Capítulo: 9
{H de hombre y M de mentiroso}
Yull
No tengo idea de por qué estoy mal.
Me siento desilusionada, hasta dolida podría decirse.
Es estúpido pensar que el nerd podría ser diferente. Al final y al cabo es hombre.
Anoche me di cuenta de que es sensible y empático. Es un chico que no guarda sus emociones, pensé que él me ahorra el trabajo de decirle a su novia sobre el beso.
Pero mi sorpresa es grande, cuando los veo enrollándose en la escalera. Besándose y diciéndose palabras afectuosas. Qué asco.
Todos los hombres son iguales. La engaño conmigo y al otro día le dice que la quiere.
— Creí que eras diferente nerd. Pero todos son mentirosos — murmuro. Me retoco un poco el maquillaje mirándome al espejo del baño del colegio.
Estaba por salir pero escucho murmullos. Recocí la voz de inmediato, es Kika o como se llame la novia del nerd.
Rápidamente me escondo en uno de los baños.
— Entonces estudio con Yull ¿Y no pasa nada? — pregunta una de las amigas.
— Claro que no. — responde miss perfecta. — No caería tan bajo.
Mi sangre hierve cuando la escucho hablar. ¿Tan bajo? Claro muñeca, el no llego tan abajo porque lo detuve. Sino pobre de ti.
— Eso es verdad. Pero ella es hermosa, tiene ojos muy lindos.
— A mí me parece común. Básica, es una zorra.
Auch.
Eso dolió, escuchar comentarios así de los hombres. Es normal, siempre me llaman zorra cuando me niego a coger con ellos. Pero escucharlo de la voz de una chica, es horrible.
<<¿En dónde quedo el feminismo y la sororidad? >>
— Creo que Yull está de novia con Zack. Así que no tendrías por qué preocuparte.
— Esa chica no tiene un novio, tiene varios.
— Corrección perra, no tengo novios. — suelto con ira.
Salgo del baño mirándolas con desdén. Me miraron sorprendida.
— Saben escuchar a un chico hablar así de una chica es feo y de mal gusto. Pero que una mujer piense y diga eso. Es abominable. — digo en tono frio. — Yo no te critico por querer ser virgen hasta el matrimonio, no me burlo de tu sexualidad. — me acerco amenazante a la rubia. Ella retrocede dos pasos chocando su espalda con el lava manos. — Eres una perra cero empática. A la cual le hace falta un poco de vida para no tener que meterse en las ajenas.
Dicho eso salgo del baño con rapidez.
Ahora no voy a tener piedad, voy hacer que el nerd se enamore de mí. Y él solito la deje, le rompa el corazón.
Esa será mi venganza.
Después veré que hare con el nerd. Capaz que siga un tiempo con él y después lo deje. Me da igual, seguramente ni se enamora de verdad.
Tiene cara de ángel, pero sigue siendo un hombre.
Y esos, solo mienten.
William
Entre al aula dirigiéndome a mi asiento habitual. Siento mi celular vibrar en mi bolsillo. Rápidamente lo tomo y veo que tengo un mensaje del entrenador.
Profe. Valverde: Chicos hoy tendremos una junta impórtate. Es necesario que todos asistan al entrenamiento.
Contesto en el grupo de natación. Algunos de mis compañeros hacen lo mismo.
Estoy ansioso, sé que va a hablar sobre los regionales. Es un torneo en donde se decidirán quienes irán a Buenos Aires para los juegos olímpicos. Mi sueño desde pequeño fue ser nadador profesional. Así que mis padres me inscribieron a la escuela de natación desde los cinco años. Sé que estoy más que calificado para ir.
Solo tengo que acomodar mis horarios. Hoy estudiare para el examen del viernes, así voy aligerando un poco mi carga horaria. No se cómo hare para trabajar, estudiar e ir a natación. Pero capa que encuentre un trabajo de medio tiempo aunque sea solo para los fin de semanas.
Se hace silencio en el salón. Levanto mi mirada, en ese momento ella entra. Moviendo sus caderas de forma natural. Su cabello se mueve como si alguien delante de ella tuviera un ventilador y pareciera uno de esos comerciales de productos capilares.
Sus ojos se cruzaron con los míos por una milésima de segundo revolviendo me el interior, creo en cualquier momento me tiro un gas.
Ella se sienta en el lugar al lado mío como hizo ayer. La profesora de historia entra unos minutos después.
— Bueno. Espero que todos hayan cumplido con sus trabajos. Los quiero ahora en mi escritorio — demanda con vos autoritaria.
Nos miramos y ella me tendió el trabajo para que lo entregara, así lo hice.
Me volví a mi asiento y me senté.
Entonces recordé lo de esta mañana como mi papa pudo hacerle eso a mí mama. Digo ella es una mujer muy bella, nos cuida y cocina muy bien. ¿Por qué el la engaña que habrá hecho mal?
En toda la clase de historia no preste atención. Mi mente iba de mi mama a Yull, como si ellas fueran mis únicos pensamientos. Tenía que despabilarme si me quiero concentrar en el entrenamiento .El módulo de historia paso muy lento para mí, así que cuando sonó el timbre guarde mis cosas y espera a Javier. Quien hablaba con el equipo de futbol en el cual se encontraba Zack, desde que los vi con Yull en el estacionamiento me dan ganas de vomitar. Aparte de soltar uno que otro pedo pero qué más da.
No entiendo por qué me siento así. Ella no me importa ¿O sí?
Yull se encontraba guardando sus cosas. Me acerque a ella.
— Hola — saludo.
La verdad no tengo idea de por qué la estoy saludado. No somos amigos.
Ella levanta la vista y me mira sorprendida.
— Hola nerd — dice de forma simple.
— ¿Todo bien? — pregunto. Antes de lo del beso, estábamos en una charla profunda sobre sus padres.
— Si ¿Por qué los dices? — pregunta extrañada.
— Porque ayer estabas mal. Antes de eso— murmuro sonrojándome. ¿Por qué me sonrojo? — Estabas a dos tragos más de acabarte una botella de vodka.
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Editado: 26.01.2022