Señorita Bell:
Le ofrecemos nuestras más sinceras disculpas por lo irresponsable que han sido con usted y sus pertenencias. Sin duda el/ los culpables serán castigados si así lo desea, y de ser asi tendra el privilegio de elegir el castigo adecuado siempre cuando no supere las reglas acordadas, para esto le ofrecemos nuestra ayuda como una guía hacia lo correcto.
Lo lamentamos profundamente, en un futuro cercano se lo comenzaremos.
Hasta pronto...
L.D.R.
Jamás vi una broma tan bien hecha, hasta me hace dudar si lo es en verdad, pero ¿qué sería sino? ¿Y por qué dice Bell en la carta y mi apodo en el sobre? Ya no entiendo nada y comienza a darme un poco de miedo todo esto, ¿y si un psicópata está obsesionado conmigo?
Dios, esto es malo, se ve que están muy seguros de que no veremos prontos ¿Cuánto tiempo es pronto? ¿Por qué están tan seguros? ¿Debo decirle a alguien? ¡No sé qué hacer!
Bien, tranquila, soy una chica de dieciocho años que está recibiendo y le están pasando algunas cosas raras ¿Qué se hace en estas situaciones?.. Se lo debería decir a mis padres, pero no quiero preocuparlos y que resulte ser una broma tonta de algún grupo de estúpidos.
Al recibir la carta el lunes la guarde en mi mochila, pase toda la tarde con Amanda, nos arreglamos por así decirlo, y acordamos decirnos todo lo que sintamos sobre la otra; fue un poco duro pero nos dijimos las cosas y ahora estamos muy bien de hecho.
Me volví a mi casa pasada las siete de la tarde dispuesta a hacer la tarea, bañarme y acostarme a dormir, olvidándome por completo de la carta.
Hasta ahora, por lo menos, ya es jueves, las desapariciones y la caída de mis notas pararon, sin embargo en uno de mis papelitos con pegamento apareció una nota que yo nunca puse, esta dice "Por favor, responda la carta. Saludos." Estaba pegada donde antes fue puesta la carta, ayer la vi y no sé qué responder, o si siquiera debo responder...supongo que si lo hago la debo dejar en el casillero y alguien la buscara mientras no hay nadie en el pasillo.
Empecé a dudar realmente ai es una broma...
Lo pensé durante todo el dia, no me concentre en ninguna clase. En el casillero no apareció nada más, pero trate de despegar la nota y no pude, está completamente pegada.
No le dije a nadie por obvias razones, Ada me pregunta cómo sigue la cosa y yo le respondo con alguna mentira o la evito para no preocuparla o asustarla. Sin embargo, de a ratos necesito sus opiniones, como ahora.
Durante la última clase ignore a todos, hasta al profesor, seguía pensando en que demonios puedo hacer. Jimmy me pregunto varias veces si estaba bien, claramente noto mi perturbación, le respondía con un "sí" sin mucha emoción para seguir reflexionando en las consecuencias de contestarles esa carta al extraño.
A él no le convencia mucho mi respuesta, pero dejó de cuestionar mi rara actitud al final; supongo que se dio cuenta que no tengo ganas de andar contando esto que me esta pasando por el momento o simplemente se aburrió de preguntar y recibir la misma respuesta una y otra vez.
Termino la ultima clase, fui al casillero, asustada de lo que podría encontrarme, y ¡oh, que sorpresa! otra nota pegada en el mismo lugar. La cual decía:
"Necesitamos que responda, la Reina quiere su opinión sobre el castigo que se le dará al culpable de tal abuso de privacidad o si ha decidido que no haya ninguna condena.
Nuestros más cordiales saludos...
L.D.R"
Cerré con fuerza la puerta de chapa y me fui lo mas rapido que pude -sin llegar a correr, yo no corro nunca.- de ese lugar completamente enojada. Mientras voy caminando más calmada para casa llegue a una decisión...
Responderé esa carta.
. . .
Tres horas después de llegar a casa comencé a conversar conmigo misma si era buena idea responder y las posibles consecuencias que me traería si no era una broma o si lo era, de cualquier forma algo sale mal o pierdo algo.
Salgo de mi cuarto en direcciona la cocina para buscar una botella de agua de 500 ml y de paso ver que puedo comer, cierro la heladera al no encontrar nada, abro todas las alacenas en las que guardamos las galletitas, snacks, etc. pero sigo sin encontrar nada; rendida y frustrada de mi búsqueda fallida me retiro de ahí con paso pesado haciendo sonar mis talones contra las baldosas de nuestro viejo piso volviendo a mi cuarto.
Cierro la puerta con cuidado, doy media vuelta y me tiró boca abajo sobre mi cama de una plaza ubicada contra una de las paredes debajo de la ventana con uno de mis brazos doblado debajo de mí y el otro colgando por el borde del colchón; contestare la carta, eso es claro, pero ¿qué les respondo?
Para cuando me di cuenta ya eran las tres de la mañana, seguía tirada en la cama, mi cabeza parecía estar en blanco completamente, me quedé mirando un punto fijo hasta "despertar" y ver tal hora. Rápidamente me levanté para sentarme en el escritorio tomando una hoja blanca a rayas y un par de lapiceras, una azul y la otra violeta con brillitos, dispuesta a no moverme de ahí hasta haber escrito la dichosa carta.
Horas y horas después, ocho intentos fallidos más tarde la tenía casi lista, la novena seria la indicada; cada carta que he escrito no me termina de agradar cuando la finalizó, no me gusta la firma, la redacción, hasta me ha llegado a molestar mi propia letra. Sentía que no eran las correctas por lo que las dibuja o rayaba un poco y las dejaba de lado, no las tiraría en casa por si mi madre las ve y decide husmear, las tiraría en algún tacho que encuentre al ir a la escuela o en esa misma instalación.
Para las seis de la mañana tenía lista las novena carta, con esta no sentía nada raro por lo que me convencí de que era la indicada, lo único que faltaba era el sobre el cual no tenía, va tengo uno con dibujitos infantiles, no obstante no se los dare con ese ya que es bastante vergonzoso. Por lo que baje rápido al living deseando poder encontrar uno en algún cajón de mama, sin éxitos subí de nuevo.
#22730 en Otros
#3001 en Aventura
#16571 en Fantasía
#6452 en Personajes sobrenaturales
Editado: 03.07.2020