CAPÍTULO 2: QUE ESTÁ PASANDO

Nerea está enfadadísima con todo lo que le pasa y con la vida. Un día siente que una energía muy agradable y cariñosa con una atracción intensa. Piensa que su trastorno está aumentando. Y se queda abrumada cuando le hablan mentalmente. Huye, huye de las conversaciones, pero hay algo que la persigue por más que huye, no le deja de conversar y de decirle sus errores y todo lo mal que lo ha echo hasta ahora.

Nerea ya no puede más y le habla mentalmente, enfadada, rompe a llorar y a desahogarse. Le pide disculpas. Siento huir de ti, siento todo el daño que he echo a los demás, pero no saben cómo me siento, desde joven he tenido insultos y humillaciones y no quiero ser la niña vulnerable que había sido. No quiero que me hagan daño, pero por favor deja ya de perseguirme.

Dicho esto, él cuidadosamente le habla y le dice, pagarla con los demás no es la solución a tus problemas. Es peor, no te reconozco, yo puedo hacer que salgas de esta angustia sin tener que hacer daño. Yo puedo hacer que te encuentres a tí misma y sanarte.

Ella sonrío, secandose las lágrimas, dice cómo y él le propone ir a un psicólogo, que le cuente la situación que vivió y que le ayude. Ella acepta y va a un psicólogo, al que le explica toda la situación, el médico le hace ver la realidad de las cosas y que ella es una persona humana con capacidades de lograr todo lo que se proponga. Nerea sale con mejor autoestima.

Su gemelo, que le habla por dentro, le dice que haga obras de caridad con el prójimo y ella lo hace. Después de eso, se llega arrepentir de como a tratado a sus seres queridos, que le apoyaron en todo momento. Se siente mal y pide disculpas a todos ellos, se desahoga con ellos y les explica que se ha comportado mal por que tiene una desconfianza y una gran coraza, que cree que todo el mundo le va a hacer daño y por eso no trata a nadie bien. Ella cambia y su familia la acepta.

No para de hablar con su gemelo mentalmente y las conversaciones son interminables. Cae la noche y siente una gran atracción a su gemelo, tanto que terminan fusionandose. Es la mejor noche de Nerea en su vida, se dieron todo su amor, lo que tanto necesitaba en ese momento.

Tras gran felicidad y complicidad, sintió un gran vacío y dolor. Y de nuevo se volvió a desilusionar y a enfadarse con la vida. Otra vez enamorándose y no tenerlo físicamente.

Un buen dia, su gemelo le habló y le dijo ¿Por qué te enfadas con la vida? ¿Qué te ha hecho? ¿Que culpa tiene ella?

No sabes lo mal que estoy, desde jovencita he sufrido insultos y humillaciones y todos mis compañeros me echaban la culpa de todo lo que hiciese, y me he convertido en alguien muy exigente y cruel conmigo misma y ahora lo hago yo, echo las culpas a las personas sin tenerlas, no quiero ser la niña vulnerable que era. Ahora tengo soportar un enamoramiento sin estar físicamente contigo.

Si sanas, un buen día te encontrarás conmigo, no se cuando, se que estoy para indicarte el valor de tu persona, por lo que debes empezar a amarte a tí misma y a influenciarte menos por las personas que te han hecho daño, y a sanarte cada vez más. La vida no tiene culpa de las desgracias de nadie, ella da la vida a todo ser viviente. Creo que debes de retomar creer en Dios, de siempre le has admirado, no pierdas esa admiración. Ella se arrepiente y escucha atentamente, rompe a llorar.

Él la besa apasionadamente y le dice, vuelve a creer en Dios. Quizás la historia que te cuente te haga ver la humanidad de diferente manera. Te voy a contar la historia de Adán y Eva, de ellos aprenderás mucho.

Dios creo al hombre y lo llamó Adán y de su costilla creó una mujer, a la que llamó Eva. Eran felices en el paraíso junto a los animales. Un dia, el diablo, envidioso de la felicidad de los hijos de Dios, discutío con el mismo Dios, que les robaría a sus hijos y los llevaría a la Tierra, dónde a él junto con sus complices fueron expulsados para padecer calamidades por haber echo daño a Dios y sus ángeles,en una palabra, que los quitaría de su felicidad. Y así, un día, la serpiente se acercó a Eva, y le dijo, come del fruto, que es bueno, conoceras lo que está bien y lo que está mal y tu padre es el primero que quiere que lo pruebes, porque sereís más inteligentes. Y así ella hizo junto con Adán. Dios, con lágrimas en los ojos, vió como Adán y Eva se fueron a la Tierra, un lugar sin árboles ni nada donde habitar, pues el diablo deseaba la muerte de ambos.

Ellos tuvieron hambre, y se dieron cuenta del daño que les hizo el diablo, por lo que se arrepintieron y pidieron ayuda a Dios, asi fue, que Dios creó árboles, agua, y animales para que comieran y bebieran.

Pidieron gracias a Dios, y Dios le habló, hijos mios, esta tarea no va a ser fácil; trabajareís para sobrevivir y tu Eva, daras a luz con dolor, ya que posees un cuerpo físico y limitado. Sed fuertes, porque habrá que luchar contra este enemigo, por lo que llenad la Tierra de hijos, para que ellos luchen para vencer al gran enemigo y que no hagan el mal, porque si no, justicia habrá, y quien lo haga bien, irá al lugar de los justos y quién no, irá al lugar de los injustos y pasaran calamidad.

Ellos obedecieron, aprendieron a perdonarse a sí mismos por lo que ellos y sus hijos iban a pasar en este mundo, pero Dios no se quedó atrás, les prometíó que varios descendientes encaminarian a la humanidad y que en un futuro vendría Jesús, que se sacrificaría por todos los pecados que cometieran la humanidad para poder perdonarlos y tomar el camino correcto y para que los justos tomen al final este lugar, la Tierra, para echar a todo aquel que hace caso al diablo y cometer errores graves y al final, disfrutar de un paraiso, asi que conquistad la tierra, porque es vuestra. Luchad esta batalla, porque yo Dios, daré muchas oportunidades a quien lo hace mal, pero cuando sea el dia del juicio final, todo será juzgado. Sed obedientes.