Capítulo 13

En los siguientes minutos me dediqué a dar saltos y giros como había aprendido aunque obviamente por la falta de práctica me tambaleaban los pies y una que otra caída tuve cuando confundí los saltos, el inicio con una pierna, el impulso corporal, la flexión de rodillas, el salto y por último el aterrizaje con la otra pierna y flexionada a la vez. Solía costarme eso y al parecer aún me sucede.

—¡Agatha! —me deslizo con la respiración agitada, al escuchar mi nombre giré la cabeza—. ¡Ven un momento!

Sin más me deslicé hasta ellas y frené de costado levantando fragmentos de hielo bajo las cuchillas.

—No estuvo mal, pero te falta práctica —Laurent me recalca lo que ya sé.

—Te dije que pronto conseguiría una compañera —Lucy la anima al ver seguro mi mirada de desconcierto.

—Lo sé, es una pena que no quieras acompañarnos y prefieres ser porrista del otro deporte, pero te entiendo y espero consigas ese lugar —se encoge de hombros sonriendo de lado.

Un momento.

—¿Acompañarnos? —pregunto con esperanzas y sonrío cuando asiente afirmando lo que creía—. Gracias, de verdad.

—Confío en el ojo crítico de Lucy y tú no estás mal, sólo falta practicar y hay un entrenador que es el que ayuda a coordinar pasos a los jugadores para que no tengan problemas en el hielo y a su vez suele darme consejos, le informaré que ya tengo a mi compañera y que necesita de su ayuda para avanzar por completo —yo solo aplaudo feliz.

—Prometo que de verdad mejorare y estaré a la altura.

—Eso espero.

—Bueno chicas, es mi turno en ir a probar suerte. Las veo luego, y felicitaciones Agatha, lo mereces —ella me sonríe antes de seguir el camino a la salida.

—Te lo agradezco, Lucy —al verla irse, rápidamente salgo con cuidado para quitarme los patines—. ¡Espera, voy contigo!

—¡Iremos contigo! —Laurent también sale y se quita los patines.

Después de haber ordenado todo y volver a escaparnos de los ojos del resto de los alumnos y docentes de la escuela, nos dirigimos al campo de juego donde están ya varias chicas vestidas acorde a la situación. Era un vestido color coral, debajo llevaban un pantalón de un rosa oscuro que era más largo que la falda del vestido con vuelos. Otras chicas llevaban solo una camiseta blanca y un short negro como Lucy.

—Deseenme suerte —pide antes de dejarnos su mochila e ir al grupo.

—Seguro que entra.

Y coincido. La he visto practicar y me asusta un poco porque... ¡parece no tener articulaciones! Hasta es más flexible que yo y sus pasos sí son coordinados.

Mientras esperamos, Laurent me coloca al día sobre las coreografías, los juegos y más. Ella junto al entrenador solían estar al tanto de los jugadores y también tendré que estarlo. El equipo se llaman "Las águilas de hielo", personalmente no me gusta el nombre, pero en fin, la cuestión es que en un mes hay un nuevo juego amistoso contra una escuela privada no tan lejana a la nuestra, me contó que son muy competitivos y que a veces juegan sucio por lo que debo estar muy atenta.

Debo seguir aprendiendo, lo sé, pero el tener esta información me hace dar cuenta que debo dudar de hasta el que se coloque a mi lado. Y no me extraña, Chad es uno, que aunque nos acerquemos, él sigue ocultando cosas.

Risas llaman mi atención, una de las chicas que estaba haciendo su rutina al lado de Lucy ha caído, mi amiga no duda en ayudarla en ponerse de pie y seguir. Me hace sonreír, es una buena persona.

Después de haber terminado las practicas, el timbre suena avisando el primer receso, las tres tomamos nuestras mochilas y nos vamos del campo de juego ya que los resultados estarían al salir todos de clases.

—Muero de hambre, necesito un sándwich ahora —observamos a Lucy que su actitud había cambiado por una cansada, el estrés que cargó todo este tiempo ya la estaba llevando a su fin—, y dormir por dos días.

—Te diría que no lo hicieras pero lo harás de todas maneras —ella me sonríe de lado asintiendo.

—Mejor mañana falta, cuando vuelvas iremos a una fiesta —Laurent propone y mi mente se emociona.

¿Las fiestas que las personas comunes tienen? ¿A las que quise una vez asistir?

—¿Tienes tu identificación falsa, Agatha?

En silencio niego sintiendo un poco de vergüenza, me faltan tantas cosas por aprender y a la vez siento que soy una niña aprendiendo dar más pasos que los normales.

—Te consigo una luego —en un susurro le agradezco a mi amiga a lo que ella hace un ademán con la mano—. Los del último año ofrecerían una, asistiremos a esa.

—De acuerdo.

👑👑👑

Casi al terminar las clases, los altavoces son activados dando paso a la voz del director informando que habría una reunión en el gimnasio donde sorprendentemente entraba todos los alumnos de la escuela y podían sentarse cómodamente en las gradas ubicadas en los laterales del salón. Esta se encontraba en el lado sur de la escuela, no había asistido aquí ya que suelen darnos clases en el campo de fútbol. Con Chad y Lucy buscamos un lugar para esperar el comunicado del director. Ella me comentó que cuando convocan a una reunión puede ser que sea por algo que pasará y será un asunto serio o...

—... Los juegos interestatales están más cerca de lo que imaginan, ya no están para dudar de lo que hacen si es que quieren que la escuela gane, su honor gane.

Todos los alumnos comienzan a aplaudir y murmurar, sus rostros son de entusiasmo. No sé qué signifique esto pero debe ser algo importante para ellos como... un partido de tenis o golf a beneficencia como solemos participar... ¿cierto?

—Este año incluiremos más deportes, están elegidos los que más se destacan y ellos elegirán a su grupo para representar a la institución —el hombre lucia todo serio frente al micrófono que tenía en frente—, dejarán un lista para que cada quien pueda anotarse. Ahora bien, necesito que los que forman parte del equipo de fútbol, tenis, natación, hockey, y las porristas correspondientes, pasen aquí al frente para que sepan lo que ya está formado y preparado.