Perla

Después de recibir la llamada de Steve subí a mi habitación me duché y me vestí, un jeans ajustado con rotos una blusa de manga larga y mis adidas negros, bajé a la sala y vi dos hombres sentados en el sofá 

-Señorita Perla 

-Quienes son ustedes 

-Eso que importa 

Uno de ellos me aguantó y el otro colocó un pañuelo en mi nariz, luego de eso no recordé nada más. Desperté atada a una silla, delante de mi había una mesa y allí había un hombre y los dos hombres que llegaron a mi casa 

-Que quieren de mi 

-De ti muchas cosas 

-Por que me tienen aquí 

-Ya lo verás, deja que llegue mi visita 

El hombre me dejó sola y se fue, después de 3 horas allí escuché voces, la puerta se abrió y por ella entró Steve con Joel James y mi padre 

-Estan locos 

-Vinimos a sacarte de aquí hermosa 

Steve me quitó los amarres y me abrazó 

-Amor gracias 

-Ni lo digas estas aquí por mi culpa 

-No es tu culpa amor 

Le dí un beso y salimos, me fuí con Steve y James, papá se fue con Joel 

-Mandé a mudar tus cosas a mi casa, ya no podrás estar en la tuya 

-Gracias amor 

-Mi casa es mucho más segura nadie la conoce y no saben de su ubicación, si alguien intentara entrar nosotros le llevaremos la delantera 

-Esta bien 

Lo abrazé y me recosté en su pecho, llegamos a casa de Steve y bajé junto a él, entramos y fuimos a la habitación, me recosté en la cama y escuché su móvil sonar 

-Diga 

-Valla si que eres inteligente 

-Más que tú 

-Esto no se quedará así Steve algún día te encontraré 

-Ya lo veremos 

Colgó la llamada y dejó el móvil en la mesita 

-Me voy a cambiar hermosa 

-Si amor 

Steve fue al baño y se cambio de ropa, salió y se recostó conmigo en la cama 

-Buenas noches amor 

-Buenas noches hermosa