Mentiras Peligrosas

#4 Lineas Ocultas I

Glassdrop, ????

Hubo un momento en el que Park sintió que le estaban arrastrando por la tierra, no se encontraba bajo sus seis sentidos y no podía recordar a que se debía esa razón. Despertó luego de que su cabeza golpeara varias veces una superficie rocosa, al menos eso supuso, pues le habían embolsado y atado de manos y piernas.

Aunque tratara de extender los brazos no podía, se sentía impotente ante la situación. Comenzó a torcer sus muñecas para liberarse, podía sentir como la cinta comenzaba a debilitarse, permitiéndole más movilidad. Sus pies eran otra historia, le habían atado con más fuerza y la bolsa no tenía el espacio suficiente para que se pudiera mover.

En medio de esta conmoción Park noto que su audición había vuelto, pues lograba escuchar más allá de sus pensamientos. Su tono de voz era adormilado, sus pensamientos transitaban en cámara lenta. Actuaba por instinto, sabía que algo andaba mal, pero no lograba descifrarlo.

Escucho el eco que provocaban gotas de agua que imagino que caían del techo del lugar por el que le estaban arrastrando. Un fétido olor a basura inundo sus fosas nasales, era como si dos ratas de cloaca hubiesen muerto en el mismo charco y luego una tercera rata hubiese venido a comerse la carroña de estas.

La espalda le dolía, el terreno era terroso, sin embargo, abundaban piedras y objetos puntiagudos que le rasgaban o le golpeaban al ser arrastrado sobre ellos. Trataba de esquivar el camino que no era capaz de presenciar, tratando de visualizar el territorio por venir.

Sus ropas estaban húmedas, si no mojadas, aún tenía sus zapatos y podía sentir su teléfono en el bolsillo, lo que le llevo a pensar que no le habían despojado de sus posesiones luego de lo que haya sucedido. Pensar en lo que había sucedido le provocaba un dolor de cabeza. Podía deducir que no debería estar ahí, pero no lograba recordar cómo es que se había visto envuelto en dicha situación.

De repente su bolsa se vio inundada de agua, como si le hubiesen zambutido, trago agua y termino tosiendo no solo por asfixia, si no por el horrible sabor de boca que le dejo, trato de alzar la cabeza en busca de aire, sintió la fresca brisa en la punta de su nariz, pero no era suficiente para aliviar su falta de oxígeno. Comenzó a patalear y moverse bruscamente, no lograba tomar aire, cada instante, su reflejo nauseo cerraba su tráquea y le obligaba a sacar la lengua. Sus ojos se habían irritado por la presión. Park estaba perdiendo la paciencia y el tiempo. Temía por su vida, que terminaría de manera tan abrupta, con tantas preguntas sin resolver. Luchaba contra su propio cuerpo y su reflejo por respirar, sabía que se ahogaría si dejaba de luchar. Se llevo la manos a la garganta y apretó con la poca fuerza que le quedaba. pensó que morir por su propia mano seria la salida menos violenta.

Aquello que estaba tirando de su bolsa, le tomo por la cintura y lo saco del agua, Park finalmente pudo respirar. Escupió toda el agua negra que había tragado, sus arcadas no desaparecían, se limpiaba la lengua como podía. Aquella misma fuerza que hace unos momentos le había sacado del agua, le había soltado, su corta caída libre fue detenida cuando su cadera impacto contra aquel rocoso suelo.

Desesperanzado, mojado y en una condición deplorable, le continuaron arrastrando por el suelo. La única aliada de Park era la oscuridad, continúo forcejeando en silencio, o lo que él consideraba silencio. No recordaba haber entablado la más mínima conversación desde que había despertado, no obstante, su captor sabía que estaba consciente, debió haberle escuchado toser luego de emerger del agua.

Finalmente, gracias al agua que había humedecido sus amarras había conseguido liberar sus manos. Pensó en cuál sería su siguiente movimiento, claramente sabía que, si delataba su situación actual, le volvería amarrar u otra cosa en la que Park no quería pensar, pero sabía que era el desenlace inevitable de la situación en la que se encontraba.

Luego de que su trasero fuese arrastrado por un terreno rocoso, fue que se percató del objeto que llevaba en su bolsillo trasero, cargaba consigo las llaves, no solo eso, también una navaja suiza lo suficientemente afilada para cortar el resto de sus amarras. Trago saliva. Era el momento de la verdad, sabía que una vez la tuviera, no habría forma de disimular su escape, tendría que soltarse con la mayor rapidez posible para después correr en el sentido que tuviese frente a él. Guio su mano lentamente a través del laberinto que era la bolsa. Fue su dedo meñique el que palpo el aro de su llavero, su mano quedo aplastada luego de que una gran roca se posara debajo de ella. La roca le había dejado un gran corte que iba de su mano hasta el comienzo de su brazo. Park pensó que, si alguien pudiese verle, pensaría que es un contorsionista por la forma en la que su cuerpo estaba posicionado. Intento nuevamente tomar el llavero, esta vez su meñique se había aferrado al aro y había logrado sacarle del bolsillo.

La esperanza de Park murió rápidamente cuando sintió que le estaban levantando, las llaves se cayeron y quedando atoradas al fondo de la bolsa. Su altura continuaba incrementándose, lo que solo podía significar una cosa, se estaban preparando para lanzarle. Instintivamente Park se encontró rogando porque no fuese así, la palabra no fue pronunciada varias veces. Desgraciadamente su cuerpo ya se encontraba luchando contra la gravedad. Extendió su mano en el aire en busca del llavero. Rápidamente impacto el suelo y comenzó a rodar en lo que el supuso era una cuesta abajo. Había logrado aferrarse a las llaves. Sin embargo, su rodar no se había detenido, sabía que si lograba salir de esa tendría moretones por todo su cuerpo.



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En el texto hay: vampiros, horror

Editado: 30.11.2023

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