Elías se sube al escenario y luego de sonreír comienza a cantar “The lazy song” de Bruno Mars con bailecito incluido, puede que su voz no sea completamente armoniosa pero en definitiva lo compensa con su actitud y cuando termina de cantar y se baja del escenario para acercarse a nosotros veo como algunas mujeres lo siguen con la mirada.
—Intenten superar eso —dice Elías bromeando mientras se sienta a mi lado.
—Eso haré, no te preocupes —contesta Tomas levantándose de su silla y acercándose al escenario.
Sonríe tímidamente mientras “How would you feel” de Ed Sheeran comienza a sonar, la manera en la que canta es tan tierna que hasta yo suspiro mientras lo miro embelesada, cuando termina se acerca a la mesa para luego sentarse y sonreír con suficiencia.
—Sé que soné increíble, no tienen que decirlo —exclama con suficiencia para luego tomar de su trago.
—Que modesto —dice Rissa con sarcasmo.
—Quiero hacer un dueto —dice Henry para luego tomar el vaso donde están los papelitos con los nombres y sacar uno—. Vamos Rissa, es nuestro turno.
Ambos se levantan y hablando se dirigen al escenario para comenzar a cantar “Just give me a reason” de P!nk y Nate Ruess. Debo admitir que sus voces combinadas suenan muy lindas y que de hecho ya me están entrando ganas de cantar.
— ¿Quieres cantar conmigo? —pregunta Sebastian quien se encuentra sentado al lado mío.
— ¿Lo dices en serio? —pregunto incrédula.
—Claro que sí, anda vamos —dice tomando mi mano para acercarnos al escenario.
Mientras Rissa y Henry terminan de cantar, Sebastian le dice al Dj la canción que quiere que cantemos y debo admitir que su elección es realmente muy buena así que cuando nos subimos al escenario sonrío mientras “Destino o casualidad” de Melendi y Ha*Ash comienza a sonar. Inicio cantando yo y cuando llega el turno de Sebastian me sorprendo mucho pues realmente tiene una voz increíble. Doy una mirada rápida al lugar y me doy cuenta de que Damon me reconoció y está sonriendo mientras me escucha cantar, una vez que terminamos tomo a Sebastian de la mano y camino rápidamente hasta la mesa pues no quiero que el vea a Damon.
—Sonaron realmente increíble chicos —dice Elías sonriendo.
—Gracias —responde Sebastian.
— ¡No puedo creer que él esté aquí! —exclama Rissa de pronto.
— ¿Quién? —pregunta Elías confundido.
—Richard, está aquí con sus amigos —responde Rissa señalando a un hombre de cabello negro que está sentado en una mesa bastante cercana a la nuestra.
—Es bastante guapo —digo observándolo.
— ¡¿Disculpa?! —exclama Sebastian mirándome algo enfadado.
—Andie tiene razón, ese tal Richard está como quiere —dice Tomas sonriendo.
— ¡¿Disculpa?! —exclama esta vez Henry.
—Estas disculpado cariño —le responde Tomas a Henry para luego besar su mejilla.
—Miren como está coqueteando con esa camarera —dice Rissa con resentimiento—. No me agrada.
— ¿Por qué te importa que este coqueteando con la camarera? —pregunto con curiosidad.
—No lo hace —responde a la defensiva.
—Pues no lo parece —añado.
Rissa me mira intensamente para después levantarse de la silla y se acerca al escenario para comenzar a cantar “Sorry not sorry” de Demi Lovato. Su actuación es realmente buena y al ver a Richard me doy cuenta de que él está mirando al escenario todo embobado mientras Rissa canta y baila de manera un tanto provocativa. Cuando termina la canción ella se baja del escenario y mientras se acerca a nuestra mesa es interceptada por Richard que comienza a hablar con ella.
—Ahora es nuestro turno —le dice Henry a Tomas mientras se levantan y se acercan al escenario.
Cantan “Stay with me” de Sam Smith mientras que Rissa se acerca a la mesa y se sienta con una sonrisa.
— ¿Qué te dijo? —pregunto con curiosidad.
—Después te cuento —responde para luego discutir con Elías la canción que van a cantar a continuación.
Henry y Tomas al terminar de cantar se dirigen a la barra supongo que para hablar con Jim mientras que Elías y Rissa se van al escenario dejándonos solos a mí y a Sebastian.
Mientras que Elías y Rissa cantan “Donde está el amor” de Pablo Alboran y Jesse & Joy, Sebastian se dedica a mirarme fijamente hasta el punto de ponerme nerviosa.
— ¿Podrías dejar de hacer eso? —pregunto exasperada.
— ¿Hacer qué? —cuestiona con inocencia.
—Mirarme fijamente —respondo con seriedad—, es molesto.
—No puedo evitarlo —dice encogiéndose de hombros—, es que eres muy hermosa.
—Por favor deja de decir esa clase de cosas —digo mientras volteo mi rostro para evitar que él vea mi sonrojo.
—No quiero hacerlo —susurra para luego acercar su mano a mi rostro y acomodar un mechón de mi cabello tras mi oreja.