0. Mente fugitiva

En la mente de una pequeña niña risueña, se hallaba un personaje al cual nombró su príncipe azul, su héroe y su protector. Tenía ya 10 años cuando subió a la casa del árbol que estaba en el jardín de su casa, cargando su mochila azul en la espalda. No le importaba que el frío invadiese cada parte de su cuerpo o se colase por debajo de su vestido.

El frío ventarrón de octubre azotó su cabello rubio, provocando que su pequeño cuerpo se ladease hacia la izquierda. Cuando logró poner pie en los peldaños de madera para subir, se sujetó con fuerza y se impulsó para subir, sujetándose de una cuerda que colgaba muy cerca de ella. El viento removía sus cabellos amarillos de un lado a otro, algunos yendo a parar a su rostro.

Una vez dentro de la casa de madera, cerró la puerta y se hizo la calma. No viento ni frío. Dejó de sentir el sabor helado que sorprendía a su cuerpo y tampoco escuchó los maullidos del aire. Sorprendentemente la casa del árbol era cálida y acogedora, un pequeño refugio para una pequeña niña.

Observó a su alrededor, divisando su mesita, dejó la mochila al pie ésta, se sentó y con cuidado sacó los materiales, intentando hacer el mínimo ruido posible. Le gustaba el silencio que había en el interior de su guarida.

La pequeña niña de cabellos rubios comenzó a trazar el rostro de un chico, para ella, perfecto. Al acabar de darle la forma, con un lápiz más grueso, lo marcó de forma segura. Le recordaba a aquellos príncipes de los cuentos que le narraba su madre antes de dormir.

Y, como si su mente fuese una cueva con eco, repitió: Yo te deseo, una y otra vez. Apetitosa de que aquella criatura estuviese con ella, en ese preciso instante, que la aliviase del dolor, que la abrazara del frío viento y que se quedase con ella en esa soledad.

Porque esa niña se hallaba sola en la casa del árbol, y a pesar de que era lo que quería, quería que Ryan despertara de su profundo sueño dibujado y se reuniera con ella en ese preciso instante y le narrase unas aventuras que la hiciesen olvidar de su realidad.

🐣🐣🐣

y estoy aquí de nuevo... no sé cuántas veces regreso a este lugar, solo sé que así es siempre: fue mi primera novela, se entiende. Estoy emocionada por volver a subirla a Wattpad, donde empezó todo. Con este novela tuve a mis primeros lectores, muchísimas gracias a aquellos que soportaron a la pequeña e ilusa ginny 🤎 una lectora me había mandado un correo para agradecerme por escribir este libro, no sé si hoy esta chica lo lea, pero quiero decirle que llevo ese correo en mi corazón. muchísimas gracias. Me diste fuerza y ánimos para seguir.

Para quienes le den muchísimo amor les estaré dedicando cada capítulo. Así que comenten y voten, o nos pegamos con la sartén 😩🍳

¡Nos vemos pronto, Niños Perdidos!

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