III. Un Verano De Amores Y Envidia

Iremos a la casa de mi tía Sonia todo el verano, es en un campo muy grande, hay un cascada enorme y hermosa me encanta ir a bañarme en ese lugar con la cami lo pasábamos muy bien, ojalá hubiera sido así como cualquier otro típico verano, este fue muy distinto. 

Cuando llegamos a la casa de mi tía la vimos muy cambiada era como si fuera otra persona, minutos más tardes nos dimos cuenta cual era l razón de su cambio tan radical. Ya instaladas fuimos a cabalgar, yo siempre cabalgaba a la Luna una yegua muy grande, blanca, con una marca de nacimiento que parecía un corazón negro en su ojo derecho. Mi hermana siempre montaba al Rayo un caballo negro, mucho más grande que Luna y era muy rápido, por eso su nombre, ese caballo era el favorito de mi hermana eran hecho el uno para el otro, ambos tenían sentimientos ocultos, y muchos secretos. 

El Rayo lo encontraron moribundo a la orilla de un río, era recién un potrillo, mi hermana al verlo le grito a mi abuelo el cual llegó muy rápido, la Cami