PROLOGO

Visita

Tres años después:

—Sabe aunque ha sido difícil criar a nuestro pequeño hijo, he de admitir que he tenido mucha ayuda y más los primeros meses creo que me fue difícil acoplarme pero lo que más me costaba era controlar el miedo que me daba cada que él se enfermara. —Dije sonriendo. —Es el niño más consentido del mundo, de eso no me cabe la menor duda. —Le dije viendo a mi pequeño. —Por ejemplo, sus padres lo visitan y lo cuidan muy seguido. Para su mamá es la luz de sus ojos, su niño consentido. Como ella le dice. Y para su papá y hermano es su campeón. —hablaba viendo la lápida. —Departe de mi familia es igual. Mi mamá lo consciente como lo consentía a usted. Mis hermanas lo miman y lo consienten como no tiene idea y mi papá se vuelve niño nuevamente cuando está con él. Mis amigos y sus amigos a cada rato le compran cosas y cuando salimos todos juntos él es el centro de atención de todos. —Dije con lágrimas en los ojos. —Le encantaría ver todo, es una locura total... —Dije intentando tranquilizarme. Ya que mi bebe estaba junto a mí y no quería que él me viera mal ya que es la primera vez que lo traigo conmigo a este lugar. —Y yo pues.. que le puedo decir. Ty es el amor de mi vida, es lo más preciado que tengo... Sabe es el mejor regalo que me pudo haber dado jamás, ya que este hermoso angelito se ha vuelto en mis fuerzas y el centro de mi vida. Ya que después de su voz y latidos creí que no encontraría algo que me diera la paz y tranquilidad que usted me daba, hasta que llegó nuestro hijo, ya que escuchar sus latidos me transmite paz, verlo dormir es lo mejor de mi dia y su sonrisa esa que heredó de usted la que aunque a veces logra hacerme llorar me llena de tanta felicidad, gracias por regalarme a lo más hermoso de mi vida. —Dije sonriendo. —Y bueno hoy estamos aquí ya que él quería verte, bueno quería ver su lápida. —Dije llorando, ya que yo no había venido desde que soñé con él, pues aún me dolía mucho estar en este lugar. —Sabe, lo curioso es que la primer palabra que dijo fue papá, no se imagina lo mucho que lo quiere, ya que él sabe que usted lo quiere igual. Le encanta que le hable de usted antes de dormir. Hasta tiene una foto suya que se llevó de la sala para su habitación. Ya que todas las noches le cuento nuestra pequeña historia de amor, para que él pueda dormir. —agregue sonriendo, recordando que el primer año dormía conmigo, pero después empezó a dormir en su habitación, la cual ama por su hermosa decoración. —Sabe cada día se parece más a usted, hasta el color del cabello, aunque todos dicen que su forma de ser es igual que la mía, adicto al chocolate. Bueno sé que él quiere hablarle, así que ya no los interrumpo más. —Dije saliendo de mis pensamientos. —Habla mi amor. —le dije a mi pequeño al cual tenía entre mis brazos.

—Hola papi, beno te quelo mucho. —Dijo dándole un beso a la foto que estaba en la lápida. Lo cual me hizo llorar más, partiendo mi corazón. —Me guta hablar cotigo, anque mami es bena contando histolias, pelo tu me haces leil más. —Dijo empezando a reírse, mientras ponía su mano en la boca. —Te quelo, espelo veite hoy papi. —Dijo tirando un beso y colocando las flores en su lugar.

—Mi amor, ¿Cuándo has visto a papi? —le pregunté aun en shock.

—Papi siemple está comigo en las noches. —respondió sonriendo.

—¿Enserio y como lo ves? —pregunte aún más confundida.

—Cuano duemo. —Me respondió riendo.

—Y ¿Qué te dice papi Ty? —Le seguí preguntando ya que aún no lo podía creer.

—Muchas cosas. —Dijo moviendo sus pequeños piesesitos.

—Sí pero. ¿Cómo cuáles mi vida? —Dije al borde del llanto.

—E nos ama, e está siempe con nosotlos, me cuenta uchas histolias, me cuenta como se conocielon y me dice que no lloles mami, que él unca nos a dejalo y que no estes tliste mami, que él sigue bien. —Dijo viendo y jugando con los botones de su camisa, mientras yo me quebré en llanto. No podía creer lo que mi bebe me acababa de decir. De repente sentí una brisa que nos envolvía y yo sabía quién era, prácticamente sentí su abrazo. Así mismo sentí como mí corazón se sanaba y llenaba de felicidad quitando el vacío que sentí por tantos años.

—Mami ¿Pol qué llolas? —Dijo Ty colocando sus manitas en mis mejillas y empezó a darme besos en la frente.

—Por nada Ty, tranquilo no pasa nada. —Dije también dándole besos en su frentecita.

—Papi me dijo que siemple que lloles te de besitos pala que estes feliz. —Dijo dándole otro beso, pero ahora en la mejilla.

—Gracias Ty, ya estoy mucho mejor, tus besos son mágicos. —Dije sonriendo.

—¡Siiii! Mami etá feliz. —Dijo dando pequeños saltitos en mis brazos. A lo cual solo sonreí, voltee a ver a la lápida de Matth. Sonreí

—Despídete de papi mi amor. —Dije viendo a mi bebe.

—Adiós papi, mua. —Dijo tirando un beso con la mano. Luego de eso se separó de mí, ya que ahora era mi turno. Aun arrodillada puse una mano en la foto de él y sonreí luego le di un beso.

—Hasta siempre mi amor... tu seras joven por siempre y nuestro amor vivirá en mi corazón, el recuerdo de ese chico sonriente y feliz que eras estará siempre junto a mi, solo te pido que nos cuides —Fue lo único que pude decir sin llorar. Luego de eso me levante, sacudí mi pantalón y quite las lágrimas traicioneras que se empeñaban en salir.

—Vamos hijo. —Le dije a mi bebe, mientras le sonreía para luego darle la mano y empezar a caminar poco a poco más lejos de ese lugar, más lejos de Matth.

*Tuve que irme pero estas haciendo un gran trabajo mi vida* dijo aun sabiendo que ella no lo escucharía nunca más.

Fin

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Y oficial mente la historia a llegago a su fin, gracias por acompañarme a lo largo de esta historia y ser parte de ella, los proximos capitulos seran un fnal alternativo asi que no influiran en el desarrollo del segundo libro.