Mi Bello Amor

Capítulo 6.- El concurso

A primera hora de la tarde tuvieron una reunión en el salón con Leonardo Ruggieri. A todos les entregaron unas hojas con información de tres empresas. Seguros MontePiar, Club Deportivo La Patagónica y Complejo Hotelero Savoy.

-Esta mañana estuve reunido con esas tres empresas. Nos escogieron para hacerles sus campañas publicitarias. Necesitamos ubicar las locaciones para la empresa de seguros solamente ya que las otras dos se llevarán a cabo en sus propias instalaciones. En este sentido deben iniciar las campañas del Club Deportivo y el Complejo Hotelero desde hoy mismo. Organicen los equipos y preparen el plan de trabajo. 

-Como es nuestra costumbre la selección de la locación se hará mediante concurso. Todos pueden participar exponiendo una idea. La ganadora será la que desarrollaremos en la campaña. Tendrá una recompensa en efectivo. Suerte y que gane la mejor. 

-En una semana deben exponer su idea ante todo el staff de la agencia. En sus manos tienen lo que recogió nuestra planner Micaela sobre lo que requiere el consumidor. Como siempre espero ideas creativas e innovadoras. Acotó para dar por terminada la reunión.

Leonardo fue un joven rebelde que se negó a continuar el negoció inmobiliario que fundara su padre. Se fue por el ramo publicitario alcanzando el éxito en pocos años por ser visionario y vanguardista. Ávido de emprender nuevas técnicas y poseedor de una gran intuición en los negocios. Unido a su fuerte personalidad que transmitía seguridad y confianza a los empresarios con los que tenía que tratar. 

Alejandra se emocionó viendo aquello como una valiosa oportunidad para aumentar sus ingresos. Además podía su idea ser el proyecto de pasantías que necesitaba para obtener su título. Su espíritu competitivo despertó convirtiendo el asunto en un reto.

Debía ponerse a trabajar. Busco una computadora y empezó a revisar sitios, imágenes, mensajes. Hasta que la cabeza se le llenó de tantas ideas que terminó con un leve dolor de cabeza. Decidió apartarse y subir a la terraza a respirar otro aire . Allí estaba Amelia quien la saludó con mucho cariño.

-Bonita. Que bueno vienes a acompañarme. Ven, vamos a sentarnos a tomarnos un refresco. El verano está haciendo de las suyas. Hay que mantenerse bien hidratado.

-Necesitaba salir de la oficina. Me alegra volver a verla. Me encanta éste lugar.

-Yo dejé mi profesión al casarme pero cuando quedé viuda la retomé. Ahora he diseñado jardines para mis amigas y lo disfruto enormemente. Le dijo con una sonrisa. 

-Me dijeron eras venezolana. Tengo lindos recuerdos de ese país pues fue en esas tierras que mi Giorgio me pidió matrimonio. Solíamos viajar de mochileros cuando éramos jóvenes y en un recorrido por Brasil decidimos cruzar hasta Venezuela. Amelia terminó contándole las aventuras y anécdotas de ese viaje. 

Alejandra estaba fascinada con sus historias y de repente se le prendió el bombillo y vio con claridad lo que quería emprender. Se levantó para ir a anotar lo que pensaba antes que se le fueran las ideas.

-Usted es un ángel me ha inspirado. Gracias. Me tengo que ir. Después le explico. Bajo rápidamente de nuevo a la oficina. 

 



#22751 en Novela romántica

En el texto hay: comedia, romance, drama

Editado: 01.09.2021

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