Mi mocosa favorita

capítulo 9: Isabella

    Pero que se ha creído este,  enserio que ganas tengo de ganarle y darle en todas las narices, ¿además enserio destino como puedes ser tan jodido conmigo? ¿tengo que aguantarlo en el fin de semana también? a buenas horas hubiese venido si hubiera sabido que el ligue de Kara era amigo de este imbécil, y para colmo Adam se cree con algún derecho de decirme lo que tengo o no que hacer. 

    Lo único bueno es que están agobiados los dos por perder, se creían que iba a ser mas fácil  ganarme, pero ya me estoy encargando de que no sea así, y pensar que voy a estar un mes aguantándolos, bueno Max me da igual pero al otro no lo quiero ver ni en pintura, no se de donde sacar más tiempo, entre las clases, el trabajo y ahora las clases particulares para estos dos, van a poder conmigo.

    Meto una rayada y al volver a tirar fallo, y les toca a ellos, tira Connor y mete la bola que les quedaba y va a por la blanca y la mete, se ponen a celebrarlo como si hubiesen ganado un mundial, y yo me indigno.

    — Lo siento Isabella, has sido una gran rival— me dice Max ofreciéndome la mano intentando ser educado.

    —Ya, pero nuestra rival no se va a librar de darnos clases durante todo un mes.—Suelta Connor entre risas.

    —Eso ya lo hablaremos.

    —A no, ¿ahora no te iras a echar atrás no?— me dice Connor mirando al otro lado del local en busca seguramente de la pesadilla de Meg.

    —Yo siempre cumplo con mi palabra— le digo a Connor— pero tendremos que cuadrarnos entre vosotros los entrenos y yo el trabajo no se yo como será de compatible.

    —Ya nos encargaremos de que cuadren, por cierto ha sido un placer ganarte pero ahora me espera un premio mejor. — dice Connor agitando el brazo hacia Meg para que vaya a donde estamos.

    —¿Has terminado ya con ese juego para niños? 

    —Ya le he ganado a la mocosa, nos podemos ir a hacer juegos para mayores.— le dice él y ella se lanza a besarlo y Max me hace un gesto para que vayamos con el resto.

  

    Adam ha estado bastante pendiente de mi durante la cena,  pensaba que después del numerito del billar se iba a acercar a otra, pero no, a estado hablándome y alagándome. Es un buen chico, pero no creo que llegamos a nada más que a una simple relación esporádica, no tengo ni tiempo ni ganas para relaciones y complicaciones, y más con el inconveniente de que me pongo de los nervios las muestras de afecto y cariño sobre mi, no me gusta que me toquen más de lo necesario. 

    —Isabella hoy no puedes negarte, tu residencia está muy lejos y no pienso escuchar un no como respuesta, además Kara se va con Justin, te llevo yo.

    —Vale, gracias de verdad Adam.

    —No es ninguna molestia Isabella, lo sabes— me dice guiándome por el parking hasta su coche.

    Subimos y antes de arrancar me mira y sonríe, no se que debe ver en mi pero al parecer le hago gracia. 

    —¿Me he manchado la cara?— le digo agobiada de haber ido todo el rato con la cara manchada de salsa o ketchup.

    —Que va, estás preciosa, estaba observando lo única que eres.

    —¿Yo? pero si soy una chica cualquiera, soy una chica común.— le digo poniéndome nerviosa, mientras el empieza a acariciarme la pierna. t

    —¿Una chica común tú? venga Isabella no me hagas reír, si no hay mas que verte que eres diferente a cualquiera que haya por el campus, tienes unos ojos impresionantes una sonrisa que podría acabar con cualquiera y un carácter a prueba de bombas, eres autentica y seguramente mucha mujer para mi pero me encantas.—me dice acercándose y me besa en el cuello, al momento me separo un poco sobresaltada, no me esperaba esto.

    Arranca el coche y vamos camino a la residencia y yo no se muy bien que pensar ni que hacer me he quedado callada y no es común en mi, no quiero herirlo pero tampoco me llama la idea de poder tener algo con él, y mira que es un chico muy atractivo y lo sabe, pero no se si podría saltar la chispa, me giro para mirarlo y veo que sonríe.

    —Adam, tu tampoco estás nada mal, pero sabes una cosa no tengo tiempo para nada, y menos para pensar en relaciones y rollos.

    —¿Como sabes que esto no funcionara si no lo probamos? No te pido ni mucho menos una relación de pareja, no es lo que estoy buscando yo tampoco pero me atraes mucho. 

    —Pero Adam yo no soy de ir acostándome por ahí con los chicos y menos sin conocerlos apenas.

    —Yo tampoco soy así.—me dice serio y me provoca una carcajada sonora.    

    —Venga Adam no me hagas reír, solo una pregunta, el día de la fiesta cuando me fui ¿te liaste o te acostaste con alguna?— se que he dado en el clavo por la cara que ha puesto.

    —Pero eso no es justo Isabella, no puedes juzgarme por lo que he echo hasta el momento.



#12682 en Joven Adulto
#48374 en Novela romántica
#7817 en Chick lit

En el texto hay: romance, romancejuvenil, romance aventura accion

Editado: 13.09.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.