Capítulo 5.

Ahora soy novia de Stefan; ni como decirle que no le di la respuesta a él, que esa respuesta fue a la pregunta que me hizo Bastian, pero es lo mejor, Bastian tiene novia y su pregunta solo fue una más de las cosas sin sentido que dice. 

Stefan me vuelve a besar y correspondo. Miro de reojo a Bastian y él se ha ido. 

Después. 

Me logro escapar de Stefan, entro a la casa y pregunto a los chicos si han visto a Bastian y gracias a ellos estoy en la puerta de la habitación de Braulio. 

Toco la puerta y nadie contesta (la música no ayuda mucho). Abro lentamente la puerta y veo a Tiffany moviéndose encima de Bastian y ella está desnuda. Lentamente cierro la puerta y me voy corriendo. 

STACY. 

—Esos dos son unos tontos —suelto un suspiro. 

—¿Qué haremos para juntarlos mi querida Stacy? —pregunta Braulio. 

Como no me di cuenta antes de lo bello que es. 

—¿Has visto esos caramelos largos? 

—Sí. 

—El lunes llevarás de esos caramelos a la preparatoria. 

—Ok. ¿Pero si no funcionan los caramelos? 

—Entonces haremos otra cosa, ya iré maquinando mi plan. Esos dos se quieren; solo hay que darle un empujón. 

—La llaman cupido —río por lo bajo. 

—Soy una cupido muy linda y sexy. 

—De eso no tengo duda —fijo mi mirada en los labios de Braulio. 

—Definitivamente, quiero besarte de nuevo —se acerca a mí y me agarra de las nalgas. 

—¿En serio? 

—Sí. 

—¿Qué quieres hacer cupido? 

—Muchas cosas, pero tienen que acabar la fiesta para estar sólitos los dos y sin que nadie nos moleste. 

—Esta cupido me encanta —me besa apasionadamente. 

AUDREY. 

—Nos vemos el lunes —asiento con la cabeza y Stefan se va. 

Que día más estresante, solo quiero llegar a mi casa y dormir. La fiesta ya ha acabado y todos se están yendo, junto a Amira me acerco a Braulio. 

—Chao y de nuevo feliz cumpleaños. 

—Vayan con cuidado. 

Bastian se acerca a Braulio y se despide de él con un movimiento de mano, Ethan también hace lo mismo. Bastian no me dirijo ni la mirada, incluso pasa por mi lado y ni siquiera me mira. 

—Audrey, ¿te quieres ir con nosotros? 

—Sí... —miro a mi alrededor— ¿Y Stacy? 

—Ella ya se fue a su casa —comunica Braulio. 

—¿En qué momento lo hizo? —pregunta Amira. 

—No lo sé, yo estaba comiendo cuando se despidió —mi instinto de amiga me dice que está mintiendo. 

—Siendo así me voy, espero y realmente se haya ido a casa —Braulio solo me da una sonrisa. 

—¿No vamos Audrey? —miro a Ethan. 

—Sí. 

Sigo a Ethan, él es un chico igual de guapo que el hermano, a diferencia de Bastian su cabello es café rojizo y eso lo heredó de su señor padre y Nain también tiene el mismo color de cabello, en cambio, Bastian heredó el cabello de su señora madre y los ojos verdes son normales en ellos, hasta el pequeño Ian tiene los ojos de ese color aunque su cabello es rubio. 

La genética es extraña, en mi familia Noah y Amira son ojos azules y yo café. El color de cabello de mi hermano es rubio, mi hermana es castaño y el mío es marrón oscuro dando casi a negro; la piel de ellos es clara y la mía bronceada, definitivamente a mí me hicieron con menos amor o estaban borrachos mis padres. 

—Las chicas se irán con nosotros —le manifiesta Ethan a Bastian y él solo asiente sin mirarme. 

Ethan se sienta en el asiento copiloto, Amira y yo nos sentamos atrás y Bastian comienza a manejar. 

Bastian estaciona su auto el patio de su casa y nos bajamos. Aclaro mi garganta y hablo: 

—Gracias. 

Bastian no me dice nada y camina hacia su casa dejándome con la palabra ignorada pegada en la frente. Ethan solo se encoge de hombros y habla: 

—Suele ser así, ya se le pasará lo que sea que tenga. 

—Gracias Ethan. 

—No hay de qué... Descansen —él sonríe y Amira se da la vuelta sin despedirse—. Eh... Ya me voy a dormir... Cierra bien las puertas. 

—Descansa Ethan. 

Él ingresa a su casa. Camino hacia mi casa, dirijo mi mirada hacia la ventana de Bastian y las luces están apagadas, seguro ya se durmió. 

Ingreso casa y voy a mi habitación, entro al baño y comienzo a lavarme el cuerpo. Esta noche solo estamos en casa Amira y yo; mamá tuvo que irse juntos a los vecinos, ya que tienen que resolver un caso al otro lado de la ciudad y el papá de Bastian las acompañó por lo que los cuatro estamos solos, puesto que no necesitamos niñeras si vivimos en una zona privada. 

Salgo de baño lista para dormir, me dejo caer y me entrego a los brazos de Morfeo. 

El intenso sonido de mi celular me ha despertado, contesto sin ver. 

Inicio de llamada. 

—Hola —digo más dormida que despierta. 

—Audrey, Stacy ¿está en tu casa? —me levanto ante un solo. 

Ese Braulio es un mentiroso. ¿Ahora que hago? 

—Sí. Ella está conmigo. 

—Qué alivio, pensé que le había pasado algo, ya que no comunico que se quedaría contigo y tampoco contesta su celular. 

—Ella está durmiendo, no se preocupe por ella. 

Cuando la encuentre la voy a estrangular. 

—Cuando se despierte dile que venga a casa rápido. 

—Si señora. 

—Descansa Audrey. 

—Igualmente. 

Fin de llamada. 

Voy a matarla a penas vea una era de su cabello. Me pongo de pie y la llamo, pero no contesta, llamo a Braulio y tampoco lo hace. Tengo que saber si Stacy está con Braulio o se fue a otro lado, estoy segura de que está con Braulio. 

Me cambio de ropa y salgo de la casa, corro hacia la casa de los vecinos. Toco el timbre y nadie contesta, vuelvo a intentar hasta que me abren. 

—¿Qué pasa Audrey? —Ethan se limpia los ojos. 

—Necesito a Bastian. 

—Está en el mundo de los sueños. 

—Stacy no ha llegado a su casa y no sé si está con Braulio o algo le paso. 

—¿Llamaste a Braulio o a Stacy? 

—No me responden la llamada. 

—Ve a despertarlo tú, no quiero aguantar el mal humor de Bastian —él se hace a un lado e ingreso. 

Corro a la habitación de Bastian, entro, prendo a la luz y... trago grueso. Tengo que aceptar que hasta dormido se ve muy bien. 

—Bastian —toco su hombre desnudo y lo remuevo—, Bastian. 

Me jala de un solo y caigo encima de él, me abraza y pega más en su pecho. Mi corazón está que late como loco. 

—Bas... Bastian. 

—Audrey, ya no quiero ser tu odioso vecino —siento un pinchazo en mi corazón. 

—Bastian...—musito— Bas... 

De un segundo a otro quedo en la cama y Bastian encima de mí. 

—¿Qué haces aquí? 

—Yo... —me pierdo en el bosque de sus ojos— Yo... —fijo mi mirada en sus labios. 

¿Cómo será un beso real con él? Trago grueso porque ese impulso de besarlo esta como una chispa y está tomando fuerza. 

Él me mira con dureza él se mueve para irse, pero rodeo su cuello y él me mira incrédulo. 

—No me hagas preguntas por qué no sé cómo responderlas —lo beso y él corresponde. 

Yo: Audrey Montesinos estoy besando a mi odioso vecino. 

Su lengua me pide permiso para encontrarse con la mía y se lo doy. Bastian me besa con el mismo afán que yo, mi corazón está feliz el muy ingrato está que brinca de la emoción. 

No quiero acabar el beso, pero necesito buscar a Stacy. Con el dolor de mi vida corto el beso. 

—Bastian —digo con una voz agitada. 

—Dime —susurra sobre mis labios. 

—Stacy no llego a su casa y no sé si este con Braulio, acompáñame a buscarla —digo casi si voz, porque estoy luchando por no besarlo de nuevo. 

—Está bien —roza sus labios con los míos. 

—No demores mucho —me besa robándome todo el aire. 

Bajo mis manos hasta su espalda y la acaricio, esto que he hecho me traerá consecuencias muy grandes y estoy dispuesta a aceptarlas. 

Bastian muerde mis labios y corta el beso, mis labios lloran porque quieren seguir siendo besados. 

—Vamos por Stacy —asiento con la cabeza. Él se levanta y me ayuda a ponerme de pie. 

Sus ojos brillan y una gran sonrisa se ha formado en sus labios. Sinceramente, estoy confundida y, los besos que nos hemos dado ha removido todo en mi interior. 

—Besas increíble. 

—Tú también —estoy comenzando a sentir calor—. Te espero abajo, iré a pedirle un favor a Ethan. 

—No demoro mucho. 

Salgo de su habitación rápidamente y, bajo a la sala. Ethan está tecleando en el celular. 

— Ethan —me da una sonrisa—, ¿me puedes hacer un favor? 

—Sí. 

—Puedes quedarte en la casa mientras yo voy a buscar a Stacy. 

—¿En tu casa? 

—Sí. Es que Amira esta dormida y no la quiero dejar sola, ¿me harías ese favor? 

—Eh... Está bien, solo no te tardes mucho, después tu hermana se despierta. 

—No voy a tarda. 

—Voy por una chompa —meneo la cabeza en un sí. 

Suelto el aire comprimido. Este día ha sido muy extraño, desde ser la novia de Stefan hasta besarme con Bastian. 

—Audrey —mi corazón se acelera. 

—¿Qué pasó? 

—El be... 

—Bastian, te dije que no me hicieras preguntas —él se acerca a mí. 

—Necesito respuesta Audrey. 

—Estoy confundida, dame tiempo para pensar bien las cosas. 

—Audrey —veo dolor en su mirada y no puedo más y lo vuelvo a besar. Él me pega a su cuerpo, pero lentamente me separó de él porque ni estamos solos— ¿Qué pasa? 

—Ethan está aquí. 

—Entiendo. 

—Ya estoy listo —Ethan baja con una chompa rosa palo. 

Salimos de la casa. Dejo a Ethan en la casa, le ofrecí mi cama para que durmiera, pero él quiso quedarse en la sala jugando en el celular. Bastian y yo vamos a la casa de Braulio. 

Llegamos a la casa de Braulio, durante todo el camino hemos ido en silencio. Bastian sale del auto y yo también, él camina hacia donde están las flores, mete su mano y saca una llave, camina hacia la puerta y la abre. Rápidamente, vamos a la habitación de Braulio. 

Abro la puerta y clavó mis ojos la cama y ahí están los dos, abrazados y desnudo pero tapado por la colcha. 

—¡¡Stacy!! 

—¡¡Ay!! ¡¡¿Qué pasó?!! —me mira y abre los ojos como platos, el mentiroso de Braulio me mira divertido. 

—¡¡¿Qué pasó?!! Tu mamá me llamas para preguntarme por mí ti y yo sin saber dónde diablos te habías quedado. 

—No te enojes, estoy bien. Mírame, estoy sana y salva. 

—No me pudiste decir que te quedabas aquí —ella ríe. 

—Es que solo era ratito que me quedaría, pero nos quedamos dormidos —ruedo los ojos. 

—Vámonos a casa. 

—Ya me voy a vestir, pueden retirarse amigos míos. 

—Tienes cinco minutos. 

—¿Tú crees que en cinco minutos alguien se despide? —pregunta Braulio. 

—En minuto las personas se despiden, pero ustedes par de calenturiento ven las despedidas de otra manera. 

—Bastian llévatela a una de las habitaciones —manifiesta Stacy. 

Me quedo en silencio... mi cuerpo me dice que sigua el sabio consejo de Stacy. 

—Vístete rápido —salgo de la habitación. 

Esos dos son un caos. Espero no ser como ellos. 

—Deja de enojarte, es normal en los jóvenes disfrutar. 

—Pero que me asuste. 

—Stacy está bien, ella solo quería divertirse. 

—Gran método de diversión. 

—Tú porque no conoces... bueno, tú porque no has sentido el placer, por eso es que dices eso —trago grueso. 

—¿De qué me estoy perdiendo Bastian? —él se acerca peligrosamente a mí. 

—De mucho —susurra sobre mis labios. 

Subo mi mano hasta su pecho, saboreo mis labios al ver los de él. Me pongo de puntilla y roza sus labios... ¡Maldición! Quiero sentir en carne propia el placer y que lo provoque él. 

—Después dicen que uno es el calenturiento —me separó de Bastian. Braulio me da una sonrisa del lado—. Tengo condones ¿quieren? 

—¿Quieres un buen golpe? 

—No gracias. 

—Vámonos Audrey —Stacy sale muy contenta de la habitación. Ella se acerca a Braulio y lo besa. 

Ellos no son novios, pero se besan y tienen intimidad. ¿Yo también podría hacer eso con Bastian? 

Meneo mi cabeza ante el bobo pensamiento que tuve. Me acerco a Stacy, la agarró del brazo y me le llevó a jalones. 

—¡No deja disfrutar en paz! —Grita Braulio. 

Saco a Stacy de la casa e ingresamos al auto. 

—Stacy, tú estás más loca que yo. 

—Somos jóvenes, quiero disfrutar de la vida. 

—Sabes los grillo que es Braulio. 

—Mejor, así puedo experimentar un trío, siempre he querido hacer un trío —pego mi mano en la frente. 

—Tú ya no tienes solución, remedio, ni cura. 

—Algún día estarás como yo. 

—Eso nunca. 

—Vámonos que ya es tarde. 

¿Por qué apareció Bastian cuando dije nunca? ¿Acaso es una señal? 

Estar cerca de Stacy me está haciendo delirar estupideces. Bastian ingresa al auto y comenzamos nuestro recorrido a casa y a dormir, porque eso es lo que quiero. 

Llegamos a casa y salimos del auto, Bastian solo me mira y me da media sonrisa. 

—Tengo sueño, vamos a casa —Stacy bosteza. 

Me sobresalto por el grito que proviene de mi casa. 

—Amira. 

Corro hacia mi casa, abro la puerta e ingreso a la sala, ya que Ethan se quedó ahí antes de irnos. Me detengo de un solo y me quedo de piedra. 

—¡OMG! —exclama Stacy. 

Amira y Ethan están en el suelo y sus labios están chocando.


Bastian y Audrey no acaba ahí jajaja. 

Stefan ni 24 horas tiene de novio con Audrey y ella ya se besó con otro. 

Amira 😂 

~cerezos ★