Me enamoré de ti

XVI

Pruebo el desayuno asimilando que mañana viene mi madre, estoy muy nerviosa, no sé cómo vaya a reaccionar ni tengo las palabras adecuadas para decírselo sin que lo tome a mal.

Vamos, ¿que madre le alegraría que su hija vaya a tener un hijo a los 20 años? es obvio que a ninguna. termino mi desayuno un poco con angustia.

Me preparo mentalmente para salir e ir a la empresa, tomo el bolso y salgo del apartamento. Camino hasta que llego a la parada de autobuses, espero unos cuantos minutos y el bus aparece, me subo, pago el pasaje y me siento en una de las sillas.

Miro por la ventana y veo como jóvenes caminan a sus escuelas o universidades, es inevitable no sentirme mal, yo sería una de esas personas, estaría preparada para dar mi primer día de clases pero las cosas a veces no suceden como uno piensa o quiere, es más bien cosa del destino.

No me arrepiento de lo que hice, porque en cierta parte significa que lo disfruté, aunque no recuerde exactamente lo que pasó, puedo estar segura de que mal no la pasé.

Espabilo cuando me doy cuenta que ya llegué, me bajo del bus rápido y camino cruzando la calle que divide la carretera de la empresa. Entro y saludo al vigilante, me meto en el ascensor y espero pacientemente llegar a mi piso.

Salgo cuando las puertas se abren, camino hasta mi puesto, prendo el computador y empiezo a trabajar.

Me detengo por el chirrido de la puerta, quito mis ojos de la pantalla y miro a la entrada, es Oliver y está junto a una chica.

Él señala algunas cosas por lo que me hace entender que le está explicando cosas sobre la empresa. Ella se muestra más interesada en él, no deja de mirarle con una sonrisa en sus labios.

Aparto la mirada ya que mi corazón no soporta la escena que tengo enfrente. Me concentro en terminar de llenar los documentos.

-Kate -su voz hace que mis latidos se detengan.

-buenos días señor -contesto amable.

-buenos días, Kate esta es Cassie, es la nueva gerente y me preguntaba si podrías ponerla al tanto de lo que está pasando en la empresa -muestra sus dientes perfectos en una sonrisa.

asiento queriendo negarme.

-bueno, las dejo.

camina hasta desaparecer por la puerta.

-bueno, la empresa en estos momentos está en su mayor esplendor, los clientes han quedado muy satisfechos con los nuevos productos por sus ingredientes, por lo que nos lleva a pensar que tenemos que seguir fabricando productos con dichos ingredientes.

-es interesante, he probado esos productos y son lo mejor del mercado, ¿puedes pasarme las listas de chequeo? para saber cuánto se ha vendido últimamente y estar pendiente de todo.

-si claro, no habrá ningún problema.

-genial Katie, eres todo un amor -sonríe con suficiencia.

-es Kate.

-como sea, espero esos documentos.

Se va, quiero quitarle esa sonrisa de los labios, por más que ha tratado de ser una linda persona frente a Oliver, no lo es, es toda una egocéntrica que se cree superior al resto de personas.

Con enojo le envío todas las listas y documentos de la empresa de estos últimos tres meses.

Para cuándo se termina mi jornada laboral, recojo mis cosas, apago el computador y salgo de la oficina. Camino y entro al ascensor, las puertas se abren luego de minutos. Camino hasta que me detengo al verlos de nuevo juntos.

No entiendo nada, estoy confundida, ¿por qué están juntos?

las acciones próximas me lo confirman ya que con posesión, Cassie estrella sus labios con él. Quedó perpleja al ver la escena, es ella, la chica con la que estaba hablando ayer es ella.

La verdad es que fuera preferido que apareciera meses después, al menos emocionalmente estuviera mejor, pero ahora que mis emociones son un caos y las hormonas están todas revueltas, yo solo quiero llorar y desaparecer del mundo. Me siento realmente mal al ver que no se han separado, al contrario han profundizado el beso, como si no quisieran despegarse el uno del otro en un buen tiempo.

Reacciono cuando las lágrimas las siento descender por mis mejillas, camino afuera del lugar antes de que me vean y no estoy para dar explicaciones. Espero el bus y como ayer el día se rompe, estando de acuerdo conmigo en llorar.

Logro subirme rápido al bus, por lo que no me mojo mucho. Me abrazo a mi misma sintiendo frío, solo quiero llegar a casa, comer y acostarme en mi cama a llorar.

Llego y entro rápido al apartamento.

-¡vienes toda empapada! -exclama Bárbara.

-pues eso díselo al cielo, al parecer estamos de acuerdo en llorar el día de hoy.

Ella bufa y continua viendo su programa.

-ve a quitarte la ropa y en la cocina está tu comida.

sonrío agradecida, ¿que haría yo sin ella?

Entro a mi habitación y me quito la ropa, me doy una ducha de agua tibia, me relajo de este día tan cansado. Salgo y me coloco la pijama.

Vuelvo a la sala y tomo el plato con comida. Empiezo a comer entreteniendo me con el programa de Bar.

Es un dorama de una chica con tan mala suerte como la mía. Sonrío ya que me da gracia el pensamiento.

Termino y dejo el plato en su lugar.

-¿ya te vas a dormir? -pregunta al verme caminar de nuevo a mi habitación.

-si, estoy cansada -digo casi en un hilo de voz.

ella asiente y continua viendo su dorama.

Me acuesto en la cama y como si se tratara de que la almohada me estuviera pidiendo que soltara todo empiezo a llorar y desahogarme. Suelto todo y me permito llorar, sabiendo que soy fuerte, que el día de mañana será mejor, que tengo todo lo que quiero y necesito.

Con Oliver o sin él puedo con esto, puedo sobrellevarlo y se que voy a tratar de ser una buena madre para mi hijo o hija.

pensar en su sexo me emociona y me llena el pecho de una sensación cálida y agradable.

Sonrío en medio de lágrimas, Dios no puedo creer lo bipolar que puedo llegar a ser.


 



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En el texto hay: romanace

Editado: 03.08.2024

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