"Mi Chico ideal"

Capítulo 1

—Señorita Evans, Señorita Evans ¡Despierte!

Me asusté por el ruido de la larga regla del maestro Griffin chocar contra el pizarrón.

— ¿Sí? —respondí elevando la cabeza del pupitre.

—La próxima vez que se duerma en el salón será sancionada —dijo con su mano puesta sobre el hombro de un nuevo chico, uno al que no había visto antes.

—Les presento a su nuevo compañero, terminará el año en nuestra institución, su nombre es Michael Bennett, espero que lo traten bien y lo ayuden a adaptarse —dijo el maestro

Todas las miradas se dirigieron hacia el chico nuevo, la verdad es que era muy sexy, casi necesito babero porque me quedé con la boca abierta. «Mackenzie tienes novio ¡Por Dios! Deja de mirar a otros.»

Él se sentó en el medio del salón, las golfas comenzaron a sacarle información, no habían pasado ni 5 minutos y ya sabían todo de él, al parecer hizo algo muy grave en su escuela en Canadá y por eso lo expulsaron, logró entrar por el dinero de sus padres, nunca había conocido a un chico malo en mi vida, interesante. ¿Mi nueva tarea? Descubrir que sucedió en su escuela anterior.

Al salir de la clase del maestro Griffin me encontré a Daniel, sí, mi aburrido novio, a quién no quería ver, le dediqué una sonrisa forzada y antes de que pudiera acercarse a mí me retiré a mi siguiente clase, la que más odiaba, Arte. Nos pusieron a pintar un paisaje y lo mío parecía la tierra luego de una carrera de caballos, por eso odio esta clase porque no tengo nada de estética.

El día pasó volando, había sonado el timbre de irnos, me despido de mi mejor amiga, me subo al bus y noto que "el chico malo" tomó el mismo autobús, supuse que vivíamos cerca, ya me sentía como toda una detective, pero para mí mala suerte el bus frenó de golpe y caí sobre una chica que se encontraba en uno de los asientos delanteros justo llegando a casa ¡Menuda vergüenza! me disculpé y me bajé.

Llegué, busqué las llaves donde mi madre siempre las deja, bajo el tapete, porque si me las llevo las pierdo. Entré y me encontré con la sorpresa de que mi madre había llegado temprano del hospital.

—Hola mamá ¿ha pasado algo en el hospital? ¿Por qué tan temprano? —dije dándole un beso en la mejilla.

—Hola, sí yo también estoy feliz de verte— bufó —Estoy acá para recoger unas cosas y descansar un poco, porque tengo turno en la noche, María se volvió a descontrolar.

María es una de las pacientes del hospital donde trabaja mamá, la tienen interna porque es esquizofrénica y su familia no quiere hacerse cargo de ella, pero le tomó mucho cariño a mí madre y solo se tranquiliza con ella.

— ¿Y papá? ¿Por qué no ha llegado?-Pregunté.

—Se fué temprano y no he recibido llamadas de él —dijo mamá.

«Genial, al parecer pasaría la noche sola, últimamente papá estaba saliendo muy temprano y a mamá no se la veía del todo bien, pero han de ser problemas de pareja supongo.»

Me dió flojera hacer algo de cenar ¿A quién engaño? No sé ni hacer café. Así que para olvidarme del hambre, subí a mi habitación y quedé dormida más profundo que un oso hibernando, sin saber que a partir de mañana mi vida comenzaría a cambiar...



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En el texto hay: juvenil, hermanos, amor

Editado: 01.09.2018

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