Coleccionista de cartas

Colecciona cartas, colecciona amores, en sus memorias y en sus manos halla la ira, el fulgor, la pasión y la tristeza que despertó en cada uno de sus amados.

¿Qué es lo que realmente quiere el coleccionista? ¿Una montaña de manuscritos sobre cuántos amaron su amor o el recuerdo de como amó?

El coleccionista lee una y otra vez sus cartas, que en algún momento no existían y en su momento el fue un pensamiento de su amado, fugaz o no, fue.

El coleccionista realmente ama sus cartas y las abraza, siente el olor a guardado, la textura del papel, las abolladuras de los sellos de cera.

Admira cuantos títulos del amor posee, sin embargo, cuando viene la noche sus amados se han esfumado y las cartas no abrazan.