Mi Boxeador

Capitulo 14

Pov: Lía

Luego de haber tenido ese pequeño tiempo de diversión con los chicos, tocó el timbre avisando que había terminado el horario del almuerzo y que era hora de regresar de nuevo a clases, a soportar a los profesores, aunque, a decir verdad, yo era bastante buena en toda ellas(materias), sacando de la lista por supuesto educación física.

Nos dirigimos por los distintos pasillos hasta que, en un llegado momento nos tuvimos que separar ya que Mad no compartía clases conmigo, ya que había elegido teatro como materia extracurricular y yo por mi parte artes. Esta era una de las clases que compartía con Jack, así que nos dirigimos hacia allí a paso lento los dos.

Al llegar al aula, vimos que ya estaba el profesor

-Disculpe profesor, ¿podemos entrar?

-Si claro chicos pasen, pero que sea la última vez - nos dijo, la verdad es que era uno de los profesores más bueno que había tenido en estos 3 años que llevaba en el colegio.

Con Jack pasamos y nos sentamos en la parte de atrás, uno al lado del otro, por suerte en las clases sólo teníamos que compartir las pinturas y los pinceles, aunque muchos decidían traer de sus casas y así no tener que compartir o esperar hasta que el otro termine de usar.

-Bueno chicos hoy vamos a empezar a hacer el trabajo final del trimestre que se presentará en la muestra de arte y habrá un concurso así que espero que hagan sus mejores esfuerzos chicos.

-Si profesor - dijimos todos juntos.

-Bueno la consigna es, que no hay consigna pueden hacer lo que ustedes quieran, es libre; así que manos a la obra chicos - dijo golpeando sus manos.

Luego de eso, todos incluyéndome nos pusimos a pensar en que podríamos pintar. La verdad es que no tenía idea y al parecer no era la única porque Jack se encontraba con una expresión de no entender nada.

Luego de unos minutos de giró y me miro diciéndome:

- ¿Ya sabes que vas a pintar?

-No, ni idea. No se me viene nada la cabeza.

-A mí tampoco - dijo en un tono exasperado.

Desde ese momento nadie más hablo y yo me puse a recorrer con la mirada el salón pensando en que podría hacer," mmm que podré pintar, tiene que ser algo que me guste "me dije a mi misma en mis pensamientos.

Al pasar la mirada en las calles que se llegaban a ver desde las ventanas pude ver una moto aparcada y ahí fue donde mi cabeza se ilumino y supe qué y cómo iba ser mi dibujo.

Acomodando el cuadro en el caballete agarré un pincel ni muy fino, ni muy grueso y con pintura negra empecé a delinear lo que vendría a ser la sombra de un hombre sentado en una motocicleta, claro que primero lo había medio marcado lo que sería el contorno con un lápiz.

Al tocar el timbre de salida yo ya había terminado de hacer la sombra del hombre y sólo me quedaba marcar la motocicleta y el fondo, el cual me llevaría algunas clases.

Lo que tenía pensado hacer era la sombra de un hombre en una motocicleta pintada bien de negro y el fondo sería en distintas tonalidades de negro hasta más o menos un poco más de la mitad del cuadro y luego en la parte de arriba haría una especie de difuminación con varios colores; ya que, en toda oscuridad, siempre hay una luz que te puede hacer salir de ella y guiar tu camino.

(...)

Al llegar a casa, no me encontré con algo muy agradable ya que mi hermano estaba sentado en uno de los sofás bebiendo y por lo que veo no es la primera botella.

-Ohm has llegado lía, te estaba esperando - dijo Mike con un tono raro.

-Ehh ya llegué Mike, ¿que necesitas? - dije con un leve tartamudeo.

-Aaah no se Lía ¿dime tu? ¿Has estado con alguien últimamente?

-No, con nadie.

-NO ME MIENTAS LÍA, ES QUE ACASO ME VES LA CARA DE ESTÚPIDO - dijo gritándole y tirándome la tarjeta que había llegado con las zapatillas, la cual había escondido en un lugar para que nadie la encontraba.

- ¿De dónde la sacaste? - pregunte con algunas lágrimas en mis ojos

-ESO ES LO ÚNICO QUE ME VAS A DECIR, ERES UNA MALDITA ZORRA - dijo llegando rápido a mí y pegándome una cachetada que no me la había visto venir y que me tiro al suelo.

Al tocarme el rostro pude sentir esa parte caliente y que de verdad dolía. Seguro y mañana iba a tener un moretón negro que me iba a costar mucho tapar.

Al levantar la mirada, lo único que pude ver era la mirada de odio que me dirigía mi hermano y antes que se acerque a mí, me levanté y corrí hacia mi habitación.

Lo último que escuche antes de cerrar la puerta fue: mamá tenía razón es una cualquiera.

La verdad es que me había dolido sus palabras, pero más sus golpes, ya que cuando éramos chicos nos llevábamos muy bien, pero todo cambio desde que él se fue.

Al mirarme al espejo pude ver que tenía los ojos agitados por las lágrimas y mi mejilla de un rojo intenso ya que, si bien fue una cachetada, por el anillo que usa y la fuerza con que me pego se encontraba así.

Luego de eso cogí una media y fui al baño para mojar la con agua fría, ya que no loca bajaría a buscar hielo estando Mike ahí.



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En el texto hay: boxeo ilegal, mafia rusa, mafioso

Editado: 11.07.2020

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