nunca pensé sentir", admitió Newt, sin poder creer lo que estaba diciendo. "Quizás... te amo", se sinceró Newt, sin embargo, se le cortó la voz por la mitad de la frase.

Maxine recordó cosas de ayer de repente y se enrojeció, pero sonreía. Esas palabras la hacían sentirse bien. Newt sonreía al verla y sus ojos brillaban. ¿Estaría ella pensando igual que él sobre él? El joven tampoco estaba muy seguro pero… "Te quiero, Maxine", dijo Newt, con mucho amor en su voz. No lo podía creer, pero había dicho lo que sentía por el corazón de la chica.

Maxine, mirando al suelo con la espada, sonreía un poco. "Yo... también te quiero, Newt." El joven se sonrojaba al oír sus palabras. ¿Era realmente posible que Maxine sintiera lo mismo por él? Sin embargo, ella solo se sonreía levemente. ¿No era una respuesta fácil? ¿Dijo eso para que él se quedase con ella? ¿O acaso estaba diciendo la verdad?

"¿Somos... novios?", preguntó Newt, mientras esperaba la respuesta de Maxine. Maxine sonrió y miró hacia el castillo nerviosa. "Newt... no lo sé... ¿y si un día ya no estoy más aquí?" Newt observó a la chica y pensó en las cosas por las que ella estaba pasando. Sin embargo, el joven no quería perderla.

"No te irás, Maxine. Te lo prometo", dijo Newt, mientras le tomaba la mano. No podía creer que ella dijera que le gustaba. ¡Ahora, la chica decía que no lo sabía!

"Si te vas, yo también seré el que se vaya", dijo el joven a la chica, en forma de broma. Maxine se rió y movió la cabeza en negación. "¡Jaja, ¿qué? No puedes irte de Hogwarts, Newt…” decía. “Bueno, yo sí, quisiera no volver aquí", pensaba Maxine. Newt sonrió a Maxine. Ella se quedaba en Hogwarts pero... ¿qué pasaría si él se iba?

"Yo... yo me iría si tú te vas", dijo Newt, con la voz más seria que siempre le salió a la hora de hablar de él. "Si tú te vas, yo también me marcho contigo", el chico no quería que Maxine se fuera. Sin embargo, si ella se marchaba, él también. Maxine no se refería a eso pero no quería confundirlo.

"Pero... ¿serás un buen novio? ¿Cómo sé si eres digno, Newt?" Maxine bromeaba, pareciendo como si fuera un rey o Juana de Arco apuntándolo con la espada, y se reía actuando. Newt sonreía, pero al ver la espada, su cara pasó a ser de confusión.

"¿Qué estás... queriendo?" admitió el joven con una risa leve. "¿Digno de... tu mano?" dijo Newt, con la voz un poco más seria. No entendía por qué Maxine estaba pidiendo eso. ¿Era una forma de buscar excusas o una pregunta seria?

Maxine bajó la espada; él no podía seguir el juego o no entendía que estaba bromeando. "Umm, sí, algo así", Maxine seguía sonriendo. Newt continuaba confuso. La espada estaba muy cerca de él, y el joven no quería que la chica estuviera jugando con él así. Maxine sonreía, pero ¿qué quería exactamente?