EL ALMUERZO

Ha llegado la hora del almuerzo,  también me he ofrecido a ayudar a servir la comida.  Hoy nos hemos rifado la cabellera con las cuñadas de Wale, se ha preparado Kak-ik de pavo, tamalitos y arroz;  de postre, buñuelos y mole y de beber fresco natural de Jamaica. Para el resto de la velada se han preparado enchiladas, tamalitos de chipilín, rellenitos de frijol y atolillo, además de bebidas con alcohol. Todo un suceso la reunión, pero lo he hecho con mucho gusto por mi amiga.

Observo al estirado aguafiestas sentado frente a la silla en la que me corresponde tomar lugar en la mesa y se me ocurre una estupenda idea. Servimos a cada uno de los invitados y pido a Cristy la cuñada de Wale que me deje servirle el almuerzo al tipo. Ella me brinda una sonrisa de complicidad y accede. 

Me acerco con los platos llenos de comida y los coloco frente a él, le regalo una sonrisa y me acerco a su oido y añado en un inglés lo más claro posible. -Bienvenido y que disfrutes tu almuerzo-. Me observa con mirada asustada; me coloco frente a él. El padre de Wale ofrece a los novios unas palabras de felicitación por su proxima boda, da la bienvenida a todos los presentes y nos desea un buen provecho.  Todos le agradecemos y comenzamos a disfrutar de nuestra comida y empieza la diversión.....

El aguafiestas ha colocado la primera cucharada de kak ik  en su boca, de repente comienza a ponerse rojo como un tomate, toma el vaso con agua y se apresura a beber de él; empieza a tocer y todos se preocupan y se acercan a prestarle ayuda.  La madre de Wale le aleja el plato; se disculpa y pregunta que pudo haber sucedido; le ofrece prepararle alguna bebida que pueda ayudarle;  yo finjo arrepentimiento y me disculpo por la confusión. Les explico que habia preparado esa comida para mí con chile cobanero; pero que por la rapidez en la que se habia servido la comida, pude haber confundido los platos. El gringo también finje haber disculpaldo mi confusión; algunos en la mesa me observan con duda, otras reprimen una sonrisa, y yo, me siento mas que satisfecha.

La comida continuo sin ningún contratiempo, sin embargo el gruñon unicamente se dedico a beber de la bebida que habian preparado para minimizar el malestar de las quemaduras de su boca. 

Luego de haber terminado de almorzar, la fiesta continua, beben, bailan, conversaban y rien; mi amiga estaba feliz junto a su novio, se observa cuanto amor se profezaban y  en el fondo de mi corazón sentí un poco de nostalgia; salí a la terraza a hacer una llamada, deseaba escuchar a mis pequeños hijos, aunque ahora ya no tan pequeños, mi necesidad de oir sus voces no ha cambiado desde que eran muy pequeñitos. -Hola nena-dice mi hijo mayor.  -Hola nene-, le contesto con una sonrisa. -¿Todo bien por allá? Si gran jefa, todo friamente calculado. Mi hermana y yo estamos muy bien, ya llegamos a Cobán, pasaremos hoy la noche acá y luego iremos a algunos sitios turisticos, en dos días salimos para Puerto Barrios-. Perfecto cariño, me alegro mucho por ustedes, tu hermana está bien? -Claro nena, siempre cuidada por tu sargento favorito, aunque en este momento dice que no puede atenderte -. Sonrio. A mi hija desde muy pequeña no le ha gustado hablar por teléfono, es muy extrovertida y no puede estar quieta, por tanto no es un insulto para mí que no quiera atender el teléfono -Bueno mi sargento, siga por favor con la labor asignada; te amo Sargento. - -Yo también te amo mi nena favorita, nos vemos en un par de días, cuidate mucho y saludame a mi tía-. -Adios amor, te amo-. Finalizo la llamada.  Alex siempre se refiere a Wale como su tía, lo hace porque le gusta su sobrina y aunque nunca se ha animado a hablarle, a continuado con la broma que Wale es su tía política. Sonrio.

-¿Aún disfrutando de la confusión de los platos de comida? -Escucho una voz en mi espalda. Me volteo y veo al gruñon, está ahi parado frente a mi con el seño fruncido. -No tiene sentido disfrutar las confusiones, simplemente son confusiones-, indico. -Pues yo creo que en su caso si lo hace-. Trato de alejarme y me toma del brazo. -Suelteme, está lastimando mis flacos brazos-. El me observa con confusión y suelta mi brazo lentamente y me indica. -¿No puede comparar un tonto comentario con una broma de esa manera, sabe que le provoco un fuerte daño a mi garganta?

-¿Tonto comentario?, mire ..... -Dave, mi nombre es Dave-. -Pues sea como se llame, a mi no me interesa que piense que soy una mujer flaca y fea, no estoy acá para ganarme su admiración, solamente que me molesta que haya sido recibido en esta casa con tanta hospitalidad y agradezca ofendiendo a sus anfitriones de esa manera-. y me alejo lo más rapido que me es posible.