Al día siguiente
—Amara baja, vas a llegar tarde al instituto—grito mi madre
—Mama no me siento bien—dije, no quiera ir al instituto pensar que allí todos podían ser hombres lobo y yo sería la única humana.
—Amara sé que estas mintiendo, así que ve y alístate porque nos vamos no puedo llegar tarde a la oficina y además tengo que dejarte en el instituto—dijo
Como siempre mis planes se veían arruinados, me aliste para el instituto, desayune, después nos fuimos en el auto al instituto. Al llegar todo estaba como ayer, parece gracioso como podía cambiar este lugar de un día para otro, camine por el instituto hasta llegar al salón de química esa era mi primera clase.
Al entrar me encontré con Alex, ¿Por qué soy tan de malas en la vida?, eso ni yo lo sé.
—Hola Amara ven y siéntate con nosotros—dijo Alex.
Colocando sus libros en una mesa y en esa mesa estaba sentado un chico si ese chico Bastian, por favor trágame tierra, como podía sentarme al lado de un chico que odiaba a los humanos y para mi desgracia yo era humana. En ningún instituto hay asientos para 3 personas para dos sí, pero para tres nunca los había visto y para el colmo Alex se sentó en una esquina y Bastian estaba en la otra esquina.
—Amara ¿Qué pasa?, ¿Por qué no hablas? —pregunto Alex
Tal vez porque son raros y dan un poco de miedo.
—Perdón Alex, Hola—dije esquivando sus preguntas
—Amara ¿Por qué ayer te fuiste de mi casa sin decir nada? —pregunto
—Si Amara, ¿Por qué te has ido? —pregunto esta vez Bastian.
Ya de esta no podía escapar, no podía utilizar la excusa de mi madre.
—Hola amor, ¿Cómo estás? —pregunto un chico
—Hola Ryan, bien y tú, pensaba que llegabas de la visita de la manada mañana—dijo Alex
—Alex queras decir de visitar a sus padres—dijo Bastian señalándome con su cabeza
—Necesito ir al baño—dije antes de que Alex pudiera decir algo
Salí caminando para el baño me lavé la cara.
—Amara tienes que ser fuerte y no salir corriendo—me dije a mi misma
Lo bueno de que llegara ese tal Ryan era que ya tendría que sentarme con Alex ni con Bastian un punto a mi favor, volví al salón y vi a Alex sentada al lado de ese chico en la primera fila donde antes me iba a sentar yo y a su lado estaba un chica, camine hasta llegar a los últimos asientos, me senté en un puesto de la esquina y en la otra esquina estaba un chico, saque mi cuaderno y empecé a dibujar no porque fuera buena dibujado porque no lo soy, sino porque no tenía nada más que hacer el maestro no había llegado y todos estaban hablando con sus amigos. Alguien se sentó a mi lado, pero lo ignore.
—Así que dibujas—dijo Bastian, lo cual hizo que pegara un pequeño salto de mi silla
—Sí ¿Y tú que haces aquí? —pregunte
Ellos no me dejaban tranquila, no sé porque se sentía como si ya hubiera vivido esto.
—Por si lo olvidas estudio aquí—dijo como si fuera obvio
—Yo sé que estudias aquí, pero a lo que me refiero que haces aquí sentado—dije enojada
Yo no me caracterizaba por ser una persona paciente.
—Estoy aquí para que me respondas, ¿Por qué te fuiste ayer sin decir nada? —pregunto mirándome a los ojos.
—Porque no quería ver tu cara idiota, yo pensaba que era algo obvio—dije, Bastian se enojó y se paró para irse.
—¿Te enamoraste de mí?
Una sonora carcajada salió de él.
—Ni que estuviera desesperado—respondió
—Vete Idiota— exclame
Él podía ser bipolar otra vez estaba muy molesto.
—El lobito está enojado—dije