Capítulo 31
Un día de descanso
Aodhan fue al encuentro de los dos héroes que habían vencido por primera vez al Roble de la Verdad.
Sirsha: (malherida nuevamente en brazos de Declan le dijo a Aodhan) Me está cansando jugar este juego de acatar órdenes y esperarme lo peor.
Declan volvió a coser a Sirsha que se desmayó nuevamente de dolor, pero esta vez Aodhan la asistió con una poción mágica para acelerar la cicatrización.
Declan: (al mago reprochando) ¿Por qué no hiciste eso la primera vez que le pasó?
Aodhan: Si no vivimos en la oscuridad, no apreciamos la luz. Si no sentimos el dolor, no reconocemos los momentos de paz.
Una vez que Sirsha se restableció Aodhan les comunicó que era el momento de descansar una jornada.
Sirsha: Con los pocos días que tenemos por delante... ¿No es un riesgo perder tiempo? Perdimos un día con el roble.
Aodhan: No te preocupes Sirsha. A veces hay que dar tres pasos hacia atrás para saltar adelante. Quedarse quieto para analizar la locura del alrededor. Descansar. Agotados como están, no pasarán de la próxima prueba. Además, deben saber lo que seguirá a continuación. No podrán superar lo que viene sin ciertos conocimientos.
Sirsha: ¿Y qué sigue? Un gigante despechado.
Aodhan: (soltando una carcajada) ¡No! Un duende resentido con la vida.
Durante el día que se tomaron para sí mismos, Aodhan cumplió su promesa de enseñarle a Sirsha algunos conocimientos básicos de magia y adivinación. Le impartió saberes tales como técnicas de hidromancia, aeromancia, calcinomancia y geomancia.
Aodhan: (a Sirsha) Por ejemplo princesa, puedes predecir el futuro haciendo una pregunta al agua si está frente a un lago. Concentrándose en la consulta, tiras una piedra. Si la respuesta es positiva, el número de ondas será número par. Si la respuesta es negativa, el número de ondas que se forman en
el agua será impar. También, puede hacerse observándose el viento. Observa las nubes y formula la pregunta. Si el viento sopla en dirección norte u oeste, la respuesta es positiva. Si sopla en sentido este o sur, negativa. Si no tienes un lago o arroyo cerca prende una vela o fogata. La forma y volumen del fuego le dirán la respuesta. Si la fogata da mucha luz, se viene un gran éxito; si la llama crece de tamaño, la respuesta es positiva con un logro duradero; si la llama se achica, la respuesta es positiva también, pero con un éxito efímero; si la llama termina en punta, significa buena suerte; si tiene problemas en encender el fuego, la respuesta es negativa; si se apaga, inconvenientes, obstáculos, enfermedades u accidentes; si chisporrotea con normalidad, tiene que seguir cuidando lo que Rowan te regala con su gran poder; si chisporrotea, tus planes llevarán un gran esfuerzo; si la llama es pequeña y débil, otra respuesta negativa; si oscila, hay grandes viajes; si la llama se separa, algo termina; si despide bastante humo, peligro.
Sirsha oía con atención. Estaba fascinada aprendiendo cosas que no conocía y que podía resultarle útiles.
Aodhan: (con seriedad) Pero no te abuses de tus conocimientos. El saber es poder, pero mal encausado puede convertirse en obsesión. Consulta cuando sea estrictamente necesario y deja todo en manos de Rowan que tiene un plan para ti.
Sirsha prometió usar con moderación sus nuevos conocimientos y manejarlos con sabiduría. De todos modos no dejaba de estar entusiasmada.
Aodhan le enseñó también técnicas de geomancia, adivinando según las marcas en el suelo.
La princesa lamentaba que Declan no pudiera oír todo lo que estaba aprendiendo. Si bien nunca hubo grandes diferencias entre ambos, empezaban a marcarse debido a las responsabilidades de cada uno.
Mientras tanto el capitán no dejaba de entrenar.
Sirsha lo miraba con atención y admiración. Al observarlo, sentía pena por todo lo que había pasado Declan. Tantos años de sufrimiento y esclavitud. Se prometió a si misma que si todo salía bien lo recompensaría con lo que él deseara. Aunque eso significara que la vida los separase. Ese pensamiento provocó en el corazón de la heroína un vacío y una sensación de ahogo.
El resto de la jornada la pasaron tranquilos alrededor de una fogata. Nunca se sintieron todos tan en paz y libres como en ese momento.
El mago no quiso decirles lo que seguía en el itinerario para dejar a los jóvenes disfrutar de un poco de tranquilidad. Se venían tareas y tiempos más duros.
Editado: 16.09.2020