Capítulo 7: Academia Celestine

Káel observó como un enorme portón de color dorado y negro, se abrió fácilmente, ante la presencia de Owen. Al mismo tiempo, una luz se encendió dentro de su guante izquierdo.

Owen notó la curiosidad en los ojos de su hijo y mencionó:

“Todos los magos que trabajan en la academia tienen dos cosas en común, y esta es una de ellas.”

Luego se quitó el guante de cuero y mostró un tatuaje en su mano que brillaba con intensidad. Era como un pentagrama tradicional, pero con un árbol en el medio. Káel tuvo que admitir que lucía bastante bien y de seguro hubiera sido algo bastante popular entre los fanáticos de los tatuajes de su anterior vida.

“Esta es la marca de la academia Celestine. Todos los profesores o aprendices de mago principales tienen una de estas en su cuerpo, ya que sirve para muchas cosas, y permite acceso libre a la mayoría de los lugares. También tiene otro uso importante… pero bueno eso no importa ahora.” explicó Owen, con algo de vacilación, y luego entró al enorme edificio. Al hacerlo, la luz del tatuaje se apagó y el enorme portón se cerró detrás de ellos.

“Fascinante…” suspiró Káel.

Mientras recorrían el lugar, Káel notó que todos los jóvenes inclinaban sus cabezas al ver a Owen y se apartaban de su camino rápidamente. Además, cada uno de ellos posaba sus ojos sobre Káel con intensa curiosidad.

“¿Por qué todos me miran tanto?” preguntó Káel en voz baja.

Owen sonrió con ironía.

“Hay varias razones, pero la principal es que son muy raras las ocasiones donde se le permite entrar en la academia a alguien menor de 12 años de edad. Y en tu caso tan solo tienes 6 años… así que se podría decir que eres un bicho raro entre los raros.”

Káel asintió, este nuevo padre suyo quizás no tenía ninguna clase de instinto paternal normal, pero al menos era directo en sus palabras.

La mayoría de los jóvenes en este enorme salón de entrada tenían entre 12 y 20 años, y todos ellos vestían túnicas simples de color gris.

“Padre ¿Por qué todos visten de gris?”

« Quizás es la moda del momento… »

Owen se aclaró la garganta:

“¡Hmm! Esta es otra de las razones por la cual todos te miran, y la respuesta a esto es un poco extensa. Pero, en resumen, los novicios, quienes apenas comienzan en el mundo de la magia, solo pueden vestir túnicas de color gris. Por otro lado, los aprendices pueden escoger entre marrón o amarillo. Mientras que los magos oficiales pueden vestir cualquier tipo de túnica con excepción de los colores blanco, negro y dorado. Incumplir esta regla, y fingir ser algo que no eres, puede significar una sentencia de muerte.”

Káel se sorprendió un poco al enterarse de esto.

« ¿Morir por la forma de vestirse? ¡Que estupidez! Interesante forma de discriminar a ciertos grupos sociales… Parece que en este lugar la igualdad de las personas está lejos de ser real. »

“Padre ¿Por qué tu vistes de negro?”

“Eso es porque ostento el título de Gran Mago, lo cual me da la libertad de vestir como yo quiera.”

Káel guardo silencio luego de esto. Parece que su padre era una figura prominente en este lugar. Además, entendía que había demasiadas cosas que no sabía. Por otro lado, en este momento, él mismo estaba vestido con un abrigo de piel color marrón.

« ¿Esto significa que podría morir por incumplir la regla del lugar? » Káel titubeó al darse cuenta de esto, pero luego se forzó a calmarse.

« Si hubiera algún peligro mi padre me advertiría… ¿Verdad? »

Owen y Káel siguieron caminando por el edificio, mientras subían una infinidad de escaleras, hasta llegar a un salón iluminado con unas extrañas piedras que desprendían una luz verdosa desde la pared.

“Solo recuerda una cosa, sin importar lo que pase de ahora en adelante, jamás reveles de dónde vienes. Isla Ilaia solo debe existir en tu corazón” le susurró Owen, mientras tomaba su hombro con una de sus manos. Káel entendió de inmediato que seguramente esto era para proteger a su madre de alguna forma, por lo cual simplemente asintió con la cabeza.

“Vamos” Owen ingresó con pasos firmes al salón de luz verdosa, mientras era seguido de cerca por su hijo.

“Pero miren quien llegó… se trata del mismísimo Owen Shan.” dijo una voz desagradable que provenía desde este salón.

Cierto tono burlesco podía ser notado si se prestaba atención.

Owen frunció el ceño y mostró una mueca de desagrado, pero de todas formas siguió caminando con naturalidad.

“Drazic Crane ¿Qué haces tú en este lugar? ¿Dónde está su excelente, el archimago?” preguntó Owen en un tono de voz neutro, totalmente desprovisto de sentimientos.

“El archimago tuvo que asistir a cierto evento importante y tardará un tiempo en regresar. Me ha dejado a cargo de la Academia Celestine en su ausencia.” explicó Drazic Crane, con una orgullosa sonrisa.

Káel pudo apreciar los rasgos de este sujeto, tenía un cabello oscuro y largo que parecía no haber sido lavado en semanas, también usaba varios anillos, aros y glamorosas joyas de oro de todo tipo. Además, su mirada lucía perturbadora e intensa, como si pocas cosas pudieran escapar de sus afilados ojos. A simple vista, no parecía ser una persona con la cual se pudiera simpatizar fácilmente.

Owen suspiró, y dijo:

“En ese caso esperaré el regreso del archimago para informar los resultados sobre mi última misión.”

Drazic pareció molestarse un poco al escuchar esto, pero no dijo nada al respecto y cambió el tema de conversación:
“¿Quién es el jovencito que se esconde detrás de tu espalda?”

Owen respondió con calma imperturbable:

“Este joven es el hijo de un familiar lejano, el cual encontré de casualidad durante mi última misión. Luego descubrí que tiene un gran potencial para la magia y lo acepté como mi discípulo personal. Por lo cual, quiero que se una a la academia de inmediato para que comience sus estudios.”