POV Eddie
Llego a mi casa agotado, tuve una semana fuera, fue totalmente estresante, no paraban de alargar las reuniones y quería salir corriendo, sino fuera un negocio tan importante ni siquiera hubiese viajado. Bajo del taxi emocionado por querer ver a mi campeón. Abro la puerta y me recibe Rosa como siempre.
-Bienvenido señor— me saluda seria.
-Buenas noches Rosa— veo a mi hijo abrazado a su pierna y me acerco para agarrarlo— ey campeón, llego papa— cuando él me ve se ríe emocionado y cae sentado al suelo, me apresuro a tomarlo en mis brazos y noto un golpe en su cabecita— ¿Que le ha pasado?— pregunto molesto.
-Señor, lo que pasa es que el niño ha estado dando sus primeros pasos y en un descuido mío se ha caído y golpeado— la miro con el ceño fruncido.
-¿Donde esta Alida?, ¿por qué ella no lo está cuidando?— ella se pone nerviosa por cómo le hablo.
-Ella se ha sentido mal estos días, hoy estuvo vomitando todo el día, así que le sugerí que fuera al médico, ella llamo a su amiga y le dijo que fuera urgente— me explica aun nerviosa y con la mirada gacha, en ese momento la puerta se abre y volteo a mirar, es Alida quien entra sonriente y con unas bolsas de compra.
-Estuviste divirtiéndote mientras que mi hijo se ha golpeado porque lo has dejado solo— ella me mira sorprendida y luego veo angustia en sus ojos, tira las bolsas al suelo y se acerca corriendo.
-¿Que le ha pasado?— pregunta preocupada.
-¿Como si te importara?— busca agarrarlo y yo lo alejo, Andrew alza sus manos a ella y yo lo vuelvo a alejar.
-Claro que me importa, déjame verlo por favor— suplica y yo no la dejo tocarlo.
-Llamare a Ricardo, tu puedes seguir feliz haciendo lo que quieras— saco mi teléfono del bolsillo y llamo a mi amigo, ella se acerca a Rosa y las dos hablan silenciosamente.
-Amigo mío.
-Ricardo, ven a mi casa urgente.
-¿Qué pasa?
-Es Andrew se ha golpeado.
-¿Qué?, acabo de dejar a Alida allí, así que llegare rápido.
-Apúrate.
Cuelgo la llamada y me acerco a la puerta, tropiezo con las cosas de Alida y algo se sale de la bolsa, me agacho y veo medicinas, trato de meterla en la bolsa de compra y me sorprendo al ver un vestidito de niña, ¿qué significa esto?, tocan la puerta, me levanto llevando el vestidito en mis manos y abro la puerta.
-Aquí estoy amigo, ¿Que le paso a mi ahijado?-- me quedo viéndolo sin parpadear, el mueve su mano frente a mí y parpadeo repetidas veces.
-Hola Eddie— me saluda la esposa de mi amigo sonriente.
-Hola, pasen por favor— pasan y se tropiezan con las cosas de Alida.
-¿Qué es esto? me parece familiar estas bolsas.
-Natalia, amor deja eso— ella lo mira con molestia.
-Eso es mío Nati, lo siento, lo tire porque me asuste al escuchar que Andrew se había golpeado— ella lo toma y suspira.
-Entonces, ¿Puedo revisar a mi ahijado?— meto el vestidito en mi bolsillo y me acerco a mi amigo.
-Vamos a la sala— todos me siguen y les indico que se sienten— Rosa por favor tráenos algo de beber.
-Si señor— se retira, miro a Alida y a Natalia pelear por las bolsas.
-Déjame ver a este pequeño— mi amigo se acerca y lo revisa, mi hijo se remueve molesto— es un golpe leve, no es grave, colócale un poco de hielo y se desinflamara, ¿Cómo se hizo el golpe?
-Rosa dijo que estaba dando algunos pasos, se descuidó un momento y se cayó golpeándose— el asiente acariciando la cabeza de mi hijo.
-Eso suele suceder en este tiempo, ¿Qué es eso que tienes allí?— veo a mi hijo y ha sacado el vestidito de mi bolsillo— eso no es para ti Andrew, es para una pequeña y milagrosa bendición— lo miro confundido, escucho un carraspeo y volteo a ver a las mujeres, ellas están nerviosas.
-Ricardo y yo vamos a ser padres— dice emocionada acariciando su vientre.
-Felicidades, de verdad es una bendición, ¿Ya saben el sexo que le están comprando ropita?— se miran cómplices y luego me miran negando.