Esta es mi historia de vida, una que inicia con una noticia por partida doble, venimos dos en el segundo embarazó de mamá, ella no se lo esperaba, pero nos ha recibido con mucha alegría y amor, seremos sus gemelos. Y tenemos un hermanito que está esperando por nosotros, Keffren se convertirá en pocos meses en el hermano mayor.
Nuestra familia está conformada por mamá, papá, nuestro hermanito, abuelita Dorita, tía Johany, el club de las cuatro primas, el primo Eskander que se llama igual que el tío. Es una familia pequeña, pero como dice un dicho que escuché por ahí, es la esencia y no el tamaño del envase lo importante, bueno creo que por ahí iba el dicho. Y mi familia les contará del roble del cual está hecha.
Pero esos momentos de nuestras vidas, los irán conociendo después de que me presente formalmente.
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Mamá, ha pasado con antojos, nos da mucha hambre aquí adentro y por eso pedimos cositas ricas que podemos ver a través de la mirada de mamá.
Y como es una consentidora sin igual, amante del chocolate, pedimos un poquito por qué queremos probar.
Mi gemelo es un poquito de estatura más larga que yo, mami es algo alta, creo que él saldrá primero a conocer el mundo, no tengo problemas con ello, mi hermanito aquí me abraza y sé que me ama, como los demás integrantes de la familia.
Nuestros días aquí, son divertidos, pasamos escuchando todo de lo que ocurre fuera del manto protector de mamá, ella nos canta, nos habla con una vocecita muy tierna, que nos hace sonreír cada vez que la escuchamos y de tanta emoción nos estiramos con regocijo, aunque creemos que para nuestra mami, no debe de ser tan cómodo que nos movamos así, pero no se queja así que yo, por un lado, y mi hermanito por el otro, hacemos un espectáculo para que mami nos regale muchas sonrisas, y lo mejor es que sigue cumpliendo nuestros antojos, porque come por nosotros tres, lo bueno es que dice la abuelita que no engorda, parece que mami ha sido de contextura delgada siempre.
También escuchamos que a mami, le dicen China, por sus ojitos rasgados, ¿será que saldremos chinitos? Aunque nuestra nacionalidad es Nicaragüense, bueno ojalá, tengamos rasgos de mamá, es muy bonita y la amamos muchísimo.
Van a decir que solo yo hablo, pero mi gemelo es callado, creo que él así también será de grande.
El embarazo va muy bien, eso le dicen los doctores a la familia, no esperamos las horas y el día en ver la luz del día.
Somos un milagro de la vida, de Dios, vivir es prueba de ello, el respirar cada segundo es lo más bonito que hemos hecho hasta el momento. Es el significado que estamos vivos, que somos vida.
Ha llegado el momento de presentarnos con ustedes, mi gemelo se llama Lucas Marcel Rodríguez Hernández y el nombre de su servidor es Sergio Gabriel Rodríguez Hernández, se escuchan bonitos nuestros nombres. ¿Verdad que sí? Los eligieron nuestros padres.
Estamos a pocas semanas según el doctor de salir al mundo, estoy seguro de que nos esperan grandes cosas por hacer.
Nuestra mami está muy contenta por esa noticia, nos dice que ya nos quiere tener entre sus brazos y nosotros también queremos eso, sentir el beso que mami nos daba con su mano en su vientre, sentir el calor que emana su cuerpo y verla a los ojos es algo que estamos anhelando con todo nuestro corazón. Ella sin duda es nuestro primer amor.
El día tan esperado por toda la familia es hoy, estamos en la sala donde preparan a mamá para que nos conozca, será por cesárea por lo que somos dos, los doctores se están preparando ya para tener todo listo.
Ver a mami, pasar por todo esta hermosa experiencia, que las mujeres han sido bendecidas con la bondad de dar y traer vida a este mundo, es sin duda la más bonita bendición, esa conexión que se crea entre ese ser que se gesta en su vientre y ella, simplemente es supremo porque este vínculo no se corta nunca, aunque dicen que nos cortarán un cordón umbilical por donde estamos conectados con mamá, pero nunca se podrá olvidar la sensación que Mamá tuvo al tenernos dentro de ella, porque un hijo no se olvida nunca, permanece y queda grabado en nuestra alma para esta vida y toda la eternidad.
Queremos estar con todos nuestros seres queridos, poder reírme de los sonidos que la tía le hace a mamá.
—Espera un poco más, ya vamos a salir Sergio, te amo mi compañero de viaje, pronto conoceremos el rostro de nuestra dulce mamá.
—Te amo, mi compañero de viaje y segundo hermano mayor. Allá te veo—Lucas sonríe —y hace que le devuelva la sonrisa instantáneamente.
Lucas, acaba de nacer, fue el primero de los dos en salir, ahora es mi turno de ver las maravillas del Creador que tiene preparadas para mí, mi Dios.
El doctor trata de sacarme, siento algo, pero la voz de mamá hace que todo mi mundo se quede en silencio para escuchar su dulce voz, perderme en su intensa y tierna mirada, en el calor de amor de sus brazos, es el regalo más bello que Dios me ha dado.
Mamá, te amo tanto, que solo espero la oportunidad de demostrarte cuan valioso son los recuerdos que tengo desde mi creación.
El nueve de marzo del dos mil cuatro, se convirtió en una fecha especial, somos los gemelos viajeros de mamá.
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Editado: 01.01.2024