Mi Corazón A tú altura

Capitulo 11

Mientras ella, apresurada, caminaba hasta la cocina yo estaba dejando mi campera en el colgador lo hacía apresurado fui hasta donde estaba ella mientras que la observe desde el otro lado de esa isla delgada la oía llorar… me acerque y la abrace. ¿Merezco abrazarla?

No, creo que no pero no podía dejarla ahí… llorar por un mal entendido… —Sofí, escúchame, no es lo que piensas… La oía solloza —¿Que no es lo que pienso? —Andrés no entiendo ¿qué dices? —Que no es verdad lo que vi?

—¿Que es un sueño? —¿Crees que soy idiota? —¿idiota? Idiota soy yo… —¡Mira! no es lo que piensas yo estaba poniéndole limites —¡ah! Entones ¿si te buscaba? —¡Esa P%t# de mierda! ¿P%#a de mierda? No es de decir groserías.

Pero estaba frustrada, enojada, celosa o triste es el paquete completo y está a punto de estallar enfrente mío… —No, no es fácil de explicar… —Andrés deja de dar vueltas… suspiró y se tranquilizó mientras se daba vueltas yo intentaba secar sus lágrimas…

—¿Que quiere esa P#*%? —Esa vecina… Se sentía culpable por la pelea que tuvimos… y ¿sabes qué? ¡la culpe más!… —En fin, le deje en claro que no se meta más con nosotros… eso fue lo que le dije. —¿ah? ¿sí? ¿Mira que bien… ¡no es un poco tarde? Me grito bastante.

—Sofia mira, ¿qué quieres que haga? —Si no me crees no puedo hacer más nada. —No quieres creerme. Ella giraba su cabeza de un lado a otro mirando a su alrededor… evitando coincidir con la mirada —no te creo porque es la segunda vez que esa estúpida se mete contigo…

—¿Y qué? Siempre estuviste ahí. —Pero eso no significa que no la hayas visto antes… —¿No la viste antes? —¡Claro!… —Jamás te ocultaría nada… ¿Qué digo? Le estoy ocultando que soy su jefe y un sinfín de secretos ¿es frustrante? ¡Claro! Pero ahora lo único que quiero es ver a sofí feliz y no lo estoy logrando…

Coloque la película de aquella vez esta vez, ella estaba a mi lado no quería ni que la tocara me negaba todo o era cortante quedamos en silencio, pero era un silencio incomodo ella no hablaba y yo tampoco no estábamos bien.

era el comienzo de ver como ella me odiaba más y me quería menos. Y no la culpo por que desde que llegamos aquí no ha habido más que problemas, mi idea de tener una vida tranquila acabo desde que pise este departamento.

En la mañana siguiente despertamos aún seguía dolida y desconfiada… ese beso de buenos días... fue como si estuviera enojada y lo estaba… ella fue a bañarse eran las 6 ella entraba a las ocho así que tiempo sobraba… eso de las 7:30 sonó el timbre…

Ella fue a ver quién era no había nadie así que me llamó, estaba en la puerta me acerque preguntando. —¿Qué pasa? dije. Sin más me corrí a un lado observando la entrada fijé mi mirada al suelo me sorprendió, una caja… con un moño y una carta que decía “Perdón Andrés y Sofia” Daira.

¿What? ¡Quien carajos es! —Esa P#%* sigue molestando dijo… ja ahí caí es la vecina… —Bueno quizá… la hice sentir culpable Sofí. —¿culpable? La oía en un tono burlón —Bueno tu sabrás… ella se fue sin más sigue dolida… y es normal ¿quién no lo estaría?

¡Encontraste a tú pareja con otra persona! entre con la caja ella tomo la caja… y de ella la carta, dejo caer la caja como si fuera basura —Mira te puso corazoncitos… mientras aplastaba la carta en mi pecho yo hice una señal de cansancio y ella se alejaba —Sofí… no tiene nada que ver.

—¿Ah? Tu nombre tiene corazoncitos…  volvió a repetir no dije nada suspire —Sofí… anda deja de… —Andrés tengo que ir a trabajar… me dejo con la palabra en a boca, se fue sin siquiera despedirse… bueno esto nos va a distanciar fui directo al departamento de ella…

Lo golpee con violencia. —¿Hijo?, ¿perdiste tus llaves? —¡Soy Andrés! ¡abre! La oía con prisa hasta que me abrió me mostro una sonrisa… —¡Hey! ¡que te pasa? ¿Como se te ocurre darme un regalo? borro la sonrisa de su cara.

—¿No les gusto? —¿Qué? ¿gustarnos? vecina —Daiara… —Bueno Daira… deja de meterte en nuestra relación ¿quieres? —Pero... —¡pero nada deja de molestarnos!… ¡ya está hecho! el desastre no la embarres más ¿quieres? sin más, me marche apresurado y de malagana a mi departamento.

Si me dijo algo no la escuche… estaba a punto de sentarme en el sofá que fue que escuche mi celular. me estaba llamando sofí… —¿Amor? —Andrés… te oí… —Bueno que… —Solo déjala ¿sí? Ella… sabrá donde se mete —Pero no quiero que nos joda más…

—Tengo que colgar ya llego el taxi… —Que tengas buen… Me corto… bueno ¿qué más puedo hacer esta tan molesta que no quiere ni mis bueno días… me estará odiando… y todo por culpa de ella… pensé que las cosas no podían emporar.

Cuando volvía de clases llegando al edificio del departamento note una camioneta negra…  era Daiara me hice el tonto y espere que subiera… se que me saludo lo vi de reojo, pero la ignore… como haciendo una llamada con mi celular después de verla entrar y subir espere un rato…

hasta que seguí yo me metí en el ascensor y subí al 5to piso, mientras esperaba que se abrieran las puertas estaba encendiendo mi celular idiota cierto lo apague… al momento de encenderlo me llenaron de llamadas perdidas… Amira, sofí y algunos ¿desconocidos?

Solo devolví la llamada a Sofí. —Sofí ¿qué pasa? —¡Andrés? Hola, llegare tarde… tengo que hacer papeleo sobre ese tema… —¿Tema? ¡Ah! el de los africanos. —shhh, tu no oíste nada… mira hazte la cena que llegare tarde no me esperes… —eh ¿okey?



#21350 en Novela romántica
#4105 en Joven Adulto

En el texto hay: mentiras, celos, dinero o amor

Editado: 27.01.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.