Las cosas en la escuela siguen estando extrañas, Samantha ha estado haciendo campaña por su cuenta junto a su sequito de locas para que acepten incluir a la reina del baile. Es algo patético de ver pues al parecer es la única interesada en ese asunto y sinceramente nadie más quiere pasar por lo mismo del año pasado, durante el baile de invierno. Las cosas estaban marchando bastante bien, la música, la gente divirtiéndose, hasta que llego la famosa coronación del rey y la reina, Evan Collins un chico de último año fue elegido, como rey del baile, él era el presidente del consejo escolar, un chico amable y bastante simpático con todos. Luego llego el momento de la reina, Margot Rogers y claro Samantha, por alguna razón ambas empataron en el primer lugar y ninguna de las dos quería ceder la corona, terminaron peleando agarrándose a golpes y en un mal movimiento por parte de una de ellas, la directora termino de espaldas en el suelo quedando con una pequeña fractura en uno de sus brazos, todo eso solo por un pedazo de plástico, aun así ellas continuaron peleando hasta que los maestros tuvieron que separarlas, era como ver a dos leones peleando por el último pedazo de carne en la mesa.
La fiesta de invierno estaba tan solo a un par de horas, Claire iría con Tyler y claro yo como mal tercio iría con ellos, no soy la más popular, así que no me quedaba de otra que ir con ellos. Pero la verdad no tenía intención de ir, pero Claire me estuvo rogando desde hace días e incluso había propuesto que fuera con su primo Devon, no es que sea feo, de hecho, es bastante atractivo y tiene buen cuerpo debido a lo deportista que es, pero el chico es un caso especial. Es un tarado con aires de fuckboy y estoy segura de que lo único que se ha follado es un oso de peluche que era de su hermana menor. Y la sola idea de imaginar eso es asqueroso. La sola idea de aparecerme en el lugar con el me provocaba escalofríos, eso sería suicidio social, más del que ya tengo. Asher era mi otra opción, pero iría con la chica que le gusta y ha intentado conquistar desde hace ya bastante tiempo. Mi vestido era uno de mi madre, modifique un poco su viejo vestido de novia, era pomposo y un tanto grande, pero logre adaptarlo dejándolo algo más corto y ligero. Y claro lo teñí con un lindo color verde. Un peinado nada llamativo y maquillaje que combinaba con el resto de mi atuendo, algunos accesorios y listo. Me mire en el espejo una última vez antes de salir de mi habitación bajando con cuidado gracias a los tacones, nos es que fueran demasiado altos, pero caminar con ese tipo de zapatos se me dificultaba bastante caminar sin perder el equilibrio.
Claire paso por mí media hora después de lo que me había dicho, odiaba esperar, pero ella literalmente le perdonaba todo, venía en la vieja camioneta de Tyler sin lugar a duda la salvación para muchas cosas, esa chatarra nos ha salvado en más de una ocasión. La música se escuchaba a varias calles alrededor de la escuela, es demasiada producción para ser solo una fiesta de secundaria y en un pueblo pequeño. El gimnasio estaba exageradamente decorado con tonos dorados y plateados, me recuerda un poco a una película de John Travolta. Demasiado ochentero para mi gusto, pero aun así, a pesar de todas las decoraciones exageradas el lugar se veía bastante bien. Apenas entramos nos dirigimos hacia donde estaba la improvisada barra con bebidas para jóvenes de nuestra edad, que claro tarde o temprano terminaba llena de alcohol gracias a los más rebeldes de la escuela.
A lo lejos divise a Samantha, la chica parecía una bailarina de un club nocturno. Me quede con la boca abierta por un segundo. No puede ser estoy hablando como mi madre, pero era cierto, ese vestido fucsia que era demasiado ajustado y la verdad no dejaba nada a la imaginación, y claro el color resaltaba aún más gracias a las luces del techo. Hice un gesto de desagrado esperando que nadie lo notara. Esboce una sonrisa al ver a Asher junto a aquella chica, le enseñe mis pulgares para desearle suerte. Según el Eveline era la chica más cool de todo el mundo y haría todo a su alcance para poder conquistarla y creo que lo está logrando. Giré la vista notando la presencia a mi lado, estaba dispuesta a alejarme, pues estando cerca de demasiadas personas me siento incomoda, a pesar de que se me da bastante bien el socializar, más al notar que se trataba de Dylan no pude evitar quedarme congelada. El traje azul que llevaba puesto lo hacía lucir como galán de telenovela, sus ojos tenían un brillo especial, distinto al que había visto el día que me llevo a casa, ya no se veía tan triste. Se veía diferente, no sabía que podía ser, pero se veía bien. Creo que terminar su relación con Samantha le hizo más que bien, pues ahora se ve tranquilo. Las miradas entre ambos han continuado, desde ese día siento que me ve más que antes, aunque tal vez solo sea imaginación mía y yo claro sigo viéndolo con curiosidad. Debería dejar de hacerlo, no quiero que piense que soy una loca acosadora.