Mi vida a tu lado

Cap 3 ( Ana Paula )

Después de salir de la empresa del señor Manson, me voy caminando a la parada de bus que no esta tan lejos de aquí y así me da tiempo de despejar mi mente y distraerme después del raro momento que hubo entre nosotros.

De repente escucho mi teléfono timbrar y cuando contesto veo que es una mujer, que por su tono de voz se nota que es mayor.

 º - ¿Buenas tardes, hablo con la señorita Rodríguez? -

 º - ¿Buenas tardes, si habla ella que desea? -

 º - Le hablo desde la empresa Manson Distribution, para informarle que usted ha sido seleccionada para el puesto. -

Me quedo un rato procesando si es verdad lo que acabo de oír, hasta que la voz de la misma señora me saca de mi trance.

 º - ¿Señorita se encuentra allí? -

 º - Ho, hola, si si, aquí estoy, gracias gracias por esta oportunidad- No puedo disimular la felicidad que estoy siento y hasta bailo un poco. -

 º - Me alegra señorita, mañana a las 8:00 am en punto debe estar presente aquí. -

º - Si señora, allí estaré puntual. -

 º - Que pase buenas tarde señorita. -

 º - Igualmente, señora. -

Estoy muy pero muy feliz, tengo que ir a casa a preparar todo, necesito descansar bien porque sospecho que mañana será un día movido.

Retomo mi caminata hacia la parada, esperando unos minutos noto que un auto muy elegante se estaciona delante de mí, cuando baja la ventanilla noto que es el señor Manson, extrañada espero que hable.

 º - ¿Buenas tardes señorita Rodríguez, desea que la lleve a su casa? -

º - Buenas tardes señor, no gracias yo puedo esperar 
un ratito más ya que no tarda en llegar el bus. -

 º - Insisto déjeme llevarla y así estaré más tranquilo con mi conciencia al saber que un empleado mío está seguro. -

 º - Bueno señor muchas gracias- cuando abre la puerta del auto casi al instante su perfume golpea mis sentidos, el auto huele a él y a nuevo, olores irresistibles. -

 º - ¿Bueno señorita Rodríguez, hacia donde nos dirigimos? -

Salgo de mi letargo y le doy la dirección de mi departamento, vamos sumidos en un silencio nada incómodo.

Oyendo alguna música en la radio relajante, ideal para calmar mis nervios al estar sentada al lado de él, de reojo puedo ver que de verdad es muy guapo. De repente voltea y me cacha mirándole, me sonrojo y vuelvo mi vista a la ventana. Después de un rato llegamos a donde vivo, me quito el cinturón y me giro para despedirme y darles las gracias

 º - Muchas gracias señor Manson por traerme, disculpe las molestias. -

 º - No se preocupe señorita Rodríguez, fue un placer, espero que sea de su agrado trabajar para mí y se sienta muy cómoda, pero si le diré que soy amante de la puntualidad y del orden y si quiere seguir con el trabajo ya sabe lo que tiene que hacer. - 

 º - Entendido señor, muchas gracias, que tenga buenas noches. -

 º - Igualmente, señorita Rodríguez, hasta mañana -

Ya dentro de mi departamento busco que cenar, saco de la nevera una pasta con carne que tenia de ayer y la meto al microondas.

 Mientras se calienta me voy a mi cuarto a quitarme la ropa y ponerme más cómoda, escucho el pitido en la cocina que me indica que mi comida ya está lista. 

Me voy directo a la nevera a sacar un jugo y servirlo y también buscar un plato para echar lo que hoy será mi cena, me voy al mueble y enciendo la tv. 

Al terminar de comer voy a la cocina a limpiar todo y me voy otra vez a mi cuarto a darme una ducha, me quito todas mis prendas y me adentro en la ducha, me lavo mi cabello con paciencia, después de media hora salgo para secarme, me echo mis cremitas y me desenredo mi larga melena, he pensado en cortarlo, pero no tengo el valor para hacerlo.

 Me meto a mi camita y de inmediato se me viene a la mente esos hipnoticos ojos azules, con esa cara me sumerjo en el mundo de los sueños.




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