Mi Novio Agresivo Y Posesivo

《Capitulo 23》

Narra Brayan

-Pregunté, ¿¡Qué mierdas pasa aquí!?-Grité

Nadie se mete con lo qué es mío, ¡Nadie!.

-¿Qué hace el aquí?- pregunté con tranquilidad.

Mire de reojo a las personas y me contuve de decirle qué me perdonará, Caminé hacía aquél chico qué me había hartado la paciencia, La muy, muy poca paciencia qué quedaba.

Mi puño fue a parar a su rostro, y tan rápido como un parpadear, Estábamos peleando, Tenía sangre, y el igual, Pero no me iría de aquí hasta matarlo.

Narra Cameron.

Corrí hasta donde estaban los dos, peleándose como bestias que son, Con mis fuerzas aparte a Brayan lejos de Hen, Quién, por muy poco, Casi soltaba un puñetazo en mi rostro, Me miró con sorpresa y bajo su puño, ayude a Hen a levantarse, Sonriéndole, le pedí a su amigo quién, Hasta ahora, no se había movido De su lugar, Qué me ayudará a llevarlo a la enfermería.

Interesada.

Comenzamos a caminar, evitando un poco a los alumnos, Sentí como me paraban y me tomaban del brazo, jalandome.

-¿A donde vas?-Dijo Serio.

-No te irás a ninguna parte Cameron-Me miro enojado.

-Si lo haré-Conteste de vuelta, enfrentándolo.

-¿Y yo?, ¿Botas todo por el?-Grito algo dolido.

No caigas de nuevo Cameron. No otra vez.

Di medía vuelta y comencé a caminar lejos de el, Lejos de todo, No mas Brayan, No mas mundo de mierda...

Narrador

Su mundo calló, calló muy bajo, mas bajo qué antes, Había perdido a Cameron, La había perdido y quizás para siempre, Se odiaba tanto qué quería chocar, Y morir, ya no la tendría con el y quizás aquél chico disfrutaría de ella.

Condujo hacía el lugar donde su infancia había acabado,  donde sólo se respiraba tristeza.

Llegó a aquella casa, Tan rota cómo la última vez, El techo Estaba caído, El pasto Dañando y sin cuidado, los columpios oxidados, La reja un poco roja y chirriante. Suspiró, apagó el motor,y entró, Tantos recuerdos lo inundaron, Tantas risas en su cabeza, Miró a la cocina y se imaginó a su madre gritándole furiosa qué había ensuciado su piso recién trapeado.

Negó varias veces. No era momento para tonterías.

-¿Padre?, ¿Estás?-Gritó.

Al no tener respuesta, Subió las escaleras y entró al cuarto que antes sus padres compartían, Entró y encontró a su padre fumando, Postrado en la cama.

-Muchacho-Sonrió mostrando sus dientes amarillentos.

-¿qué hay viejo?-Sonrió Brayan.

-Nada nuevo-Expulsó el humo, mirando a su hijo parado en la puerta-A qué vienes, Dudo mucho qué a tomar el Té y comer Galletitas- Dijo sonriendo. 



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En el texto hay: golpes y lagrimas, maltratos, celos amor

Editado: 09.11.2021

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