Mi Destino, tu Corazón

Capítulo DOCE

UN MES DESPUÉS

Desde ese día que me crucé con Britt, no dejo de pensar en ella... Es aún más que antes. Solo que esta vez tengo como comunicarme con ella. Pude pedirle su número de teléfono y no paro de mandarle mensajes. Le envío a primera hora de la mañana antes de que salga de su casa y por la noche hablamos por más de media hora, durante la cena. Hannah se fue a Alemania una semana después de que llegaran Dragan y su novia. Hablando de ellos, estamos a poco tiempo de recibir a Radovan. La casa es todo alegría y nerviosismo, esperando a que se haga anunciar su llegada.

Un grito me despierta de golpe. Me alejo de la cama y de mi habitación hacia la de mi hermano, que sale con el bolso en su hombro y su brazo libre rodea la espalda de Radojka que respira aceleradamente sosteniendo su vientre.

- Me has salvado de una muy grande, querido hermano.- me golpea el hombro cuando estoy a su lado- Parece que Radovan quiere salir antes de tiempo, vas a tener que cancelar todo lo que tienes en el día y nos acompañarás.- sonrío a más no poder.

 A pesar de que Dragan sea más fuerte que yo, no se anima a levantar a su novia para que lleguemos rápido al sanatorio. Si la lesión del que apenas tiene progreso fuese peor para que Radojka sufra menos, no me importa... La vida de mi sobrino está por delante de todos. Tenemos la suerte de no utilizar escalera, siempre estoy un paso adelante. Para no perder el tiempo, le digo a mi hermano que tome las llaves del vehículo y se haga cargo de manejar. ¿Cómo mierda calmo a una mujer que toma mis manos para estrujarlas?

- Radojka, haz lo que te digo...- giro mi cabeza hacia ella que se ve muy ruborizada- Inhala.- lo hacemos al mismo tiempo y asiento, en un intento de motivarla- Exhala.- lo hace y cierra los ojos- Hazlo de nuevo. Inhala, exhala.- sigue con lo que le digo y le sonrío- Ya queda pocos metros para llegar. Solo sé paciente y trata de que Radovan no se apure en salir.- escucho una muda risa, está un poco más tranquila.

Una vez que llegamos, Dragan desciende del vehículo y lo cierra tan fuerte que nos asusta a los dos. Gracias a ello, mi cuñada empieza de nuevo con las contracciones y hago lo que puedo para que sea más llevadero los dolores. La puerta de mi lado se abre y guío mis ojos a dos enfermeros que se sorprenden al verme.

- ¡Que me ven! ¡Es mi cuñada que necesita ser atendida!- parecen salir de su trance cuando corren hacia la otra puerta y los ayudo a que ella salga del vehículo y la acomodan en una camilla mientras mi hermano corre tras ellos.

Le pregunto a la recepcionista donde llevaron a mi cuñada, pero se queda viéndome más de la cuenta. Suspiro frustrado, prefiero buscar a alguien que no se sorprenda o me mire embobado. Hasta que encuentro a un hombre de bata blanca, me acerco hasta él y le pregunto donde queda la sala de espera. Le explico todo el asunto de mi sobrino a punto de nacer, por lo que me guía por unos pasillos y llegamos a un ascensor. Me dice que queda en el segundo piso y se lo agradezco, escapando de que me llegue a reconocer.

Observo la hora por el teléfono y veo que son las nueve de la mañana. Con todo este asunto de que Radovan queriendo salir antes de tiempo, olvidé me escribirle a Britt. La busco entre las llamadas que he hecho días anteriores y decido llamarla. Espero no interrumpir en pleno entrenamiento...

- Ya me parecía raro que no me enviaras mensaje.- es lo primero que escucho ni bien descuelga- ¿Cómo estás Marko?

- Ahora que te escucho, mucho mejor.- tengo la certeza de que se ha ruborizado y sonrío para mis adentros- La idea de escribir estuvo, solo que Radovan me lo impidió...

- Tu... ¿Tu sobrino?- una sonrisa escapa de mis labios y suspiro- ¡Eso si que es una novedad! Cuando le diga a Yvonne, querrá tomarse el avión para conocerlo.

- Aún no tengo noticias. ¿Sabes?- observo todo a mi alrededor controlando que nadie escuche- Me encantaría que estuvieras conmigo. Una buena compañía no haría nada mal...

- ¿Hannah?- me pregunta.

- Nos abandonó para vivir su gran vida con Lex en Alemania.- le contesto a la vez que observo enfermeros corriendo de un lado a otro.- Se quedó más tranquila al saber que no me quedaría solo... Después de todo, a falta de una tengo tres integrantes más en la familia.- escucho que alguien le habla y ella contesta- No te robaré más tiempo, cuando estés disponible me llamas, ¿Si?

- De eso ni lo dudes.- responde y observo a Dragan que viene corriendo a mí - Espera un rato...

- ¡Llegamos a tiempo Marko! ¡Radovan ya nació!- el abrazo de mi hermano hace que casi pierda el teléfono y le respondo al abrazo- No sabes lo que es...

- Me alegro mucho Dragan.- le interrumpo golpeando su espalda y llevo mi teléfono al oído- Ya tienes la primicia.- Britt se ríe y el hermano me observa algo sorprendido.

- Esto si que les emocionará a las chicas.- es este preciso momento escucho la voz de Yvonne- Ya nació el sobrino de Marko.- me es raro que le hable en inglés, pero eso se disipa al saber el porqué. Dos gritos aturden por lo que alejo el auricular de mi oído.- Te lo dije Marko...

- Marko, ¿Cómo estás?- es la voz de Yvonne. Cuando quiero contestarle, decide interrumpirme- A comienzo de semana vamos a tu casa.- abro la boca observando a Dragan que se ve divertido ante mis reacciones.



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En el texto hay: amigos, amor, deporte

Editado: 31.12.2018

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