15 años antes

­ —Hay niños bajo esos escombros –se escuchaba a lo lejos —rápido debemos sacarlos, no hay que perder tiempo.

—Espera debemos ser cuidadosos, si hacemos un movimiento en falso, podemos ocasionar otro derrumbe— decía otra voz.

Solo había obscuridad, los minutos posteriores transcurrieron en silencio.

—Aquí hay alguien, es un niño, ayudemos.

—Mi hermana y otra niña siguen ahí, sálvenlas yo estoy bien —grito el niño con desesperación en su voz— Señor por favor rescátenlas,— se dirigió a un joven de unos 25 años de edad, tenia las manos llenas de polvo por los escombros que había retirado en la última media hora.

—Tranquilo necesito que te serenes para poder ayudarte ¿de acuerdo? —el niño asintió— ¿Cómo te llamas? — le pregunto el joven al momento que colocaba ambas manos sobre los hombros del pequeño.

—Lucas —dijo el niño mientras se limpiaba las lágrimas que resbalaban sobre su pequeña mejilla.

—Bien Lucas, las otras dos niñas a ¿qué distancia se encontraban más o menos?

—Estaban junto a mi íbamos tomados de la mano antes de que todo se nos cayera en cima.

—Bien lucas no descansaremos hasta encontrarlas, te lo prometo— volteo a ver a un paramédico que estaba a un costado de él —llévenlo a que lo revisen.

—¡No! —Grito Lucas— yo me quedare aquí hasta que salven a mi hermana y a su amiga

—¡Lucas! —grito el muchacho— necesito que te calmes ¿ok? estamos haciendo todo lo posible por rescatarlas— pero sería de más ayuda si nos apoyas con ir a que te revisen.

—¡SILENCIO! — grito una mujer, casi de forma inmediata todos guardaron silencio—¡SE ESCUCHA ALGO! — al principio no se percibía nada poco después se comenzaron a oír algunos sollozos.

¡Ayuda! por favor—gritaba una voz

—Sáquenos de aquí— decía otra con voz débil.

—Es mi hermana y su amiga ¡AYÚDALAS! — grito Lucas.

—Las sacaremos— sonrió el chico—pero necesito que te apartes para que no nos compliques la labor de sacarlas de entre los escombros— el pequeño Lucas asintió.

—Bien, retiremos los escombros con mucho cuidado con un pequeño error que cometamos podemos dañar a las niñas —Las personas prosiguieron a retirar con sumo cuidado los escombros tardaron unos 20 minutos en localizar el lugar exacto donde estaban las niñas.

—¡Aquí esta veo su mano! —dijo una mujer de cara redonda

—Bien tengan cuidado recuerden que la estructura está muy sensible.

Después de 10 minutos lograron sacar a la niña, tenía su rostro empolvado y se alcanzaban a ver algunos rasguños

—Es mi hermana —grito Lucas, al momento que se disponía a salir corriendo hacia ella.

—Espera no sabemos en qué condición se encuentre deja que la chequen, tú también debes de hacerte un chequeo.

El niño obedeció se acercó con los paramédicos y dejo que lo revisaran, pasados unos minutos el paramédico le menciono que no tenía lesiones graves solo tenía algunos arañazos y pequeño golpes pero nada de gravedad.

—¿Puedo ver a mi hermana? ya terminaron de revisarla ¿Cierto? —el paramédico negó con la cabeza y añadió—No lo sé, posiblemente si, tendríamos que ver.

En ese momento se escucharon aplausos parecía que ya encontraron a la otra niña pues los paramédicos corrían con una camilla en mano.

—Disculpa, ¿tú eres Lucas? Tu hermana quiere verte—dijo señalando otra ambulancia—oye espera un momento grito al ver que el chico echo a correr, lo detuvo otro paramédico.

—Pero ¿porque me detiene? —Lucas lo miro confuso.

—Escucha —hizo una pausa como meditando lo que diría a continuación —Es respecto a tu hermana, esta delicada.

—Eso no he cierto ¿cómo puede estar delicada si no estaba sangrando?

—¡Escúchame! es cierto que tu hermana no sangro, pero tiene daños internos, sus costillas están rotas y tiene perforados varios órganos es posible que no sobreviva.

— ¡NO! —grito Lucas—usted miente mi hermana está bien ¿Por qué es tan cruel señor? ¿Acaso usted le desea mal a mi hermana?

—Cálmate, tu hermana te puede escuchar y se puede alterar necesito que cuando la veas te encuentres calmado ¿entiendes? —Lucas asintió— yo no le deseo mal a tu hermana simplemente te hablo con la verdad. —Lucas hizo caso omiso a esto ultimo y se acercó a la ambulancia.

—Hola hermanita—dijo Lucas tratando de parecer calmado, aunque por dentro sentía un gran dolor en el lado izquierdo del pecho, le dolía el corazón

—Hola Lucas ¿cómo estás? ¿te lastimaste? —dijo

Lucas negó con la cabeza —Lucas sé que muy pronto estaré con nuestros papás—a Lucas le sorprendió escuchar eso, pero su hermana continuo—Quiero pedirte un favor, cuida de Majo, ella no tiene a nadie que se preocupe por ella, yo al menos estaba contigo y no me quede sola, ella es una buena persona y sería una buena hermana, además no quiero que te quedes solo, ella te acompañara y te apoyara. Hermanito no llores, yo estaré a tu lado y aunque no me puedas ver siempre recuerda que pase lo que pase yo te querré por siempre y promete que cumplirás tus metas—Lucas asintió con lágrimas en los ojos, le dolía la sola idea de perder a su hermana y aunque se quedaba con Majo no sería lo mismo