El conductor

Scarleth hizo sonar las alarmas, las puertas automáticas se cerraron, los habitantes de la fortaleza se resguardaron en sus hogares.

Margaret se despertó de las medicinas que le dieron para el dolor y Henrry paseaba de un lado al otro intentando comunicarse por la radio, toma su chaqueta de la silla. - Margaret, te voy a dejar encerrada en tu cuarto, por ningún motivo salgas con el brazo así, si son troncotrons, tu sangre los alocara. Quédate aquí y descansa.  - Si nos están invadiendo necesitaran de mi ayuda- grita Margaret. 

 Henrry sale de la habitación y le deja cerrando la puerta, Henrry sabía que Margaret no obedecería y deja atrancada la puerta con una camilla que se encontraba en el pasillo, saca la radio de su bolsillo para comunicarse con Scarleth.

• Scar… Habla Henrry, ¿Por qué las alarmas sonaron? - 
• Henrry, sé que no me vas a creer, pero creo que Steve está vivo. Él… se llevó las balas hechas de diamante que solo matan específicamente a un dragón, las balas hechas de diamante, él es el único que sabe para qué sirven esas balas, estoy segura es él.

Henrry, por favor pon a todos a buscarlo, que no salgan de la fortaleza. 

• Scar te creo, pero quien nos asegura que él sigue en la fortaleza. Puede que él se haya robado, pero hace mucho antes, las balas normales venían desapareciéndose hace días.  
• No, no, Henrry escúchame, yo siempre vigilaba las balas de diamante y durante eso días las balas estaban aquí, creo hay un traído infiltrado porque alguien limpio en lugar.

 La gente furiosa preguntaba por las alarmas y nadie les daban razón de nada, lo vigilantes se mantenían los obligaban a entrar a sus casas, ellos también desconocían del problema. Uno de los vigilantes con un corte en la mejilla se acerca a uno de los cazadores novatos y le pregunta - ¿Qué está sucediendo? ¿otra vez se metieron los Troncotrons? 

El novato cazador percibe el olor a alcohol en el aliento del vigilante y le responde a la pregunta. - No lo creo, el comportamiento de un troncotron no es ocultarse, si fueran ellos ya los abrimos visto, ellos buscan carne.  

Margaret se levanta de la camilla, con su brazo sano busca su radio en los bolsillos de la ropa que se encontraba sobre la silla de visitas.

• Scar ¿me escuchas?   
• Te escucho – responde Scarleth-
• ¿Qué sucede?
• No estoy segura, pero creo que Steve estuvo en la fortaleza.

Por el parlante hablaba Henrry – No se alarmen, por favor, se han cerrado las puertas de la fortaleza porque al parecer hay un ladrón entre nosotros y quisiera que esa persona se acercara a devolver una caja que se encontraba en el viejo laboratorio antes de tomar medidas extremas. Le esperare en el despacho por treinta minutos, si nadie aparece con esa caja. Por seguridad de todos nosotros se va a registrar en cada lugar de la fortaleza, inclusive en las habitaciones del personal y civil.

 Henrry espero en el despacho y nadie se acercó con la caja de balas, los cazadores se encargaron de registrar cada lugar, pero no había rastro de la caja.

• Estamos perdiendo tiempo, revisemos las cámaras y veamos como despareció esas balas y las balas normales, si esas balas están con Steve es porque piensa seguir con esa absurda idea de capturar a un dragón y no lo voy a permitir. – dice Scarleth.

 Scarleth, Margaret y Henrry revisaban las grabaciones desde hace tres semanas que comenzaron a ver errores en el conteo de balas, y notaron que había fragmentos borrados de las grabaciones a las mismas horas, a las dos de la madrugada y la medianoche.

• El que toma las balas debió ser uno de aquí, sabe dónde está el estudio de grabación y tiene libre acceso aquí. – dice Margaret-

En la parte en que el camión llega a la fortaleza, los tres observan atentamente.

Como la persona de gorra se baja del camión abre las puertas de atrás y empieza a chorrear un líquido marrón, ese instante Margaret sale con el detector de metales en su mano a revisar a la persona, en ese instante de revisión la sospechosa empuja Margaret y entra por la por la puerta y detrás de ella los troncotrons entraron, mientras todos se batallaban con los trocotrons, la sospechosa entra caminando rápido sin ser atacada,   Margaret va tras la sospechosa y un trocotrons la salta y muerde, Henrry retrocede de nuevo el video y lo para.

La caja de balas desapareció cuando paso lo del camión, miren, cuando Margaret es atacada su tarjeta de seguridad cae al piso y la sospechosa la recoge y corre a la zona 13 Los vigilantes la siguen detrás y ella entra al cuarto de limpieza con la tarjeta de Margaret y la mujer de estatura baja salió vestida con el uniforme verde de limpieza con un balde.

• Scarleth, lo siento la caja salió del lugar por mi culpa. – dice Margaret-
• Esto no es tu culpa, esto es obra de alguien que sabe como funciona la fortaleza, se disfraza, engaña y conoce sobre las balas.
• ¿Quién puede ser? Se pregunta Margaret.-