Taylor:
-Y cuando tengamos nuestros cachorritos, les pondremos Leila y Matthew- Escuche a Zoe mencionar.
Joder nunca se calla.
Sonreí manteniendo la calma.
-Si Zoe, suena muy bonito, pero no hagamos tantos planeas tan pronto, ¿sí?- Dije fingiendo reír.
Asintió con emoción.
-Solo que contigo tengo tantos planeas a futuro- Dijo mordiendo su labio inferior.
-Lo sé- Dije dando un beso en su cabeza.
Salí de la cabaña tomando aire profundamente.
No quería dejarla sola, porque es mi novia, pero a veces se pone algo intensa y estresante.
Vi a Alice sentada frente a la cabaña de Cristian, se veía pensativa.
-Hola- Dije sentándome junto a ella.
Me vio con sorpresa pero no salió nada de su boca.
-Oh, lamento interrumpirte, te veías pensativa- Me disculpe.
-Tranquilo Taylor- Dijo sonriéndome.
Se me hacía haber visto su sonrisa antes, que extraño.
Me fije en sus ojos, enserio eran muy bonitos.
-¿Qué?- Dijo algo sonrojada.
-Nada- Dije riendo- Solo que tus ojos son bellísimos.
-Gracias- Murmuro.
Asentí.
Esta chica es callada y reservada, joder ojala Zoe fuera así a veces,aunque también me gusta escucharla.
-Y… ¿Qué tal es Cristian?, ¿Te trata bien?- Pregunte con curiosidad.
Soltó un suspiro.
-Es muy bueno, realmente me trata muy bien- Dijo con una sonrisa algo tensa.
-Vaya, déjame decirte que me sorprende, supuse que sería muy frio y cero comprensivo, pero al parecer me equivoque.
-Si- Asintió.- Supuse lo mismo, pero no, es todo un caballero de película.
Lo dijo con un tono extraño, pero decidí ignorarlo.
-Me alegro por ustedes- Dije poniendo mi mano en su hombro.
-Gracias- Dijo bajando la mirada.
No sé, se veía algo rara.
-No te conozco, pero, ¿Segura que estas bien?- Le dije.
-Oh si, bien gracias- Dijo apretando los puños.
No le creo, actuaba muy extraño.
Abrí la boca para hablar pero ella me interrumpió.
-En fin, gracias por preocuparte Taylor, pero debo irme, con permiso- Dijo con amabilidad.
-Eh…está bien- Dije algo aburrido.
Quería conocerla un poco más, pero aparentemente ella no a mí.
Se levantó y entro a la cabaña desanimada.
-¡¿Qué le hiciste?!- Dijo Cristian molesto.
-N-Nada- Dije sin entender que hice mal.
Me dio una mirada matadora y entro a la cabaña.
No lo comprendía.
¿Dije o hice algo malo?
-¿Qué paso amor?- Llego Zoe- Escuche los gritos de Cristian.
-No lo sé- Dije frustrado- Creo que incomode a la novia de Cristian, pero no le dije nada malo, ni le hice nada, ¿Crees que la ofendí?
Negó con rapidez.
-Ella es así, tiene la fama de ser la novia del futuro Alfa en la cabeza, y no le gusta hablar mucho con nosotros- Sonrió reconfortante- No te preocupes, Alice es así, nada que ver contigo.
-Mmm...¿Quieres decir que es egocéntrica?- Le pregunte.
Asintió.
-No parece, luce como buena persona- Dije arrugando la frente.
-Oh ella aparenta ser la buena y tierna con todos, pero es egoísta, egocéntrica, orgullosa y creída.
-¿Por qué creída?
-¡Adora presumir sus ojos!, lo hace constantemente, solo porque parecen dos estúpidos limones.
Reí.
-Pero tus ojos también son muy bonitos, parecen dos bellos solecitos- Trate de animarla.
Volteo los ojos y se sonrojo.
-Segura que Alice es así, ¿O son tus celos?- Dije enarcando la ceja derecha.
-¡No tengo porque tenerle celos de nada!, yo la conozco más que tú, es todo- Dijo cruzándose de brazos.
Reí negando.
-Está bien, voy a creerte- Dije al fin.
Me vio mal y golpeo mi hombro bromeando.
Le sonreí y saque la lengua.
-Pareces un niño pequeño- Se quejó divertida.
-Oh vamos, te encanta que me porte así- Le seguí el juego.
-Puede ser- Dijo tomando mi barbilla y dando un corto beso.
No lo sé, pero a veces sentía sus besos raros, como si hubiera besado a alguien más, pero no es posible.
Acaricie su pelirrojo cabello y luego pase mi pulgar por sus pecas.
Pero lo único que paso por mi mente fue el cabello pelinegro y la piel blanca de Alice, al igual que sus curiosos ojos.
Aunque se veía bonita, aquella humana se había quedado en mis pensamientos.
-Alice va a ser transformada dentro de poco, eso significa que yo dejare de ser la mujer lobo líder.- Dijo con algo de tristeza.
-Zoe, linda, eso es lo de menos, que seas la líder o la más fuerte no interesa, lo importante es como seas en el fondo, sin importar las etiquetas que te pongan- Trate de animarla.
-Supongo- Dijo encogiéndose de hombros.
Soltó un suspiro.
-T-Te amo mucho Taylor- Dijo ocultando su rostro sonrojado.
¿Qué podía decirle yo?
Es mi Mate y novia, pero no sentía amarla todavía, y no mentiría sobre mis sentimientos nunca.
-Que tierna- Dije dándole un abrazo por los hombros.
Zoe bajo la mirada con algo de confusión y decepción.
Sé que le dolió, pero sería herirla más si se llegara a enterar que no siento lo mismo.
No soy tan hipócrita.
-Yo te quiero mucho pelirroja- Dijo revolviendo su cabello.
Ella rio por lo bajo.
Pero no dijo nada.
Y respete su silencio, porque sé que fue una gran decepción para ella.
-Eh, voy a ir a caminar un rato- Dijo con los ojos llorosos.
Mierda, no quería hacerla sentir mal.
Pero mejor que se tome su tiempo, no quiero presionarla a que se quede.
-Está bien- Fue lo único que dije.
Salió corriendo mientras se limpiaba las lágrimas.
Oh no, enserio no quería esto.
-¡Zoe!- Le grite, pero ya se había ido.
-¡Joder!- Grite pasando mis manos por mi rostro.